La mayoría de las mujeres probablemente pueden saber que la píldora anticonceptiva puede causar que experimenten «efectos secundarios sexuales», pero ¿sabías que la píldora también podría influir sobre en qué personas se sienten atraídas las mujeres? ¿E incluso a quién eligen como pareja y la probabilidad de mantener su matrimonio?
¿Qué es atractivo a los ojos de una mujer que toma la píldora anticonceptiva?
Puede sonar como algo sacado de la ciencia ficción, pero (como todos sabemos) la realidad a veces supera a la ficción.
Antes de avanzar a fondo sobre los descubrimientos de esta investigación, primero recordemos de qué está hecha la píldora anticonceptiva (hormonas sexuales artificiales) y ¿qué hacen las hormonas sexuales? encender y apagar miles de millones de interruptores en las células de todo el cuerpo, influyendo en la versión de ti que es creada por tu organismo.
Esto significa que la píldora va a influir en tus circuitos cerebrales relacionados con el amor y el sexo. Sería imposible que no lo hiciera.
La píldora anticonceptiva podría influir en quién te atrae
Aunque esta idea y la investigación que se está llevando a cabo acerca de ella todavía aún están en una etapa muy temprana, los datos existentes sugieren que la píldora podría influir en quién te atrae, la dinámica de tus relaciones, la calidad de tu vida sexual, cuán celosa eres, cómo respondes al rostro de tu pareja, lo “sexy” que eres con los demás y tu probabilidad de divorciarte.
En otras palabras, la píldora puede influir en casi todo lo que importa cuando se trata de amor, sexo y relaciones.
Por ejemplo, en un estudio, los investigadores llevaron a mujeres heterosexuales a un laboratorio de investigación y les permitieron usar un programa especial de computadora para manipular la apariencia de fotografías de rostros masculinos y femeninos.
Podrían cambiar la apariencia de los hombres y mujeres en las fotografías ajustando la altura de la mandíbula, el ancho de la cara, la prominencia de los pómulos, etc.
Los investigadores pidieron a las mujeres que manipularan las características de la cara masculina para crear la cara de su pareja romántica ideal a corto o largo plazo (cara masculina).
También les pidieron que manipularan las características del rostro femenino para crear el rostro de una mujer máximamente atractiva. Las mujeres entraron al laboratorio y completaron esta tarea en dos puntos de tiempo diferentes: una vez antes de que comenzaran a tomar la píldora anticonceptiva y una vez alrededor de tres meses después de que comenzaron.
Menos masculinidad en el perfil de hombre que escoge una mujer al tomar la píldora
Cuando los investigadores compararon los dos conjuntos de imágenes (antes y después de la píldora), descubrieron que los rostros ideales masculinos, pero no femeninos, de las mujeres se volvieron significativamente menos masculinos una vez que comenzaron a tomar la píldora anticonceptiva.
En un segundo estudio, estos mismos investigadores analizaron si las mujeres que toman la píldora en realidad eligen hombres con rostros menos masculinos como pareja en relación con sus contrapartes que no toman píldoras.
Con este fin, compararon la masculinidad facial de un grupo de hombres cuyas parejas los eligieron cuando estaban tomando la píldora anticonceptiva con otro grupo de hombres cuyas parejas los eligieron cuando no la estaban tomando.
La masculinidad facial se midió haciendo que los rostros fueran evaluados por un grupo separado de participantes. Lo que encontraron fue que las mujeres que toman pastillas no solo prefieren rostros de hombres menos masculinos, también es más probable que elijan a estos hombres como pareja.
La idea de que las mujeres pueden elegir una pareja distinta cuando toman la píldora de la que habrían elegido originalmente, sugiere que la píldora puede tener ciertos efectos en la calidad y la dinámica de las relaciones a largo plazo de las mujeres.
Tal vez incluso puede aumentar el riesgo de divorcio o infidelidad. Esta situación también plantea una serie de preguntas que los investigadores no habían considerado muy importantes hasta ahora.
Si no es la masculinidad la atracción, ¿qué es?
