El amor es probablemente el sentimiento más difícil de entender, y es que la carga cultural que tiene es tan grande que no nos atrevemos nunca a hablar de él abiertamente.
Descubrir si estamos enamorados es mucho más que pensar continuamente en la otra persona. Hay una mezcla de deseo, compromiso y confianza que debe darse en conjunto para que podamos estar seguros de lo que sentimos.
Señales para saber si estás enamorado
Es necesario aclarar que el enamoramiento es sólo una etapa del camino al amor, es la parte inicial que puede o no llevarnos al amor verdadero, porque el enamoramiento está lleno de nuestras propias ilusiones y prejuicios, de nuestras propias ideas del amor, que tras pasar por esta etapa, si lo conseguimos junto a la persona de quien nos enamoramos, será una aventura para conocer juntos la verdad del otro y poder llegar así, a conocer el amor de verdad.
Aquí te ofrecemos una serie de señales prácticas y concretas que nos indican si estamos enamorados:
Ya no te fijas en otras personas
Esta es la más clara posiblemente. Cuando caminamos por la calle o nos movemos en transporte público es fácil que nos ‘enamoremos’ de alguien que vemos por primera vez, ya sea por un atractivo físico objetivo o por una simple atracción del momento. Enamorarse impide que esto pase, convirtiendo a las personas del género opuesto en gente que simplemente está sin más implicación alguna.
Cualquier cosa de esa persona nos interesa
Así es, por mucho que nos cueste reconocerlo. No importa lo que nos cuente, todo lo que tenga que ver nos parecerá imprescindible, queriendo saber todo lo posible. Es una señal directa para todos los que nos rodean, aunque hay que tener cuidado de no confundirla con un simple encaprichamiento; cuando notemos que insistimos mucho en saber más puede que nos encontremos en este caso.
Imaginas situaciones juntos
Desde paseos románticos hasta mostrarle sitios de la ciudad solo por saber su opinión, queremos hacerlo todo con ella y con nadie más. A medida que pasa el tiempo se nos van ocurriendo más y más situaciones juntos. Es un buen indicador también cuando queremos saber si estamos perdiendo el amor que sentíamos por esa persona ya que inevitablemente irá unido al interés y las ganas de descubrir lugares juntos.
Todo lo que dice es misteriosamente divertido
Seguro que lo habréis vivido alguna vez. Diga lo que diga, aunque sea el peor chiste del mundo, nosotros nos reiremos. Ocurre también delante de otras personas las cuales claramente se darán cuenta de lo que está pasando. Puede ser una buena forma de declarar nuestro amor indirectamente ya que si llega a un punto muy evidente la persona de la que estamos enamorados también se percatará de que algo ocurre.
Nos enfadamos si no nos hace caso
No todo es de color de rosa cuando estamos enamorados. Aunque todavía no estemos seguros de lo que sentimos habrá ocasiones en las que notaremos cómo nos enfadamos cuando no conseguimos llamar su atención. Esto se extiende a ver cómo habla con otras personas o, llegado el caso, que haya más gente interesada en conseguir su atención. Estas situaciones hay que controlarlas porque una mala actuación nuestra puede arruinarlo todo.
Somos ‘fieles’ y ‘celosos’
Podemos tener la oportunidad de estar con alguien más, de tener alguna conversación más seria de lo normal o incluso llegar a una relación mayor que la amistad, pero lo dejamos pasar porque estamos pensando en la persona de la que estamos enamorados. Somos ‘fieles’, incluyendo la fidelidad del pensamiento, incapaces de vernos con alguien que no sea ella.
A su vez nos convertimos en unos celosos empedernidos, llegando a sentarnos mal que se vea con amigos de los que sospechamos que pueden querer algo más con ella.