Innovador estudio revela cómo el movimiento de la cabeza puede identificar a psicópatas

Un reciente avance tecnológico podría revolucionar la evaluación clínica de la psicopatía, permitiendo intervenciones tempranas y un manejo más eficaz de este trastorno.

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Investigadores de la Universidad de Nuevo México han desarrollado un método innovador que utiliza análisis de video para identificar rasgos psicopáticos a través del movimiento de la cabeza durante las entrevistas.

Este enfoque pionero podría transformar la psicología forense y clínica, abriendo nuevas posibilidades para entender mejor los comportamientos asociados con la psicopatía, caracterizada por la falta de empatía, manipulación e insensibilidad.

El estudio, que se basa en investigaciones previas con hombres, ahora incluye a 213 mujeres encarceladas en los Estados Unidos, con edades entre 21 y 57 años. Mediante un cuestionario específico, los investigadores evaluaron rasgos psicopáticos como la manipulación, la mentira patológica y la insensibilidad.

Los resultados confirmaron que las mujeres con mayores puntuaciones en el cuestionario también mostraron una notable quietud y menor movimiento de cabeza.

Utilizando un algoritmo automatizado, el equipo analizó detalladamente el movimiento de la cabeza en los videos de las entrevistas. Descubrieron que las participantes con rasgos psicopáticos evidentes presentaban una notable quietud en los movimientos de cabeza.

Este descubrimiento no solo proporciona una nueva perspectiva sobre la comunicación no verbal en trastornos antisociales de la personalidad, sino que también podría convertirse en una herramienta invaluable para futuras evaluaciones clínicas.

La posibilidad de identificar rasgos psicopáticos a través de análisis automatizados del movimiento de la cabeza abre numerosas aplicaciones prácticas en psicología forense y clínica.

Aunque el estudio no determina con precisión por qué las personas con rasgos psicopáticos restringen sus movimientos de cabeza, una teoría sugiere que podría estar relacionado con anomalías en la amígdala cerebral, una región crucial para el procesamiento emocional, afectando cómo estas personas se comunican y se relacionan en contextos sociales.