Neuropatía | 5 causas y algunos tratamientos naturales

La neuropatía es una condición ocasionada por el daño en los nervios en el exterior del cerebro y la médula espinal, la cual puede causar dolor y debilidad en las manos, pies, y otras partes del cuerpo. 

Dolor en la mano por neuropatía

Esta condición, también conocida como neuropatía periférica, se caracteriza por afectar el funcionamiento normal de los nervios, lo que causa que estos envíen señales de dolor en momentos inapropiados. Por lo tanto, gracias a la neuropatía podrías sentir dolor cuando realmente no lo estás experimentando, y no sentir dolor cuando algo o alguien te hace daño.

El sistema nervioso periférico conecta los nervios de la médula espinal y el cerebro con el resto de tu cuerpo, incluido tus:

  • Brazos
  • Manos
  • Pies
  • Piernas
  • Órganos internos
  • Boca
  • Cara

Tu sistema nervioso envía señales a tu cerebro, indicándote los momentos en que el peligro o el dolor es inminente. Por lo general, se produce una alteración del sistema nervioso debido a:

  • Una herida
  • Infección
  • Un trastorno hereditario
  • Enfermedad sistémica

Si bien el daño al sistema nervioso causa malestar, la buena noticia es que es muy tratable. Tu médico te hará preguntas sobre tu salud, como lesiones o infecciones previas, para determinar el mejor curso de tratamiento. Si tienes una afección subyacente grave, definitivamente es algo que debes decirle a tu médico, ya que podría dar una explicación la causa del daño nervioso.

Los diferentes tipos de neuropatía

En primer lugar, es necesario saber que tienes tres tipos diferentes de nervios periféricos en tu cuerpo: nervios sensoriales, que envían señales a tu piel, nervios motores, que se conectan a los músculos, y nervios autónomos, que envían mensajes a tus órganos internos. 

La neuropatía puede afectar solo un grupo de nervios o los tres, y cada tipo tendrá diferentes síntomas y programas de tratamiento. En total, la ciencia identifica más de cien tipos diferentes de neuropatía periférica. 

Estos se clasifican por el tipo de daño a los nervios involucrados; La mononeuropatía ocurre cuando existe daño en un solo nervio, y las polineuropatías ocurren cuando varios nervios se ven afectados.

Síntomas comunes de la neuropatía

  • Sensación de hormigueo que se siente más comúnmente en las manos o los pies
  • Una sensación de compresión alrededor de las manos o los pies
  • Dolores agudos y punzantes
  • Entumecimiento en las extremidades
  • Sensación de debilidad o pesadez en las manos o los pies
  • Sientes que tus brazos o piernas se quedan bloqueados
  • Dejar caer cosas a menudo
  • Adelgazamiento de la piel
  • Presión arterial baja
  • Disfunción eréctil en hombres
  • Estreñimiento
  • Problemas digestivos
  • Diarrea
  • Sudoración excesiva

Tener estos síntomas no necesariamente indica daño a los nervios, pero asegúrate de informar a tu médico sobre ellos para que pueda hacer una evaluación precisa.

Estas son las 5 principales causas de neuropatía:

Si bien tener antecedentes familiares de trastornos de daño nervioso aumenta la probabilidad de desarrollarlos, también hay otros factores que pueden contribuir a esta afección. A continuación, repasaremos algunas de las principales causas de la neuropatía.

1. Enfermedades generalizadas

Se sabe que enfermedades como la diabetes aumentan la probabilidad de desarrollar daño nervioso, ya que los niveles altos de glucosa en sangre y los triglicéridos altos pueden alterar el sistema nervioso. El desarrollo de la neuropatía aumenta drásticamente en las personas que:

  • Tienen diabetes
  • Tienen sobrepeso u obesidad
  • Tienen presión arterial alta
  • Tienen más de 40 años

Según las estadísticas ofrecidas por el Centro de Neuropatía Periférica de la Universidad de Chicago (UCCPN), alrededor del 60% de las personas con diabetes sufren algún tipo de daño nervioso. Este daño ocurre con mayor frecuencia debido a los niveles altos de azúcar en sangre, aunque tener niveles altos de grasa en la sangre también puede contribuir.

El daño a los nervios también puede ocurrir como resultado de las siguientes enfermedades crónicas:

  • Trastornos renales que hacen que las toxinas se acumulen en el cuerpo
  • Hipotiroidismo, que puede provocar retención de líquidos y presión alrededor de los nervios
  • La inflamación crónica puede extenderse a los nervios y causar daño a los tejidos conectivos.
  • Las deficiencias de vitaminas B y E especificamente, que ayudan con el funcionamiento adecuado de los nervios

2. Lesiones

Comúnmente, el daño a los nervios ocurre debido a algún tipo de daño físico. Esto puede incluir accidentes automovilísticos, fracturas óseas, conmociones cerebrales o caídas. Los estilos de vida sedentarios también pueden causar daño a los nervios al estar sentado en una posición por mucho tiempo. 

Trabajar durante largas horas en la computadora también puede provocar daños en los nervios debido a que dejas la muñeca en un solo lugar la mayor parte del tiempo. Esta afección, denominada síndrome del túnel carpiano, afecta a más de 3 millones de estadounidenses cada año y es un tipo común de neuropatía.

