Estabas esperando el verano con mucha expectación. Hora de sol, mar y menos maquillaje, ¿verdad? Pero, ¿qué sucede cuando muchos de nosotros desarrollamos acné repentinamente cuando comienza nuestra época favorita del año?
Errores que te hacen salir acné en verano
¿Qué errores cometemos que pueden provocar acné y cómo podemos deshacernos de este enemigo de los descuidos veraniegos?
1. No cambias tus productos para el cuidado de la piel
Es genial que hayas encontrado los productos para el cuidado de la piel que funcionan para tu piel. Sin embargo, esto no significa que vayan a funcionar igual de bien en invierno que en verano.
Cada temporada tu piel tiene diferentes necesidades dependiendo de las condiciones ambientales, como la humedad, el sol, etc. Por lo tanto, la crema hidratante que te dio una piel perfecta en el invierno, ahora puede no absorberse mucho y causar brotes de grasa y acné.
Consulta a tu dermatólogo y verás que existen excelentes alternativas. Por ejemplo, los sérums que tienen una textura fina de gel que no apelmaza la piel, sin que le falte nada en eficacia gracias a la sobreconcentración de ingredientes que los caracteriza.
2. Dejar de usar productos para la piel
No solo apegarte a tus cremas favoritas, sino todo lo contrario, omitirlas, puede tener resultados igualmente negativos para tu piel. A menudo escuchamos a los pacientes decir que dejan de usar la crema hidratante por completo en el verano porque sienten que, combinado con la humedad del ambiente, los vuelve grasosos, o que dejan de usar sus productos para controlar el acné para evitar la fotorreacción de su piel.
Afortunadamente, los productos farmacéuticos y la cosmetología ahora tienen formulaciones altamente efectivas para cada tipo de piel, para cada necesidad (hidratante, antienvejecimiento, nutritiva e incluso antiinflamatoria para pieles propensas al acné) y para cada temporada que superan tales limitaciones.
3. No usas protector solar
Los efectos de la exposición continua al sol sobre nuestra piel y salud son ahora incalculables y los problemas cutáneos que provoca, como la fotodermatitis, han ido en aumento en los últimos años. Entonces, si de repente tienes granos en la cara y el cuerpo, piensa si saliste al sol sin protección. El protector solar de amplio espectro debe usarse diariamente, desde el amanecer hasta el atardecer, con sol, nube o lluvia, y reaplicarse regularmente durante el día.
4. Estás usando el protector solar equivocado
No existe un protector solar incorrecto, pero sí un protector solar inadecuado para sus necesidades. Por ejemplo, si quieres un alto índice de protección pero tienes la piel grasa, ya no hace falta que elijas composiciones muy pesadas, ya que hay nuevas texturas ligeras que ofrecen una cobertura total, a la vez que son prácticamente invisibles. ¡Pregúntale a tu dermatólogo!
5. Exposición solar excesiva
Incluso si usas protector solar, y sientes que el sol ayuda a eliminar las espinillas, no te excedas. Además de las reacciones impredecibles de la piel, la luz solar puede desencadenar la aparición de acné, mientras que sin duda causará hiperpigmentación de las espinillas ya existentes, dejando marcas oscuras en su lugar para siempre.
6. No te quitas el sudor de inmediato
Ya sea que estés de viaje o pasando el día en la playa, lo más probable es que estés sudando una y otra vez. Asegúrate de lavarte la cara y el cuerpo lo más pronto y con la mayor frecuencia posible, ya que cuanto más tiempo permanece el sudor en la piel, se convierte en una fuente de infección que, naturalmente, puede desencadenar el acné.
Incluso puedes consultar a tu dermatólogo sobre limpiadores especializados con ingredientes activos para obtener resultados aún más efectivos.