Muchas personas están tan acostumbradas al uso de champús que no le sientan bien sin entender por qué. Hoy planteamos que los champús convencionales arruinan el cabello y sus químicos podrían afectar tanto la piel como el medioambiente. Por eso, siempre es recomendable utilizar champú natural.
Diferencias entre champú convencional y champú natural
Antes de continuar con el desarrollo del artículo, deberemos señalar la diferencia entre los champús convencionales y el champú natural. Veamos las diferencias entre ambos:
Champú Convencional
La gran mayoría de las personas están al tanto de la función principal del champú. Este es un líquido que se aplica sobre el cabello con el principal propósito de eliminar todo lo sucio.
El champú debe eliminar las grasas, la caspa y todas las impurezas que puedan hallarse en el cuero cabelludo. A pesar de que éstos suelen ser muy eficientes, los componentes que contienen en ocasiones dañan el cabello.
Existen algunos champús que poseen químicos extremadamente dañinos para tu cabello y tu piel. Por ejemplo, algunos poseen detergentes en su composición, lo cual puede romper la cutícula del cabello dejando graves daños como secuelas.
Otro de los componentes del champú convencional es el sulfato de sodio. Este componente puede tapar los poros de la piel e incluso propiciar la aparición de células cancerígenas.
El Sulfato de Sodio impacta fuertemente en el ambiente, además es muy tóxico, tanto para seres humanos como para animales. Es importante destacar que este componente no tiene ninguna clase de poder de limpieza. Esta sustancia únicamente sirve para generar la espuma.
Otro de los componentes presentes en esta clase de productos son los tensio-activos de los cosméticos tradicionales. Estos son agentes químicos que suelen irritar la piel y también causan daños al medio ambiente.
Además, esta clase de champú posee algunos conservantes, tales como parabenos, phenoxyethanol y metilisotiazolinona. Es importante mencionar que estos son muy nocivos para la salud del ser humano.
Champú Natural
Tal y como se mencionó hace un momento, los champús convencionales arruinan el cabello. Estos ocasionan graves lesiones en la piel y además ocasionan graves daños medioambientales.
Por el contrario, los cosméticos de origen orgánico tienden a ser mucho más saludables e incluso son más viables para el cuidado personal, y de nuestra salud.
Estos productos no poseen ninguna clase de materiales químicos que resultan ser perjudiciales. Con tan sólo ver la etiqueta en la parte posterior del envase, se puede constatar los elementos que se utilizaron para la fabricación del mismo.
Entre algunos de los principales beneficios que se desprenden del uso del champú natural está el que ayuda al ambiente. Además ayuda a fortalecer, a restaurar y a darle brillo al cabello de forma natural y saludable.
El champú natural ayuda también a prevenir la aparición prematura de las muy odiadas por muchas; las canas. Sumado a esto, es excelente para la salud del cabello en vista de que lo fortalece desde su propia raíz
Es importante tener presente que el champú natural no tiene en su composición ni parabenos, phenoxyethanol o metilisotiazolinona. Tampoco tiene ningún otro tipo de conservante artificial dañino para las personas.
La composición común del champú natural es basada en alcohol, el cual es totalmente inocuo. Además, éstos no utilizan ningún componente artificial para darle fragancia, únicamente se le aplican aceites naturales.
El champú convencional no es buena elección
El champú convencional arruina tu cabello, sin embargo el producto nunca tendrá esta advertencia. Por lo general contienen en su composición químicos de los cuales no conocemos pero que son muy dañinos. Aun así nosotros debemos cuidarnos por nuestra cuenta de este tipo de fraudes.
Los materiales que las empresas están utilizando para crear champú con costos más reducidos no resultan ser de buena calidad. Muchas veces simplemente están pensando en la ganancia que obtendrán al fabricar más por menor precio.
Estos productos están fabricados para ser atractivos al público y no hay dejarnos llevar por su simple apariencia. Además hay que tomar en cuenta que un buen olor o cantidad de espuma tampoco son señales de calidad.
Ya que nos hemos asegurado de que los champús convencionales arruinan el cabello debemos tomar en cuenta que los naturales lo protegen. Es importante tener mucho cuidado a la hora de comprar esta clase de productos, ya que los grandes fabricantes casi siempre prefieren mantener su fórmula, aunque cause daños a terceros.