Todos sabemos que el tabaco es muy perjudicial para la salud, incluso es potencialmente mortal. Sin embargo, las consecuencias que trae aparejado el tabaquismo, no solo se pueden relacionar con la mortalidad elevada, ya sea por cáncer de pulmón o problemas del corazón, sino que para los fumadores, el tabaquismo tiene consecuencias sobre su apariencia física, especialmente en su rostro.
Las consecuencias dermatológicas y perjuicios en la piel se van haciendo cada vez más visibles y difíciles de contrarrestar. Existe una frase que menciona que: «el fumador se avejenta y veo feo, a pesar de creer lo contrario con su pose al fumar«. Esta frase, quizás exagerada, sirve para que los jóvenes y las mujeres especialmente preocupadas por la apariencia, tengan otra razón más para decirle no al cigarro.
«El rostro del fumador»
La salud y el buen estado general de nuestro organismo se refleja en la piel, y eso no es una novedad. La piel puede servirnos para diferenciar a una persona que fuma de otra que no, y es que los componentes y sustancias presentes en el cigarrillo, (60 sustancias tóxicas y nocivas para la salud) reproducen en tu piel lo que se conoce como el «rostro del fumador«. Este tipo de señales revelan como se ha deteriorado la piel significativamente por el tabaquismo, estas lineas suelen revelar a temprana edad una apariencia demacrada, profundas arrugas y lineas de expresión bien marcadas, manchas y pozos, tono gris en la piel de la cara y además,, los dientes amarillentos.
Como si todo esto no fuera suficientemente desalentador, además del rostro del fumador, también el tabaquismo afecta la lengua, paladar y garganta del fumador, a esto se lo denomina como la «lengua del fumador», ocasionada por el calor a la que está expuesta constantemente y los alquitranes del cigarrillo. En el peor de los casos, el cáncer de boca suele darse como consecuencia del tabaquismo.
Debemos entender que si la persona está expuesta a un mayor consumo de cigarrillos, tanto mayor serán los riesgos y más profundas las marcas y señales sobre el rostro.
Los daños que provoca la nicotina sobre tu rostro
La nicotina, además de ser la responsable y causante de la adicción al cigarrillo, también es una de las sustancias más letales, es capaz de actuar como un vasoconstrictor, evitando que las heridas sanen con facilidad, de esta manera, al tener acné o alguna afección en la piel, el fumador tiene la desventaja de sanar más lento y poder llegar a quedar con secuelas, como las cicatrices del acné.
Otro de los problemas ocasionados sobre la piel es la reducción de los estrógenos, lo que incrementa la resequedad de la piel y también una atrofia cutánea que se ve con mayor frecuencia en las mujeres fumadoras. Pero eso no es todo, ya que al disminuir los estrógenos también pueden aumentar los andrógenos, favoreciendo el crecimiento excesivo de vello en el rostro.
Por otro lado, es muy común ver una reducción significativa de elastina y colágeno en el rostro del fumador, esta poco grata condición puede ocasionar atrofia dérmica y una disminución del aporte de oxígeno a nuestra piel, creando un entorno ideal para las infecciones en la misma.
Los daños se podrían revertir
A pesar de las consecuencias tan nefastas y poco agradables que produce el tabaquismo sobre el rostro, estas reacciones pueden llegar a revertirse en muchos casos, a diferencia de lo que sucede con el impacto de los rayos ultravioleta.
Lo principal es dejar de fumar, de esto no hay dudas, ni siquiera reducir un poco la cantidad de cigarrillos, sino dejarlo por completo. Posteriormente se deberá comenzar con un tratamiento sintomático. Es importante llevar a la par, un tratamiento con cremas que contengan estrógenos para ayudar a descamar la piel, eliminando las células muertas mediante la exfoliación y ayudar a que la piel se regenere nuevamente. Los peelings naturales son muy favorables para restablecer el rostro del fumador.
La dieta es otro aspecto fundamental en la reparación de la piel del rostro del fumador, estos alimentos deben ayudarnos a combatir los radicales libres, y deben aportar vitaminas esenciales para su regeneración, como la vitamina E, A B1, B2, B3, B5, B9 y B12, selenio y zinc que son unos minerales que ayudan a rejuvenecer la piel. Lo más positivo es que además de evitar padecer enfermedades mortales, al dejar de fumar, la regeneración de la piel se va mostrando de manera rápida.
Este artículo te ha mencionado los daños que pueden aparecer en la piel del rostro del fumador, y lo perjudicial que puede ser el cigarrillo, ¿Necesitas algo más para comenzar hoy mismo a dejar este mal hábito?