La moda es caprichosa y al igual que las tendencias, tienden a ir y venir a su antojo no dando tiempo en algunas ocasiones; a adaptarnos a los nuevos lineamientos. Algo parecido ocurre con llevar barba.
Hasta hace tan solo algunos años, se consideraba que llevar barba en el trabajo no era lo más indicado y que para lucir una imagen más seria y formal; era fundamental estar muy bien rasurados. Inclusive, ni llevar la barba muy corta se recibía con buenos ojos.
Afortunadamente, esos tiempos han ido evolucionando y hoy por hoy puede apreciarse a un sin números de personas, que ostentan sus barbas en cualquiera de sus muy diversos estilos y presentaciones.
Literalmente hablando, las hay para todos los gustos.
Si está en tu mente la intención de dejarte crecer la barba o si acaso ya la llevas pero estas en la búsqueda de una nueva apariencia, es prudente que consideres el hecho de que no todos los estilos te van a prestar de la forma más idónea.
Realmente dependerá en forma directa de la forma que tenga tu rostro.
Esto en el fondo es solo una consideración. La decisión del estilo a llevar se ajusta más al gusto de cada quien o si se está conforme con la apariencia que tiene el rostro.
Esto, por supuesto, indiferentemente que el estilo que se haya elegido vaya o no acorde con el tipo de fisonomía facial.
Características de una cara alargada
En líneas generales un rostro se considera alargado, cuando la distancia que existe entre la nariz y la barbilla es 0,5 cm mayor al resultado de la sumatoria de la distancia total del rostro dividido entre 3.
Bajo esas circunstancias, el rostro es apreciablemente más largo que ancho y la barbilla tiende a ser un poco prominente.
Otras apreciaciones, son las siguientes:
- La mandíbula, la frente y los pómulos presentan el mismo ancho.
- Ópticamente se aprecia que la barbilla luce bastante alargada.
- El rostro es visualmente más largo que ancho.
- Todo lo que constituye el contorno de la cara, es visiblemente más delgado.
Si un rostro presenta todas las características anteriormente señaladas, entra directamente en la clasificación de rostro alargado.
Estilos de barba que se adecuan mejor al rostro alargado
Al entender de los estilistas, lo que se busca con la barba adicionalmente al cambio de apariencia, es tratar de aminorar el efecto visual que causan las formas más marcadas que tiene el rostro y suavizar un poco sus facciones; para que este luzca un poco más armónico y simétricamente equilibrado.
Básicamente, elegir el estilo de barba más acorde con su forma.
En este sentido, vale la pena tomar en cuenta las siguientes consideraciones:
1.- La barba completa es una opción
Cuando el rostro es alargado, la mayor parte de su fisonomía se encuentra dispuesta en sentido vertical. Por esta razón, el estilo de barba a elegir debe ser uno que abarque en toda su extensión una forma uniforme.
En otras palabras, la barba debe mantener una distribución pareja y uniforme en toda la parte inferior de la cara; sin permitir que esta crezca en exceso en la región del mentón, ya que visualmente haría parecer el rostro aún más alargado.
2.- Atención en la zona de las patillas y mejillas
En esta zona no es conveniente afinar mucho la línea de la barba. La mejor opción que hay es dejarlas un poco anchas y así evitar darle una impresión longitudinal al rostro.
En lo que al perfilado de las mejillas se refiere, podría privar el gusto de la persona siempre y cuando se tenga el cuidado de no dejarlas demasiadas estrechas.
3.- El bigote también juega su papel
Intenta llevar una barba completa, dejándola un poco más larga en los laterales y algo más corta en la región de la barbilla, para que de esa forma el rostro tienda a parecer más corto.
También puedes intentar llevar un bigote que sea de cortas dimensiones, para que te ayude a complementar de una manera armónica la apariencia de un rostro alargado.
4.- Recorta frecuentemente la barba
Otro estilo apropiado para el rostro alargado, es el de formar un triángulo entre el bigote y la barba, debiendo ser recortados a diario al igual que las mejillas y el cuello.
