La cadena nacional de supermercados Súper Argentinos, con presencia en diversas regiones del país, ha anunciado una iniciativa significativa para ajustar los precios en respuesta a la situación económica actual.
Según un comunicado reciente, la cadena implementará una reducción del 20% en los precios de 20 artículos esenciales de la canasta básica. Esta rebaja tendrá una duración de 60 días, comenzando el miércoles 27 de diciembre.
Este esfuerzo es el resultado directo de una serie de diálogos entre los representantes de Súper Argentinos y figuras gubernamentales clave, incluyendo al secretario de Comercio de la Nación, Pablo Lavigne, y Fernando Blanco Muiño, subsecretario de Defensa del Consumidor y Lealtad Comercial, responsable de Comercio Interior.
Un futuro más próspero parece ser posible
Con esta medida, los supermercados reiteran su compromiso continuo con el bienestar económico de Argentina y manifiestan su apoyo a las políticas actuales del gobierno. Mediante esta iniciativa, buscan ofrecer a sus clientes productos básicos a precios más accesibles.
La selección de productos que forman parte de esta reducción de precios incluye una variedad de alimentos esenciales como azúcar, yerba, fideos, harina, aceite, varios tipos de galletas, huevos, leche, pan, y legumbres como arvejas y lentejas, además de puré de tomate y dulce de leche.
También se incluyen bebidas e infusiones, como gaseosas, té y mate cocido. Complementando la oferta, hay productos de cuidado personal como papel higiénico y jabón de tocador, y artículos de limpieza para el hogar, como lavandina, rollos de cocina y detergente.
Los supermercadistas destacan que esta acción se lleva a cabo en un contexto de libre mercado, sin controles de precios ni congelamientos impuestos por el Estado.
En su comunicado, expresan que esta medida voluntaria y temporal es un esfuerzo consciente por parte de los empresarios para mitigar el impacto del aumento generalizado de precios en el poder adquisitivo de los consumidores argentinos.
Este anuncio representa un paso importante en la lucha contra la inflación y demuestra la voluntad del sector privado de contribuir activamente a la estabilidad económica del país.
