La artrosis fue definida por la OMS en 1995 como un proceso degenerativo articular que es consecuencia de trastornos mecánicos y biológicos que desestabilizan el equilibrio entre la síntesis y la degradación del cartílago articular, produciendo cambios reactivos en las estructuras óseas periarticulares adyacentes e inflamación crónica de las membranas sinoviales.
La artrosis afecta a todas las estructuras de la articulación, sin efectos sistémicos, y se caracteriza clínicamente por la presencia de dolor y limitación de la función articular, crepitación (chasquidos) y posible derrame.
Se estima que la artrosis sintomática de manos o rigidez en las manos afecta al 5% de la población general adulta. Cerca del 50% de los adultos mayores de 65 años tiene signos radiológicos de artrosis, afectando de manera predominante al sexo femenino, con una relación 2:1 o incluso superior.
Tipos deartrosis en las manos.
La rigidez en las manos (artrosis) afecta de forma característica a los dedos, y dependiendo de la zona que afecte será el tipo de artrosis.
- Artrosis más común: cuando se ven afectadas las articulaciones interfalángicas distales o puntas de los dedos.
- Artrosis nodal: afección de las articulaciones interfalángicas proximales (parte inicial de los dedos), dando lugar a la aparición de nódulos dolorosos, de Heberden en el primer caso y de Bouchard en el segundo, afectan con más frecuencia a los dedos índice, meñique y medio.
- Rizartrosis: afecta a la articulación trapeciometacarpiana (palma de la mano). Suele ser bilateral, pero con mayor gravedad en una de las 2 manos y puede estar asociada o no a la artrosis de articulaciones interfalángicas.
- Artrosis erosiva: afecta a las articulaciones interfalángicas distales, con menor frecuencia a las proximales y raramente a las metacarpofalángicas, normalmente bilateral y simétrica, cursa con episodios inflamatorios y deformidad articular. Suele ser causa de importante limitación funcional.
Causas
El cartílago, la membrana sinovial y el hueso subcondral, están implicados en la causa de la rigidez de las manos presentan 3 manifestaciones fundamentales: sinovitis producto de una sobrecarga mecánica articular (cargas mecánicas de alta frecuencia e intensidad), destrucción progresiva y fisuración del cartílago y alteraciones en el hueso subcondral como defectos de mineralización, crecimiento del tejido óseo. Se han descrito diferentes factores de riesgo que pueden estar implicados en la aparición y progresión en la artrosis:
- Sexo: es más prevalente en el sexo femenino, con un riesgo relativo de 2:6.
- Edad: son más propensas las personas mayores de 50 años.
- Enfermedades sistémicas (sistema endocrino, metabólicas, etc.)
- Factores hormonales: El déficit estrogénico en la mujer está relacionado con su desarrollo.
- Debilidad muscular.
- Densidad mineral ósea.
- Anomalías articulares previas como: traumatismos y fracturas, malformaciones o displasia, defectos de alineación, inestabilidad y laxitud articular, meniscopatías y artropatías neuropáticas.
- Sobrecarga articular (actividad física y laboral): diversas actividades laborales se relacionan con artrosis.
Síntomas de la rigidez en las manos
Los síntomas de rigidez de las manos se caracterizan por:
Dolor: síntoma principal, se inicia con la función articular y disminuyen con el reposo. El dolor es variable depende del umbral del dolor de la persona.
Rigidez articular: localizada, matutina y desaparece después de la movilización en pocos minutos (no mayor a 30 min).
Deformidad articular: son más evidentes en manos, pies y rodillas. Es el motivo de consulta en caso de ausencia de dolor.
Crepitaciones: son frecuentes y fáciles, producidos por el roce de los cartílagos deteriorados.
Limitación de la movilidad: si evolucionan condicionan una incapacidad importante.
Quistes subcutáneos: de predominio en interfalanges distales.
Tratamiento
Existe tratamiento farmacológico y tratamiento alternativo para la rigidez de las manos. En este caso se hará referencia a terapias alternativas:
- Cambio en el estilo de vida: a pesar de que no es una terapéutica es importante hacer ciertos cambios o seguir ciertas conductas como dejar de fumar, pues está demostrado que este hábito se correlaciona con mayor dolor, limitación funcional y progresión.
- Hidroterapia: Puede ser de utilidad cuando la zona a tratar no resulta accesible a otras formas de calor sistémico o superficial.
- Ayudas ortopédicas: Existen férulas para mantener en reposo la articulación dolorida, como en la base del pulgar (muñequera).
- Termoterapia: El calor y el frío aplicados de diferente forma (diatermia, ultrasonidos, infrarrojos, baños de parafina, almohadillas eléctricas, etc.) pueden ser útiles para aliviar el dolor ocasionado por la artrosis.
- Electroterapia: La electroestimulación nerviosa transcutánea o TENS, es un tipo de electroestimuladores portátiles que pueden usarse de modo domiciliario y que permiten a los pacientes controlar las situaciones de dolor agudo de forma muy eficaz.
- Acupuntura, meditación, yoga, reflexología o Reiki: han demostrado un efecto adyuvante en el dolor de la artrosis, pero aplicados junto a alguna otra alternativa.
- La fitoterapia o el uso de hierbas medicinales: tanto ingerido como aplicado a la articulación con artrosis que duele, se basa en el posible potencial analgésico que poseen ciertas plantas naturales como el sauce o el jengibre.
- Magnetoterapia: tratamiento mediante campos magnéticos. Cuando los campos magnéticos son producidos mediante corriente eléctrica se denomina magnetoterapia propiamente dicha y si son obtenidos mediante imanes, naturales o artificiales se llama imanoterapia. Tiene una serie de acciones como: relajación muscular que ayuda a mejorar la movilidad articular, efecto analgésico, regeneración del cartílago
- Guantes de compresión.
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