Una teoría inesperada sobre el enigma de la muerte de Gene Hackman y su esposa: ¿qué dice un ex agente del FBI?

El fallecimiento del legendario actor Gene Hackman y su esposa, Betsy Arakawa, ha dejado al mundo con más preguntas que respuestas. Encontrados sin vida en su hogar de Santa Fe, Nuevo México, junto a uno de sus perros, la pareja ha desatado un torbellino de especulaciones sobre las causas de esta tragedia.

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Mientras las autoridades descartan teorías iniciales como el envenenamiento por monóxido de carbono, un ex agente del FBI ha propuesto una nueva hipótesis que podría cambiar la perspectiva del caso: un posible envenenamiento alimentario. A continuación, exploramos esta teoría, los detalles conocidos hasta ahora y por qué este misterio sigue intrigando a Hollywood y más allá.

Un hallazgo que conmocionó al mundo

Gene Hackman, de 95 años, y Betsy Arakawa, de 63, fueron descubiertos sin vida en su residencia tras una llamada al 911 realizada por un trabajador de mantenimiento preocupado por su bienestar. Según reportes policiales, Hackman fue hallado en una sala auxiliar cerca de la cocina, vestido con ropa casual, con sus gafas de sol y bastón cerca, sugiriendo una caída repentina. Arakawa, por su parte, yacía en el baño junto a un calentador portátil, un frasco abierto de medicamentos y pastillas esparcidas en la encimera. Uno de sus tres perros, un pastor alemán, también estaba muerto, mientras que los otros dos sobrevivieron, uno dentro y otro fuera de la casa.

La escena, descrita como “sospechosa” por el Sheriff del Condado de Santa Fe, Adan Mendoza, no mostraba signos de violencia ni entrada forzada, pero el estado de los cuerpos —con signos de descomposición— indicaba que llevaban varios días fallecidos. Un dato clave surgió del marcapasos de Hackman: su último registro fue el 17 de febrero, nueve días antes del hallazgo, apuntando a que la muerte ocurrió mucho antes de ser descubierta.

La teoría del ex agente del FBI: ¿intoxicación alimentaria?

Inicialmente, se sospechó de una intoxicación por monóxido de carbono, una hipótesis planteada por la familia y alimentada por la muerte simultánea del perro. Sin embargo, las pruebas de la Compañía de Gas de Nuevo México y el departamento de bomberos descartaron fugas o niveles peligrosos de este gas en la casa y los cuerpos, según confirmó el Sheriff Mendoza. Con esta teoría desechada, un ex agente del FBI, Bill Daly, ofreció una perspectiva diferente en una entrevista con Fox News.

Daly sugirió que la causa podría estar relacionada con un envenenamiento alimentario u otra forma de intoxicación no gaseosa. “La toxicología será clave”, afirmó, indicando que los investigadores deberían revisar la basura, el refrigerador y los restos de comida en la casa para buscar pistas. “Podría ser algo que comieron o bebieron, y eso es lo que la policía puede rastrear mientras recolecta evidencia”, explicó. Además, destacó el valor de los teléfonos móviles de la pareja, encontrados en la escena, que podrían revelar cuándo dejaron de comunicarse o moverse, ayudando a establecer una línea de tiempo precisa.

Esta teoría cobra sentido considerando que Hackman y Arakawa llevaban una vida reservada, con poco contacto externo, lo que pudo retrasar el descubrimiento de un problema de salud progresivo. Sin embargo, Daly enfatizó que las pruebas toxicológicas serán esenciales para confirmar o descartar esta hipótesis, un proceso que podría tomar semanas.

Detalles inquietantes de la escena

El informe policial arroja más luz sobre las circunstancias del hallazgo:

  • Hackman: Vestía una camiseta azul, pantalones deportivos y zapatillas, con sus pertenencias cerca, lo que sugiere un colapso inesperado.
  • Arakawa: Encontrada en el baño, rodeada de medicamentos (posiblemente para la tiroides o presión arterial) y un calentador desplazado, lo que podría indicar un intento de buscar ayuda o un accidente.
  • El perro: Muerto en un armario cercano, lo que plantea preguntas sobre si compartió la misma causa fatal o murió por abandono tras el fallecimiento de sus dueños.

Aunque la puerta principal estaba entreabierta, no había señales de robo o alteración, y la casa no mostraba daños evidentes. Las violaciones de códigos de seguridad (como problemas en el calentador de agua y chimeneas) fueron menores y no se vincularon directamente a las muertes.

Un rompecabezas sin resolver

La ausencia de trauma externo y la negativa al monóxido de carbono han descartado las explicaciones más obvias, pero el caso sigue abierto. Otras teorías han surgido, como un posible paro cardíaco en Hackman seguido de un accidente o colapso de Arakawa al intentar ayudarlo, según el patólogo forense Dr. Michael Baden (Fox News). Sin embargo, la propuesta de Daly sobre intoxicación alimentaria añade una capa intrigante: ¿podría un alimento contaminado haber afectado a ambos y al perro? La toxicología, aún pendiente, será crucial para aclararlo.

En México, donde Hackman era admirado por clásicos como The French Connection (Oscar 1971) y Unforgiven (Oscar 1992), la noticia ha resonado profundamente. La pareja vivía retirada desde 2004, tras el retiro del actor, en una mansión valuada en 3.8 millones de dólares, rodeada de un entorno que Hackman amaba por su tranquilidad.

Lecciones de una tragedia

Mientras la investigación avanza, este caso subraya la importancia de la vigilancia en hogares aislados y la complejidad de determinar causas de muerte sin evidencia clara. La teoría de Daly, aunque especulativa hasta que las pruebas la respalden, ofrece una posibilidad lógica en un rompecabezas que aún no encaja del todo. Lo que parece una simple caída o un evento natural podría esconder una historia más complicada, y solo el tiempo —y la ciencia— lo revelará.

Gene Hackman y Betsy Arakawa dejaron un legado de talento y amor, pero su final sigue envuelto en misterio. Por ahora, el mundo espera respuestas, recordando al actor que conquistó la pantalla y a la pianista que lo acompañó en su retiro, mientras un ex agente del FBI nos invita a mirar más allá de lo evidente.