El impacto de la infertilidad en la relación de pareja

Tener hijos es uno de los propósitos principales de muchas parejas, siendo un tema de vital importancia. Sin embargo, en algunos casos, es posible que lograr concebir un bebé pueda dificultarse. La infertilidad, como consecuencia, puede ocasionar mucha tensión en la relación de pareja, o bien, consolidarla.

El impacto de la infertilidad en la pareja

¿Qué impacto negativo tiene la infertilidad en la relación de pareja?

Cuando se habla de infertilidad, se refiere a la incapacidad de concebir un hijo de manera natural pese a mantener relaciones regulares sin protección durante, al menos, un año. Esta imposibilidad de tener un hijo puede darse en uno o en ambos miembros de la relación.

Al momento de ser diagnosticados con infertilidad, la pareja puede presentar una gran cantidad de emociones y sentimientos. Es frecuente que en la relación se manifiesten sentimientos de frustración e impotencia por el hecho de no poder concebir.

Asimismo, puede darse un sentimiento de culpabilidad y enfado. Todo esto puede generar una gran tensión en la pareja, la cual se agrava si no hay una buena comunicación. Otro factor que podría influir negativamente frente a esta situación es la presión a la cual puedan estar sometidos ambos miembros de la pareja.

En algunos hogares y culturas, es posible que se presionen a las parejas casadas a tener hijos lo más pronto posible. Además, en casos de infertilidad, algunas religiones señalan esta condición como un castigo divino. Todo esto puede generar más estrés y sentimientos negativos en la pareja. Entre los principales consecuencias negativas se encuentran:

  • Sentimientos de culpabilidad.
  • Estrés.
  • Ansiedad.
  • Frustración o impotencia.
  • Enfado o irritabilidad.
  • Aislamiento.
  • Pérdida de apetito.
  • Alteraciones del sueño (insomnio o hipersomnia) .
  • Sentimiento de desesperanza.
  • Disminución de la libido.
  • Sentimiento de inferioridad.
  • Depresión.

Es por ello que resulta fundamental que ambos acudan a un profesional en fertilidad y a un psicólogo de pareja.

El primero les ayudará a evaluar las posibilidades y alternativas que tienen para concebir (inseminación in vitro, embarazo subrogado, adopción…).

El segundo, les ayudará a expresar sanamente sus sentimientos para que nada quede reprimido y puedan fortalecer la relación.

¿Podría tener un impacto positivo?

Por otro lado, la infertilidad no sólo puede tener un impacto negativo en la relación de pareja. Aunque es innegable el hecho de que pueda ser una noticia devastadora, esto también dependerá de la actitud que ambos tomen frente a la situación.

Es fundamental que ambos vean en el otro un apoyo y que no se cierren ante otras posibilidades. Algunas parejas ven esto como una oportunidad para fortaleces sus lazos y luchar juntos por una causa.

Al explorar las diferentes opciones de reproducción asistida, la pareja podrá optar la que mejor le convenga de acuerdo a sus principios y capacidades económicas. Gracias a los avances en el campo de la medicina, las parejas tienen múltiples alternativas para tener hijos.

Una de las más populares es la fecundación in vitro, pero también pueden optar por una madre subrogada. En caso de que no exista la posibilidad de ninguna de las anteriores, aún está la opción de adoptar.

No obstante, si deciden desistir en el proceso para convertirse en padres, pueden desarrollar un nuevo plan de vida. Por supuesto, esto último podría ser difícil, sin embargo, con ayuda profesional, podrán salir adelante.

Si bien la infertilidad puede ser una situación complicada, es importante que la pareja no se enfrasque en los aspectos negativos.

Esto puede ser una oportunidad para renovar la relación, reforzar el apoyo en pareja y el trabajo en equipo. También puede ser una oportunidad para proponerse nuevas metas y desarrollar un plan de vida en el que ambos sean los principales protagonistas.