Estos 10 alimentos es mejor no comerlos antes de ir a dormir

La calidad del sueño es fundamental para nuestra salud física y mental. Sin embargo, lo que comemos antes de acostarnos puede tener un impacto significativo en cómo dormimos. Ciertos alimentos pueden interferir con nuestra capacidad para conciliar el sueño o mantener un sueño reparador.

A continuación, exploramos diez alimentos que es mejor evitar antes de ir a dormir y explicamos en detalle por qué es recomendable hacerlo.

1. Chocolate

El chocolate, especialmente el chocolate oscuro, contiene cafeína y teobromina. Estos son estimulantes naturales que pueden mantenerte despierto. La cafeína bloquea los receptores de adenosina en el cerebro, que normalmente te ayudarían a relajarte y dormir.

La teobromina, por su parte, aumenta la frecuencia cardíaca y puede causar insomnio. Aunque una pequeña cantidad de chocolate puede no afectar a todos de la misma manera, es mejor evitarlo antes de acostarse.

2. Queso curado

El queso curado como el parmesano, el cheddar y el gouda contienen altos niveles de tiramina. La tiramina es un aminoácido que puede desencadenar la liberación de norepinefrina, un neurotransmisor que aumenta el estado de alerta. Este aumento en la actividad cerebral puede dificultar la capacidad de relajarse y conciliar el sueño. Si deseas un snack antes de dormir, opta por quesos frescos o blandos como el requesón.

3. Helado

El helado es un placer culpable para muchos, pero su alto contenido en grasas y azúcares puede afectar negativamente tu sueño. Las grasas tardan más tiempo en digerirse, lo que puede causar malestar estomacal y reflujo ácido durante la noche.

Además, el azúcar puede causar picos y caídas en los niveles de energía, lo que puede interrumpir tu ciclo de sueño. Si tienes antojo de algo dulce, prueba una porción de fruta baja en azúcar.

4. Carnes rojas

Carne de laboratorio

Las carnes rojas son ricas en proteínas y grasas, lo que las hace difíciles de digerir, especialmente justo antes de dormir. La digestión lenta puede llevar a molestias digestivas y mantener tu cuerpo trabajando en lugar de descansar. Además, las comidas pesadas antes de acostarse pueden aumentar la temperatura corporal, lo que puede dificultar el sueño. Es mejor optar por proteínas ligeras como el pollo o el pescado si necesitas cenar tarde.

5. Alimentos picantes

Los alimentos picantes pueden causar indigestión y reflujo ácido, lo cual es particularmente problemático cuando te acuestas poco después de comer. El capsaicinoide en los chiles puede irritar el revestimiento del estómago, causando ardor y molestias que pueden interrumpir tu sueño. Si disfrutas de la comida picante, intenta consumirla al mediodía en lugar de la noche.

6. Café y té

El café y ciertos tipos de té contienen cafeína, un estimulante conocido por interferir con el sueño. Incluso los tés descafeinados pueden contener trazas de cafeína suficientes para afectar a las personas más sensibles.

La cafeína bloquea la adenosina, una sustancia química que promueve el sueño, y puede permanecer en tu sistema durante varias horas. Es recomendable evitar el consumo de bebidas con cafeína al menos seis horas antes de acostarse.

7. Alcohol

Aunque el alcohol puede inducir somnolencia inicialmente, su consumo antes de dormir puede interrumpir las fases del sueño profundo. El alcohol reduce el sueño REM (movimiento ocular rápido), una fase crucial para el descanso y la recuperación.

Esto puede resultar en despertares frecuentes durante la noche y una sensación de no haber descansado bien al despertar. Limita el consumo de alcohol, especialmente en las horas previas a acostarte.

8. Refrescos

Los refrescos contienen cafeína y altos niveles de azúcar, ambos disruptores del sueño. La cafeína actúa como un estimulante, mientras que el azúcar puede provocar fluctuaciones rápidas en los niveles de energía, seguidas de caídas que pueden interrumpir el sueño. Además, el gas de los refrescos puede causar hinchazón y malestar estomacal. Opta por agua o infusiones de hierbas antes de dormir.

9. Frutas cítricas

Las frutas cítricas como naranjas, limones y pomelos son altamente ácidas y pueden causar reflujo ácido. El ácido puede irritar el esófago y provocar ardor, especialmente cuando te acuestas.

Además, su alto contenido de vitamina C puede aumentar la energía, lo que no es ideal justo antes de dormir. Es mejor consumir frutas menos ácidas como las manzanas o los plátanos si necesitas un snack nocturno.

10. Comida rápida

La comida rápida suele ser alta en grasas, sales y azúcares. Estos componentes son difíciles de digerir y pueden provocar hinchazón, malestar estomacal y deshidratación, factores que afectan negativamente el sueño.

Además, el alto contenido de sodio puede causar retención de líquidos y aumentar la presión arterial, lo que puede dificultar el sueño. Si necesitas una cena rápida, opta por opciones más saludables como ensaladas o sándwiches ligeros.

Recomendaciones finales

Para favorecer un sueño reparador, es aconsejable optar por alimentos ligeros y de fácil digestión antes de acostarse. Algunas opciones incluyen yogur natural, plátanos, avena y leche caliente. Además, es importante cenar al menos dos horas antes de acostarse para permitir una digestión adecuada y reducir el riesgo de interrupciones del sueño.

Mantener una dieta equilibrada y saludable a lo largo del día también contribuirá a mejorar la calidad del descanso nocturno. Si experimentas problemas de sueño persistentes, considera consultar a un profesional de la salud para recibir orientación específica y personalizada.