Para sobrellevar el calor del verano, puedes elaborar tu propio airea condicionado casero y reducir enormemente el gasto, además, puedes realizarlo de mayor tamaño si necesitas enfriar espacios más amplios.
El calor puede llegar a ser algo desesperante, sobre todo cuando es algo sostenido; no deja pensar, no deja dormir, interrumpe la paz mental, que ya eso es mucho decir. En algunos lugares, las personas prefieren privarse del lujo de un aire acondicionado por cuestiones de costo, bien sea porque el aparato tiene un alto valor, o porque la factura de electricidad es algo que se debe mantener bajo, tanto por el planeta como por el bolsillo. Pero en algunos países, el aire acondicionado, es necesario. Las temperaturas altas podrían poner en riesgo la vida de muchos que sufren de enfermedades cardíacas. Por eso trajimos una solución que podrás generar en casa para mantener más fríos los espacios del hogar.
Materiales
Para realizar este aire acondicionado casero vas a necesitar un cubo de unos 20 litros con tapa, puede ser uno de pintura reciclado, un cubo interior de poliestireno, un tubo de PVC de unos 3cm de diámetro por 30 cm de largo, una sierra de perforación de 1 5/8 de pulgada -4,1 cm-, un ventilador portátil de 7 pulgadas -17,7 cm-, un bolígrafo o rotulador, un cúter y una botella de agua congelada de 3 litros.
Elaboración
Coloca el ventilador sobre el cubo con la tapa puesta para tomar medidas, marca el contorno con el bolígrafo y córtalo con cuidado. Si el ventilador tiene soportes o pies, deberás retirarlo. Luego perfora tres agujeros grandes en el cuerpo del cubo con un taladro. Introduce el cubo de poliestireno y realiza los mismos agujeros. Toma el tubo de PVC y corta tres pedazos del tamaño de los agujeros creados en el cubo. Introdúcelos.
Coloca la botella de agua congelada en ambos cubos. Cierra ambas tapas con el ventilador incrustado en ellas y enchufa el ventilador. El aire saldrá por los tres orificios, se calcula que puede durar unas seis horas con aire frío que puedes volver a llenar con otra botella de agua congelada. Allí tendrás un nuevo aire acondicionado casero.
Se pueden variar los tamaños y cantidad de agua dependiendo los espacios que se quieran mantener fríos. Es una alternativa fácil de realizar y que puede ser de ayuda en muchos casos.