Por qué no deberías ni siquiera comer la rebanada «limpia» de una barra de pan con moho

Todos hemos estado allí: abres la bolsa de pan y descubres que una o dos rebanadas tienen moho. Puede que te sientas tentado a simplemente quitar la parte afectada y comer el resto, especialmente si parece «limpio». Sin embargo, esta no es una buena idea, y aquí te explicamos por qué.

La naturaleza del moho en los alimentos

El moho es un tipo de hongo que crece en forma de filamentos, formando redes que penetran en el alimento. Cuando vemos una mancha de moho en la superficie del pan, estamos viendo solo la punta del iceberg.

La parte visible del moho es la esporulación, pero su red de raíces, o micelio, puede estar extendiéndose por dentro del pan, mucho más allá de lo que nuestros ojos pueden detectar.

Toxinas producidas por el moho

Algunos mohos producen sustancias tóxicas llamadas micotoxinas. Estas toxinas pueden causar una variedad de problemas de salud si se ingieren, inhalan o entran en contacto con la piel. Incluso si retiras la parte del pan con moho visible, las micotoxinas aún pueden estar presentes en las partes que parecen «limpias».

Estas toxinas no son destruidas por las altas temperaturas, lo que significa que tostar el pan no las eliminará.

Riesgos para la salud

El consumo de moho y sus toxinas puede causar síntomas como náuseas, vómitos, diarrea y otros problemas gastrointestinales.

En casos más severos, especialmente con la exposición prolongada, algunas micotoxinas pueden afectar el sistema inmunológico, nervioso o incluso actuar como carcinógenos.

Vulnerabilidad en individuos específicos

Mientras que cualquier persona puede tener una reacción adversa al consumir moho, ciertos grupos son más susceptibles a los efectos negativos.

Esto incluye a niños, ancianos, mujeres embarazadas y personas con sistemas inmunológicos comprometidos. Para estos grupos, incluso una pequeña cantidad de moho o micotoxinas puede causar problemas de salud significativos.

No vale la pena el riesgo

Aunque pueda parecer un desperdicio tirar una barra de pan por unas pocas manchas de moho, el riesgo de exposición a micotoxinas y otros compuestos dañinos hace que no valga la pena. Es mejor prevenir que lamentar, especialmente cuando se trata de tu salud y bienestar.

Conclusión

La próxima vez que te encuentres con una rebanada de pan con moho, resiste la tentación de simplemente quitar la parte afectada y comer el resto.

El moho es más que lo que se ve a simple vista, y las posibles consecuencias para la salud de comer pan contaminado superan con creces el costo de reemplazar una barra de pan. Siempre es mejor optar por la seguridad y descartar alimentos mohosos para proteger tu salud.