Ángel Verdugo, un analista económico con una trayectoria de casi 50 años y participante en el Movimiento Estudiantil de 1968, opina que la izquierda en México está perdiendo relevancia y se encuentra en un estado de declive tanto político como ideológico.
Según Verdugo, el concepto tradicional de izquierda y derecha ya no es útil ni correcto en el contexto actual de México.
Argumenta que mantener posturas políticas de los años 60 y 70 se está volviendo cada vez más absurdo y que el número de personas que sostienen estas posiciones está disminuyendo.
Verdugo también señala que el modelo de desarrollo económico conocido como “desarrollo estabilizador”, que se practicó en México, ha sido glorificado erróneamente y considerado como una etapa negativa en términos de estrategia económica.
Destaca que este modelo no se adaptó a un mundo que se abría a mercados más libres y economías más abiertas, las cuales suelen ser más exitosas según diferentes rankings y evaluaciones de desarrollo.
Sobre el tema de la ultraderecha, Verdugo comenta que el término ha sido malinterpretado y usado incorrectamente para descalificar a quienes tienen opiniones conservadoras en temas como el aborto o el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Afirma que, aunque existen grupos en México que apoyan estos temas, son una minoría. Además, menciona que aún existe una considerable homofobia en la sociedad mexicana.
En cuanto a los grupos de izquierda, Verdugo ejemplifica con movimientos como el de los maestros rurales de Ayotzinapa y otros grupos radicales, alegando que sus métodos y visiones ya no son viables ni exitosos en la actualidad.
También menciona el caso de las FARC en Colombia, que no lograron adaptarse a la vida civil después de años de insurgencia.
En resumen, Ángel Verdugo argumenta que el espectro político en México y América Latina está cambiando, alejándose de las divisiones tradicionales de izquierda y derecha hacia un centro político más moderado y democrático.
