Señales de que estás siendo una mujer madura

Hay ciertas actitudes y conductas que pueden servir como indicadores de que estamos ante una mujer madura, y quizás también nos ayuden a identificarnos a nosotras mismas.

Una mujer adulta leyendo sentada en un parque

Cómo identificar a una mujer madura

La vida pasa y con ella vamos quemando poco a poco las diferentes etapas que nos ofrece; empezamos siendo niños, pasamos a ser adolescentes, luego jóvenes adultos, adultos, y finalmente adultos mayores y abuelos. Es muy normal quemar estas diferentes etapas y actuar con cierta inmadurez al principio, pero, si eres como yo, existencialista, y te preguntas en qué momento dejaste de ser una jovencita rebelde e inmadura para convertirte en una mujer madura y responsable, estas son algunas señales ineludibles:

Piensas mil veces antes de tomar decisiones:

Esto sin duda es crucial para determinar que eres una persona madura, ya que, si recuerdas bien, cuando eras más joven pensabas menos en las consecuencias de las cosas, y por ende, tus “decisiones” eran mucho más viscerales. Ahora te dedicas a analizar los pros y los contras, identificar los objetivos, y por supuesto, tomar una decisión acertada donde todos los involucrados salgan ganando.

Relaciones largas y estables:

Tal vez esto no es tan determinante, en el sentido que existen muchas parejas que tienen años juntos manteniendo una relación muy inmadura. Pero, una relación amorosa no debe medirse por el tiempo que se lleva juntos, sino por la capacidad de ambos de asumir el compromiso y brindar estabilidad emocional y en todos los demás sentidos a la otra persona. Si ya estás en, o estás buscando una relación de este tipo, pues, estás siendo una mujer madura.

Una mujer madura con su pareja

Tus prioridades cambian:

Atrás quedaron los tiempos donde creías que el mundo giraba alrededor de tu ombligo y el objetivo principal era solo tu bienestar y diversión. Las fiesta y el desastre, fueron cambiadas por reuniones familiares o laborales y por un ambiente de tranquilidad, que es tu hogar, al que deseas llegar cada noche y en el cual encuentras un punto de reunión contigo misma, y eso también te hace feliz.

Entiendes a tus padres:

Poco a poco te vas convirtiendo en la mejor amiga de tu madre o tu padre; al pasar el tiempo vas agradeciendo por las enseñanzas y crianza que te dieron y por tanto te vuelves más sensible. Los entiendes, comparten cosas en común, y sobre todo: los valoras muchísimo más si ya estás pasando por el proceso de criar a tus propios hijos.

mujer madura 3

Los hijos:

Esto también “debería” ser un determinante de madurez en tu vida, aunque no todas las mujeres que traen niños del mundo lo son. ¿Cómo saber que eres una mujer lo suficientemente madura para saber si estás criando bien a tus hijos? Cuando eres capaz de ponerte en el lugar de todos los miembros de tu familia y le das el espacio que le corresponde a cada quien.

Cuando eres capaz de tener paciencia y equilibrar lo permisivo con el carácter que debes imponer para que tus hijos conozcan los límites. Cuando eres muy consentidora, pero lo suficientemente fuerte para decir «NO» cuando es necesario, y sobre todo, cuando eres capaz de escuchar y comprender lo que tus hijos quieren y necesitan.

Una vez que hagas todo esto, y mientras ibas leyendo te ibas sintiendo identificada, puedes saber con certeza que ya eres una mujer madura o quizás te encuentres en el camino de serlo, ya que no dejamos de aprender y madurar nunca.