Investigaciones realizadas por el autor Brene Castaño, confirman lo que muchos de nosotros sentimos instintivamente: Que debemos reservar nuestra vulnerabilidad sólo a los que han ganado nuestra confianza. Estas personas van a saber escuchar nuestros secretos y se muestran con un apoyo genuino en lugar de ser jueces.
En este mundo impulsado por los medios sociales, es la norma compartir cada detalle de nuestras vidas. Dependemos de la validación externa, cuando en verdad, la única persona que necesita validar lo que eres y lo que haces, eres tú misma. Tu historia es tuya, y tienes que ser consciente de lo que permites en tu mundo interior.
Según Brown, la vergüenza es la experiencia psicológicamente más perjudicial que cualquiera de nosotros puede soportar – y la vergüenza por lo general se debe a que somos vulnerables en entornos emocionales inseguros.
Examina a continuación los tipos de amigos que solemos tener, y considera si alguno de tus amigos encaja en estas categorías. Una vez que decidas dejar de compartir tus pensamientos y sentimientos más profundos con gente como esta, tu confianza crecerá y tu inseguridad disminuirá. Parece una obviedad, ¿verdad?
1. El amigo feliz por circunstancia
El amigo feliz por circunstancia, es feliz sólo cuando pareces estar más débil.
Rasgos clave
- Esta persona no te va a animar cuando las cosas van bien, pero cuando estás sufriendo, ella es la primera persona corriendo a tu lado para escuchar tu triste historia.
- Parece estar buscando una inyección de confianza, y de hecho puede disfrutar de escuchar acerca de lo mal que te va en la vida.
- Ella sufre de un complejo de inferioridad.
Cómo tratarla
No lo tomes como algo personal. Las inseguridades de este amigo lo más probable es que entorpezcan una gran amistad.
Sin embargo se un gran ejemplo de un buen amigo porque esta persona está en la necesidad de una profunda aceptación interior.
2. El amigo criticón
Después de salir con el amigo criticón, es probable que te sientas agobiado. Tu felicidad parece ser ofensiva para esta persona. Ella ve en tu crecimiento su propio estancamiento.
Rasgos clave
- Esta persona no parece ser capaz de estar feliz por ti, no importa qué.
- Ella parece percibir tu crecimiento como un insulto o afrenta hacia ella.
Cómo tratarla
No te involucres ni lo tomes como algo personal. Sólo vete.
3. El escalador social
Esta persona se invita a sí misma a eventos, trata de acercarse a la gente para guardar las apariencias, y te tira debajo del autobús en cualquier momento (si, y sólo si, la hace ver bien).
Rasgos clave
- Son camaleones, y parecen tratar de encajar con quien están tratando de impresionar.
- Ella parece estar convirtiéndose en una copia tuya o de otra persona, y no reconocerlo.
Cómo tratarla
- No la dejes que rompa tus límites, ya que lo hará – insidiosamente y sin que te des cuenta.
- Reafirma tus límites personales, y di cómodamente, «No, yo no tengo dobles.»
4. El chismoso
Ningún secreto está a salvo con el chismoso. Esta persona no tiene que ver con la lealtad y sus amigos llegan y salen de su vida como si pasaran por una puerta giratoria.
Rasgos clave
- Esta persona derrama los secretos de amigos en común
- Sólo llega para obtener información sobre los principales acontecimientos de la vida (tuya y de otros)
Cómo tratarla
- Minimiza la charla con el chismoso, y evita temas emocionales.
- Dile que no te sientes cómodo hablando de otros o rápidamente cambia el tema para evitar discutir detalles
5. El prometedor en exceso
La prometedora en exceso tiene buenas intenciones. Quiere estar ahí para ti, pero ella no se presenta en un nivel emocional o físico.
Rasgos clave
- Esta persona es más probable es que no tenga el espacio para ser quien quiere ser, lo que hace que sea difícil ser un verdadero amigo para ti.
- Si alguna vez hablan de ello, te enterarás de que esta persona está llevando un exceso de equipaje emocional del que ella simplemente no puede desprenderse.
Cómo tratarla
Dale a esta persona espacio. Deja que ella venga a ti cuando esté lista, y no compartas nada emocionalmente valioso con ella. Al reconocer sus límites emocionales, se detiene el ciclo de ser víctima de una amistad desequilibrada.
6. El mal intencionado
Esta persona es un saboteador. Por alguna razón, realmente quiere hacerte daño.
Rasgos clave
- Puedes no ser capaz de identificar exactamente por qué te hace sentir tan mal, pero sabes que algo está apagado.
- Cuando intentas sacar el tema, hace que sea culpa tuya, y te culpa por dejar caer la conversación por completo.
Cómo tratarlo
Mantente fiel a tus instintos, y una vez que te des cuenta de sus tendencias destructivas, mantén tu distancia.
7. El competidor
Esta persona tiene una necesidad constante de estar arriba que cualquiera. Tiene un aire de falsa confianza en sí mismo que realmente se deriva de la necesidad de probarse a sí misma.
Rasgos clave
- Cualquier cosa que puedes hacer, se puede hacer mejor, y ella se asegura de que lo sepas.
- Ella finge reconocimiento por tus logros, y luego los minimiza al compartir los suyos.
Cómo tratarla
Recuerda, no tienes que demostrar nada a nadie, y no eres responsable de proporcionar confianza en sí mismo a otra persona – especialmente si se produce a expensas de la tuya propia.
Tus «amigos» no siempre tienen las mejores intenciones contigo. Esto no significa que sean malas personas. Sólo significa que son humanos. Cada uno de nosotros tiene sus propios dramas emocionales jugando.
Coloca a tus amigos solamente tan cerca de ti como se merezcan – no tan cerca como desees que podrían estar. Y aprovecha este momento para honrar y apreciar los grandes amigos que siempre están ahí para ti, y tú por ellos. Además, no sólo ellos pueden formar parte de algunos de estos tipos de persona, ¿te has preguntado si encajas tú en alguna de ellas? Todos somos humanos.
Redacción de Vida Lúcida
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