Descubre los beneficios de hacer mandalas y mejorar tu rendimiento

Los mandalas han tenido una gran acogida en occidente estos últimos años, gracias a los beneficios descubiertos para la armonía y la relajación. Los hallazgos han sido realmente sorprendentes, tal y como podrás ver a continuación.

Conoce los beneficios de hacer mandalas

Este círculo mágico que aparece de modo simbólico en todas las culturas, suele ser circular y está formado por formas geométricas más bien básicas. Donde mejor se conoce es en la cultura asiática y la India, debido sobre todo a su íntima relación con lo espiritual. Su impacto en occidente ha sido reciente, y poco a poco se está expandiendo, incluso como un recurso terapéutico.

Beneficios de dibujar o colorear un mandala 

Los psicoterapeutas recurren, en multitud de ocasiones, a técnicas para afrontar la ansiedad, vencer los miedos y reducir el estrés. Dentro de esas técnicas se van incorporando estrategias y hallazgos de otras culturas, tales como la meditación o mindfulness, y también los mandalas. Estas técnicas milenarias realmente no son ninguna novedad en otros países. Sin embargo, en la actualidad, los investigadores han estudiado su utilidades terapéuticas.

Beneficios de los mandalas

Estos son algunos de los beneficios más reconocidos que tiene el acto de hacer mandalas en un contexto terapéutico:

  • Beneficios espirituales, que facilitan profundos cambios internos. Este tipo de concentración contribuye el encuentro con la paz y la sabiduría.
  • Excelente técnica para aprender a concentrarse. Quien dedica su tiempo a realizar un mandala está a su vez ejercitando su concentración, poniendo toda su atención al momento presente. Esta es una forma de calmar la mente y los pensamientos que nos angustian, situándonos en el aquí y el ahora.
  • Disminución de la ansiedad y el estrés. El proceso de creatividad que requiere crear un mandala ayuda a las personas con depresión, excesiva preocupación y periodos frecuentes de tristeza. Realizar esta tarea nos ayuda a expresarnos artísticamente, reduciendo la ansiedad y entablando una relación con nosotros mismos, que nos ayuda a ser más tolerantes y comprensivos.

Tal y como se puede comprobar crear un mandala es mucho más que dibujar o colorear, es iniciar un proceso de introspección donde la conexión con uno mismo y con el mundo se torna saludable. Esta técnica ya se utiliza en numerosos contextos terapéuticos relacionados con la salud y el bienestar; con la intención de promover las siguientes fortalezas y actitudes:

  • Relajación.
  • Creatividad.
  • Concentración.
  • Atención.
  • Espiritualidad.
  • Conocimiento interior.
  • Equilibrio.
  • Nivel de conciencia.
  • Memoria.

En definitiva, podemos decir que el proceso de crear un mandala es un acto saludable, que ayuda a cualquier persona sin importar su edad. Es recomendable para todo el mundo y no tiene ninguna contraindicación. Los estudios científicos avalan sus beneficios, mostrando que es una herramienta eficaz en el ámbito terapéutico.

La sabiduría de este dibujo simbólico ya no es un recurso exclusivo de la cultura oriental, sino que su práctica también se ha extendido a nuestro mundo de occidente, para que podamos beneficiarnos de lo que supone la creación de este círculo mágico; que posee cualidades que habían sido hasta ahora totalmente desconocidas. Si aún no has experimentado con la creación de un mandala ¡No esperes más!