Si quieres mejorar la piel de tu rostro, y evitar la resequedad, sin poner productos que contengan químicos, realizar una mascarilla casera puede ser la mejor opción, nosotros te traemos la receta de una máscara que dará muy buenos resultados, no dejes de probarla.
Prepara tu mascarilla natural
¿Deseas poder tener la piel suave y brillante sin gastar una fortuna en productos de belleza? Aquí está una receta simple para una máscara casera que usa los artículos que tienes almacenados en tu cocina.
Ingredientes: aceite de oliva extra virgen, miel y bicarbonato de sodio, todos son realmente buenos para tu piel.
Tanto el aceite de oliva como la miel tienen propiedades hidratantes que mantienen la piel suave y lozana. El aceite de oliva penetra profundamente en la piel, ayudando a repararla, promoviendo elasticidad y reduciendo manchas.
La miel combate las bacterias, aprieta los poros de la piel y la protege de los daños causados por el sol y las arrugas prematuras. También hidrata la piel y bloquea la humedad.
El bicarbonato de sodio funciona como un agente exfoliante suave, reduce el enrojecimiento causado por brotes y aumenta la circulación. También ayuda a tratar el acné y las espinillas mediante la eliminación del exceso de aceite y las células muertas de la piel.
Mascarilla casera para la piel brillante
Otra ventaja de esta mascarilla de belleza es que es adecuada para todos los tipos de piel. Los ingredientes no son demasiado secos ni demasiado grasosos.
Cosas que necesitará:
- Aceite de oliva virgen extra.
- Miel.
- Bicarbonato de sodio.
- Una cucharadita.
- Un tazón.
Preparación:
Ponga una cucharadita de aceite de oliva extra virgen en un recipiente A continuación, agregue media cucharadita de miel. Añadir una cucharadita de bicarbonato de sodio también. Mezclar bien los ingredientes para formar una pasta delgada. Si desea una pasta más gruesa, agregue más bicarbonato de sodio. De esta manera tan sencilla ya tienes lista tu mascarilla.