Por ejemplo, si las mujeres que toman pastillas no están realmente tan interesadas en las señales de masculinidad, ¿qué están buscando exactamente cuando se trata de parejas?
Para encontrar una respuesta a esta pregunta, los investigadores realizaron una encuesta acerca de la calidad de la relación en un grupo de más de 2000 mujeres, cada una de las cuales tenía al menos un hijo en el momento en que se realizó la encuesta.
La mitad de las mujeres de esta muestra estaban tomando la píldora cuando conocieron a sus parejas y la otra mitad no. La encuesta hizo preguntas a las mujeres sobre la calidad de su relación con el hombre junto con el que engendraron a su primer hijo, independientemente de si todavía tenían una relación con él o no.
Lo que descubrieron fue que, las mujeres en su ciclo natural, además de elegir parejas con rasgos más masculinos, también parecen estar disfrutando más del sexo en comparación con las mujeres que eligieron a sus parejas cuando tomaban la píldora.
Sienten más excitación sexual, son más aventureras sexualmente, se sienten más atraídas por sus parejas. Simplemente están más interesadas en el sexo que las que toman la píldora.
Este fenómeno se presentó consistente en una investigación que demuestra que las mujeres en su ciclo natural, (al menos cerca de la ovulación, cuando la fertilidad es alta y el estrógeno es dominante) tienen un buen ojo (y oído) para ciertas señales de masculinidad.
Mujeres que no toman píldora se sienten atraídas por este tipo de rostro
El hallazgo particular de esta investigación es que las mujeres en sus días fértiles buscan rostros más masculinos, más profundos, voces más masculinas y encuentran a los hombres socialmente dominantes y seguros más atractivos que en los puntos menos fértiles de su ciclo.
Dado que las mujeres que toman la píldora no ovulan y se mantienen en un estado perpetuo de bajo nivel de estrógenos, la píldora puede disminuir el énfasis que las mujeres ponen en este tipo de rasgos, lo que lleva al desarrollo de una relación que tiene menos que ver con el sexo y más con otras cualidades.
Pero ¿cuáles son esas otras cualidades?
La investigación sugiere que las mujeres que toman píldoras anticonceptivas pueden concentrarse más en otro conjunto de cualidades que son bastante importantes para muchas mujeres. En particular, descubrieron que las mujeres que habían elegido a sus parejas cuando tomaban la píldora, estaban más satisfechas con la capacidad financiera e inteligencia de sus parejas que las mujeres que habían elegido a sus parejas cuando no la tomaban.
Esto es consistente cuando hablamos de que tomar la píldora hace que las mujeres cambien sus preferencias de pareja hacia cualidades que las ayudarían a mantenerse seguras cuando se preparan para el embarazo, lo que se cree que ocurre porque la píldora imita un estado hormonal en el que los cuerpos de las mujeres esperan para ver si un óvulo fertilizado puede implantarse.
Este suceso se repite en los resultados de la investigación de imágenes cerebrales. En comparación con las mujeres que están en su ciclo natural, las mujeres que toman píldoras exhiben menos actividad en los centros de recompensa del cerebro cuando miran rostros masculinos, pero más actividad en estos centros en respuesta a sus capacidades financieras.
Pero un aspecto positivo aún mayor es el que podemos observar cuando miramos la tasa de divorcios. A pesar de tener menos satisfacción sexual y estar menos atraídas a la masculinidad, las mujeres que eligieron a sus parejas cuando tomaban la píldora, tenían muchas menos probabilidades de divorciarse que las mujeres que eligieron a sus parejas cuando no la tomaban.
Proveedores de recursos son las elecciones cuando se tomaba la píldora
Esto sugiere que tomar la píldora puede llevar a las mujeres a elegir parejas que sean buenas proveedoras de recursos y estén dispuestas a estar con ellas en las buenas y en las malas (de ahí la menor tasa de divorcios y una mayor satisfacción con la inversión en recursos).
