Los padres deben hablar con sus hijos sobre sexo con frecuencia

Hablar sobre sexo de forma más frecuente con nuestros hijos

Hablar sobre sexo con nuestros hijos debe ser una tarea que hagamos con frecuencia, como padres que queremos fomentar una mayor consciencia sobre el cuerpo y las responsabilidades.

La investigación realizada por expertos de la Universidad Brigham Young muestra que una sola conversación de “concienciación” —hablar sobre sexo— definitivamente no es suficiente para garantizar la comodidad sexual del niño en el futuro.

La incomodidad de hablar sobre sexo con nuestros hijos

Muchos padres no se sienten cómodos hablando con sus hijos sobre sexo. Por ello, suelen optar por tener una conversación sobre temas de erotismo y sexualidad. Mientras tanto, la investigación realizada por la Dra. Laura Padilla-Walker de la Universidad Brigham Young en los EE. UU. muestra que las conversaciones frecuentes sobre sexo con los niños influyen positivamente en su posterior comportamiento sexual seguro a la edad de 21 años.

Desnudez ubicua

El fácil acceso a la pornografía, pero también la sexualización omnipresente, son rasgos expresivos de la actualidad. Los niños reciben muchos mensajes sobre contenido erótico desde una edad temprana y su conocimiento del sexo es muy fragmentado y, a menudo, falso.

Las investigaciones indican que los padres pueden tener una influencia significativa en las percepciones de los niños sobre el erotismo y el sexo al hablar sobre sexo de forma frecuente. Pueden prevenir la baja autoestima relacionada con los patrones presentados en los medios, transmitir conocimientos sobre anticoncepción y conducta sexual segura. Sin embargo, esto requiere mucho más que tener una entrevista única.

Metodología de investigación

La Dra. Laura Padilla-Walker estudió a 468 adolescentes de 14 a 18 años con sus madres y 311 adolescentes de la misma edad y sus padres. Durante 10 años, contactó regularmente a las familias encuestadas durante el verano y verificó cómo y con qué frecuencia hablaban sobre sexualidad. Para ello, utilizó un formulario rellenado por los niños y sus padres.

Encontró que tanto los niños como los padres calificaron su nivel de comunicación sexual como bajo. Curiosamente, los adolescentes tendían a dar notas más bajas que sus cuidadores. La Dra. Padilla-Walker notó una correlación entre el aumento de la comunicación sexual en las familias y el comportamiento seguro de los jóvenes de 21 años.

Cómo hablar sobre sexo de forma más frecuente

La conclusión del estudio anterior es que incluso si los padres piensan que hablan lo suficiente con sus hijos sobre sexo, es posible que sus hijos no lo hagan. Vale la pena desarrollar sus habilidades de comunicación en esta área, recordando el respeto y la plena apertura hacia los adolescentes.

Cuanto más cómodo se sienta el niño en las conversaciones con el padre, más probable es que en caso de problemas íntimos o dudas recurra a él en busca de ayuda. Esto reduce las posibilidades de conductas sexuales de riesgo, como las relaciones sexuales sin protección.