Remedios caseros para tener unos pies hermosos suaves

Las ampollas y callos vienen a ser una especie de distintivos en la mayoría de pies. Ellos nos llevan a través de la vida y, sin embargo, a menudo los descuidamos. Muchas veces los exprimimos dentro de zapatos muy ajustados o los exponemos a demasiada humedad. Otras veces, la piel se seca, debido a que no recibe ninguna atención. Afortunadamente, aquí te compartimos los mejores remedios caseros para conseguir unos pies hermosos.

pies hermosos en agua de rosas

Lo que sucede es que normalmente no le damos la debida importancia a nuestros pies hasta que empiezan a dolernos. Sin duda, merecen un cuidado especial durante todo el año y debemos protegerlos con calzados de acuerdo a su medida.

En sí mismo, los callos parecen inofensivos y que no causan problemas, pero pueden tener consecuencias dolorosas. Además de provocar serias molestias al caminar, los callos pueden servir como puerta de entrada para los gérmenes. Sin embargo, la aplicación de estos remedios caseros puede ser suficiente para volver a tener unos pies sanos y hermosos.

Vinagre de manzana para tener unos pies hermosos

El vinagre de manzana se suele utilizar como remedio casero para eliminar los callos y tener unos pies hermosos.

  • Agregar el vinagre de manzana al agua de la bañera y remojar los pies y luego frotar con piedra pómez.
  • Empapar un algodón con el vinagre de manzana y pegarlo firmemente a los pies. Dejar actuar el vinagre desde la noche hasta la mañana. Lo mejor sería utilizar un calcetín, para evitar que el algodón se resbale o se separe por la noche.

Después del tratamiento puedes mover el callo ablandado con una piedra pómez o el utensilio más indicado. Repetir esta aplicación diaria hasta que el callo pierda espesor y no resulte antiestético.

La aspirina como un remedio casero para unos pies saludables

Una pasta de aspirina, jugo de limón y agua puede ayudar a eliminar los callos gruesos de los pies. También, tiene un efecto ligeramente adormecedor, que por supuesto es beneficioso cualquier dolor existente.

  • Moler alrededor de seis tabletas de aspirina hasta obtener un polvo fino.
  • Agregar aproximadamente la mitad de una cucharadita de jugo de limón y unas gotas de agua al polvo.
  • Agitar bien la mezcla para que se forme una pasta.
  • Aplicar la pasta en las áreas donde exista callos.
  • Envolver una bolsa de plástico o papel de aluminio nuevo alrededor del pie.
  • Envolver el pie con una toalla o ponerse calcetines gruesos.
  • Dejar que la pasta actúe unos 10 minutos antes de enjuagarla y frotar el callo con una piedra pómez.

Piedra pómez para tener unos bellos pies

mujer usando la piedra pomez para embellecer los pies

Este elemento representa un auxiliar indispensable de los remedios caseros para poder obtener unos pies hermosos sin callos. Aunque se puede utilizar un utensilio diferente a la piedra pómez para eliminar los callos, prefiero la piedra.

El uso de la piedra pómez para lograr unos pies hermosos es como complemento a algún tipo de tratamiento previo. Dichos tratamientos sirven para suavizar los callos y permitir que la piedra pueda obtener un mejor resultado. Después de la piedra se recomienda un cepillo para poder eliminar toda la rugosidad de la superficie.

Sales de Epsom como remedio para los pies

El sulfato de magnesio, también conocido como sal de Epsom, es un remedio casero para el cuidado de la piel. En esta oportunidad lo utilizaremos como remedio casero para eliminar los molestos callos de los pies. Para esto, se debe preparar un baño agregándole las sales al agua para que ablande los callos. Así, resulta ideal para eliminar imperfecciones y mantener más saludable la piel del pie.

  • Para una tina llena de agua se debe agregar alrededor de dos tazas de sales de Epsom. Si solo quieres lavar tus pies, un puñado de sal de Epsom es más que suficiente. Además, se puede agregar algunas gotas de algún aceite esencial para mejorar el tratamiento.
  • Remojar los pies por lo menos veinte minutos.
  • Secar a fondo y luego frotar las áreas de los callos con una piedra pómez u otro removedor recomendado para tal fin.

El baño de pies con sales de Epsom se debe aplicar al menos tres veces por semana. Pero lo recomendable es hacerlo todos los días, para suavizar siempre los callos. No te olvides de limpiar todos los rastros de piel desgastada y aplicar alguna crema para los pies.