Sin embargo, algo que es igual de importante mencionar es que esta investigación encontró que cuando estas mujeres que toman la píldora se divorcian, ellas eran en su mayoría quienes iniciaban el divorcio (ellas tuvieron la iniciativa un 84,5 por ciento de las veces, comparado con el 73,6 por ciento del tiempo entre aquellas que eligieron a sus parejas cuando no tomaban la píldora).
Esto sugiere que, al elegir a estos hombres fieles que invierten sus recursos como una buena pareja (y a expensas de la sensualidad), las mujeres que toman píldoras pueden ponerse a sí mismas en riesgo de quedar insatisfechas con su relación debido a la falta de atracción y satisfacción sexual si alguna vez se salen de ella.
El estudio requiere de más investigación
Los resultados de este estudio son increíblemente controversiales. La idea de que la calidad y la longevidad de las relaciones a largo plazo de las mujeres podría verse afectada, para bien o para mal, por su método de prevención del embarazo es casi increíble. Pero, antes de dejarnos llevar demasiado, vale la pena señalar que este estudio no fue perfecto, por lo que debemos ser cuidadosos en su interpretación.
Por ejemplo, debido a que esta investigación comparó los resultados de las relaciones de las mujeres que tomaban la píldora con las que no, es posible que los resultados reflejen diferencias preexistentes en los tipos de hombres que prefieren las mujeres que eligen tomar la píldora como cuestión de hábito (recuerda, estas mujeres estaban tomando la píldora anticonceptiva cuando conocieron a sus parejas) y aquellas que no.
Entonces, las mujeres que toman la píldora por costumbre, pueden ser más propensas a ser el tipo de mujeres que tienden a elegir parejas románticas por razones de personalidad e inteligencia (¿Es un buen proveedor y es probable que sea fiel?) que las razones del corazón y el atractivo.
Por lo tanto, no podemos saber con certeza si la píldora es responsable de las diferencias que se han observado entre estos dos grupos de mujeres.
Además, debido a que los investigadores no midieron la frecuencia con la que las mujeres tomaban la píldora a lo largo de su relación (no sabemos cuánto tiempo estuvieron o no utilizándola durante el transcurso de sus relaciones).
También es difícil saber algunas de las diferencias que se observaron entre los dos grupos son el resultado de estar utilizando la píldora, empezar a utilizarla, o dejar de utilizarla.
Primeras fases del estudio sobre la píldora anticonceptiva y sus efectos en la elección de pareja
Todavía estamos en las primeras fases científicas, lo que significa que los resultados son preliminares, pero pueden ser importantes para ti.
Curiosamente, algunas nuevas investigaciones no han podido encontrar diferencias entre las preferencias faciales de las mujeres o la satisfacción de sus relaciones en función de si toman la pastilla o no.
Y esta es la forma en que funciona la ciencia: desentrañando las respuestas a las preguntas en una serie de pasos aleatorios hacia adelante, seguidos de pasos aleatorios hacia atrás, seguidos de más pasos hacia adelante… y así sucesivamente.
Probablemente pasarán años antes de que tengamos respuestas definitivas sobre la fiabilidad con la que la píldora influye en las preferencias faciales de las mujeres y la satisfacción de sus relaciones.
Y pasará más tiempo antes de que sepamos si estos efectos varían dependiendo de la composición hormonal de las píldoras que toman las mujeres.
Elegir lo mejor en tus relaciones para una vida plena con o sin píldora
Hasta ese momento, conocer esta información puede ayudarte a saber qué buscar en tus propias relaciones.
Tomarte el tiempo para comprender lo que más quieres en una pareja romántica a largo plazo, (y el papel que juegan las hormonas para impulsar nuestras preferencias de una manera u otra) puede mejorar nuestra capacidad de elegir a alguien con quien queremos llegar lejos, ya sea que en nuestro camino usemos la píldora o no.
Cobey, K. D., Havlíček, J., Klapilová, K., & Roberts, S. C. (2016). Hormonal Contraceptive Use During Relationship Formation and Sexual Desire During Pregnancy. Archives of sexual behavior, 45(8), 2117–2122. https://doi.org/10.1007/s10508-015-0662-6