Cómo diagnosticar el hipotiroidismo y su adecuado tratamiento

La disminución en la producción y liberación adecuada de hormonas tiroideas puede causar una serie de síntomas, en el contexto de una patología denomina hipotiroidismo.

Una mujer que padece hipotiroidismo

El hipotiroidismo es un trastorno tiroideo frecuente, estimándose que afecta cerca del 2% de la población mundial.

Conceptos sobre el hipotiroidismo

Como ya sabemos, las hormonas tiroideas (triyodotironina libre y tiroxina libre denominadas, T3 libre y T4 libre, respectivamente) son fundamentales para el funcionamiento de varios órganos. Por lo tanto, la disminución de sus niveles circulantes por debajo de límites normales, causa disfunción en diversos aparatos y sistemas, incluidos las neuronas y el corazón.

El hipotiroidismo se define como la disminución de los niveles en sangre de T4 libre, en conjunto con la elevación de la concentración de la hormona estimulante de tiroides (TSH). En algunos casos, la TSH puede estar elevada sin verse afectados los niveles T4 libres circulantes, denominándose a esta condición, hipotiroidismo sub-clínico.

Causas del hipotiroidismo

Para la síntesis de las hormonas tiroideas se necesita la adecuada producción de hormona liberadora de tirotropina (o TRH, que se genera en el hipotálamo), de TSH (que se produce en la hipófisis) y el correcto funcionamiento de la glándula tiroides.

En el hipotiroidismo central (por presencia de tumores, isquemia, necrosis postparto, entre otras) se encuentran afectadas la hipófisis (hipotirodismo secundario) o el hipotálamo (hipotiroidismo terciario).

Sin embargo, la mayoría de los hipotiroidismos son primarios (en el 95% de los casos) asociados a la afectación de la glándula tiroides. Entre sus causas se encuentran: el bocio por deficiencia de yodo, causas autoinmunes como la tiroiditis de Hashimoto (producida por anticuerpos que atacan a la tiroides), tiroidectomía (procedimiento quirúrgico indicado para tratamiento de algunos tipos de hipertiroidismo), radiaciones, hipotiroidismo congénito, hipotiroidismo inducido por medicamentos, entre otras.

¿Cómo se diagnostica el hipotiroidismo?

El diagnóstico del hipotiroidismo se basa en los resultados de laboratorio, asociados a los síntomas que refiere el paciente. Sin embargo, el hipotiroidismo es una enfermedad muy variable y algunos pacientes pueden tener niveles de T4 disminuidos y no presentar sintomatología. Algunos síntomas referidos por los pacientes son:

  • Aumento de peso.
  • Trastornos del sueño.
  • Presencia de bocio tiroideo (aumento de volumen difuso de la glándula tiroides).
  • Edema o hinchazón en cara.
  • Fatiga o cansancio.
  • Intolerancia al frío.
  • Estreñimiento.
  • Piel seca.
  • Alteraciones menstruales.
  • Dolores articulares leves.
  • Bradicardia (disminución de la frecuencia cardíaca por debajo de los valores normales).
  • Habla y curso del pensamiento lentos.

Asociado a la sintomatología se deben realizar pruebas de laboratorio, en primera instancia se deben solicitar los niveles de TSH séricos. Si estos están elevados, debe solicitarse los niveles de T4 libre. Estas dos mediciones son obtenidas desde una muestra de sangre, en horas de la mañana, durante el ayuno del paciente. Si los resultados arrojan una TSH elevada y una T4 libre disminuida, se sugieren repetirlas para corroborar el diagnóstico de hipotirodismo.

Ante este diagnóstico, se deben solicitar otras pruebas de laboratorio para determinar la causa exacta de su producción y donde se encuentra la falla original (en la tiroides, hipófisis o en el hipotálamo). En el caso de que se sospeche de patología autoinmune se solicitan los niveles de anticuerpos anti-tiroideos (como los anticuerpos antiperoxidasa o Anti- TPO).

También será necesario realizar un ultrasonido tiroideo y en casos en los que se sospeche patología de la hipófisis o del hipotálamo, se solicitarán estudios de neuroimagen como una resonancia magnética cerebral. Otros estudios solicitados en el hipotiroidismo sub-clínico serán la hematología completa y el perfil lipídico.

¿Cuál es el tratamiento adecuado del hipotiroidismo?

En la mayoría de los casos el hipotiroidismo es una condición crónica y permanente que requiere tratamiento continuo. El tratamiento se basa en el suplemento de hormonas tiroideas con levotiroxina (T4) sintética administrada vía oral, en horas de la mañana y durante el ayuno del paciente, de manera diaria y continua.

La levotiroxina sintética se prescribe en microgramos, por lo que sus dosis deben ser tomadas de manera exacta y de forma ininterrumpida, ya que un pequeño cambio pudiera condicionar la continuidad de los síntomas del hipotiroidismo o por el contrario, producir síntomas de hipertiroidismo por exceso de la dosis requerida.

El objetivo principal del tratamiento es normalizar los niveles de TSH, además de disminuir el tamaño del bocio (de encontrarse presente), aminorar los síntomas y prevenir las complicaciones del hipotiroidismo severo.

Cuando se inicia el tratamiento, los niveles de TSH y T4 libre deben ser monitorizados para evitar sobrepasar los niveles requeridos de hormonas tiroideas. En pacientes ancianos y con comorbilidades cardiovasculares se deben iniciar dosis bajas de levotiroxina y ascenderse paulatinamente, de ser necesario, según la monitorización de los síntomas y de los niveles hormonales.

Es importante que el paciente con hipotiroidismo acuda constantemente al médico para que su tratamiento sea vigilado y controlado de la mejor manera posible.