3. Alcohol y otras toxinas

Con el tiempo, el alcohol puede dañar los nervios debido a los altos niveles de toxicidad en el cuerpo. Otras toxinas que pueden causar problemas nerviosos incluyen el pegamento, pesticidas y solventes con altos niveles de exposición. Trabajar en entornos con metales pesados ​​sin tomar las precauciones adecuadas también puede causar problemas en los nervios.

4. Infecciones y trastornos autoinmunes

Algunos virus y bacterias se dirigen específicamente al sistema nervioso, como el herpes simple, el virus de la varicela-zoster, responsable de la varicela y el herpes zóster, y el virus de Epstein-Barr, que daña los nervios sensoriales y causa un dolor punzante. 

Las infecciones bacterianas como la enfermedad de Lyme también pueden causar daño y malestar a los nervios si no se tratan. Las personas que tienen VIH o SIDA también pueden experimentar neuropatía periférica .

Además, los trastornos autoinmunes como la artritis y el lupus pueden afectar los nervios debido a la inflamación crónica y al daño tisular en todo el cuerpo. La presión debida a la hinchazón también puede causar dolor en los nervios de las piernas y los brazos.

5. Medicamentos

Ciertos medicamentos, como los que se enlistan a continuación, también pueden causar daño a los nervios en algunos casos:

  • Anticonvulsivos que se toman para tratar las convulsiones
  • Medicamentos para combatir infecciones bacterianas
  • Algunos medicamentos para la presión arterial
  • Medicamentos contra el cáncer

Diagnosticar los trastornos nerviosos

Para diagnosticar este tipo de afecciones tu médico primero te hará un examen físico y conocerá tu historial médico. Si esto no les ayuda a determinar el problema, realizarán otras pruebas como:

  • Análisis de sangre que indican los niveles de azúcar en sangre y les ayudan a determinar si puedes tener un trastorno de la tiroides.
  • Es posible que tu médico también quiera realizar una tomografía computarizada o una resonancia magnética para ver si algo está presionando tus nervios, como un tumor.
  • Una biopsia de nervio, en la que te someterás a una cirugía menor para que el médico pueda extirpar una pequeña porción de tus nervios para inspeccionarla con un microscopio.
  • Una electromiografía, que implica que el médico inserta una pequeña aguja en el músculo y te pide que lo muevas suavemente, lo cual podrá mostrar problemas con la forma en que las señales nerviosas se mueven hacia los músculos. La aguja confirmará la cantidad de electricidad que corre a través de tu tejido. Si bien puede parecer doloroso, este procedimiento solo causa un dolor leve durante unos días.
  • Por último, es posible que tu médico también quiera realizar un estudio de conducción nerviosa, que implica colocar electrodos en la piel, que pulsan pequeñas cantidades de electricidad a través de los nervios. Esto mostrará si tus nervios están transmitiendo señales correctamente.

Formas naturales de tratar la neuropatía

La causa de la neuropatía determinará su curso de tratamiento. Por ejemplo, si la diabetes es la causa en este caso, probablemente necesitarás medicamentos o cambios en tu estilo de vida para controlar los picos de azúcar en sangre. 

Si es una deficiencia de vitaminas, entonces deberás suplementarte con vitaminas o comenzar a comer más alimentos ricos en vitaminas. A veces es necesaria una combinación de medicamentos y cambios en el estilo de vida.

Sin embargo, dado que en este artículo analizaremos tratamientos naturales, omitiremos los medicamentos recomendados que a menudo se recetan para la neuropatía.

Estimulación Nerviosa Eléctrica Transcutánea (TENS)

Es posible que la estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (TENS) no funcione para todos, pero este método no implica el uso de medicamentos y es relativamente indolora. En el tratamiento con TENS, tu médico colocará electrodos en tu piel, que enviarán pequeñas cantidades de electricidad al cuerpo. El objetivo de esta terapia es evitar que los nervios envíen señales de dolor al cerebro.

Yesos o férulas ergonómicas

Tu médico podría recomendarte este tipo de yeso o férula si tu problema nervioso ocurre en tus pies, piernas, brazos o manos. Estos yesos brindan soporte para el área del cuerpo donde experimentas dolor o malestar, por ejemplo, en las muñecas si padeces el síndrome del túnel carpiano. 

Muchas personas que trabajan en la computadora durante muchas horas usan un aparato ortopédico mientras duermen, el cual mantiene sus muñecas en la posición correcta.

Tratamientos caseros

Los remedios naturales como los siguientes pueden ayudar significativamente a aliviar el dolor asociado con los problemas nerviosos:

  • Cuidado quiropráctico
  • Acupuntura
  • Masajes
  • Meditación
  • Yoga
  • Ejercicio regular
  • Abstenerse de consumir alcohol y fumar

Prevenir y reducir los riesgos de desarrollar esta condición

Si bien la predisposición familiar puede aumentar tu riesgo de desarrollar neuropatía, aún puedes tomar precauciones al:

  • Evitar el alcohol o beberlo solo con moderación
  • Dejar de fumar si ya has comenzado
  • Tener una dieta equilibrada
  • Hacer ejercicio regularmente
  • Manejar el estrés