Cuando piensas en las personas agradables en tu vida, probablemente también las ves como genuinas, provechosas y felices. La bondad es una virtud asombrosa, pero a menudo tiene un lado oscuro que muchas personas no ven. A veces ser inquebrantables, puede causar que una persona descuidarse a sí misma. Sus deseos, sus necesidades y su propia felicidad, es puesta de lado para poner a otros en primer lugar.
3 razones por las que las personas agradables están a menudo deprimidas
Aquí hay tres razones por las que la gente agradable a menudo están deprimida:
1. Son personas demasiado complacientes
Las personas agradables, a menudo se esfuerzan por complacer a los demás. Harán todo lo posible para ser útiles, lo que puede acabar convirtiéndolos en un muñeco para las personas que están interesados en aprovecharse. Cuando otras personas se dan cuenta de que prefieres hacerlas felices, a hacerte tú mismo feliz, pueden asumir que tienes poco que ofrecer al mundo. Pueden empezar a desestimar tus opiniones e ideas, lo que puede conducir a tu propia duda y baja autoestima.
Es importante aprender que todavía puedes ser agradable con los demás mientras expresas tus opiniones. Pégate a tus valores, comparte tus ideas y exige respeto de los demás. Lo más importante, respétate ti mismo. No permitas que nadie más piense que tus sentimientos pueden ser ignorados.
2. Permiten que otros definan su sentido de sí mismo
La gente amable puede quedarse atrapada en el hábito de vivir la vida de otra persona. Ellos van a la escuela para complacer a sus padres, empacan y se cambian de vivienda para complacer a su pareja, salen en una noche que necesitan estudiar sólo para complacer a sus amigos. Terminan viviendo una vida que no disfrutan. Cada movimiento que hacen, es el sueño de otra persona, no de ellos. Esto puede causar depresión y resentimiento.
Cuidar de sí mismo no es egoísta. Ser amable no significa que tienes que hacer lo que todo el mundo quiere que hagas, 100% del tiempo. Es importante ir detrás de tus sueños y crear una vida que te hace feliz. Tus amigos y familiares tienen sus propias vidas para vivir. No dejes que vivan la tuya por ti.
3. Son siempre amables, incluso cuando es por las razones incorrectas
Existe tal cosa como ser amable por las razones equivocadas. Ser amable porque quieres ser querido o conseguir la aprobación de otra persona, solo te hará infeliz al final. La amabilidad se siente bien cuando es genuina y viene del corazón. Si estás buscando algo a cambio de tu amabilidad, te dejará vacío y decepcionado.
Si tus acciones son porque quieres que a los demás les gustes o quieres obtener la aprobación de otra persona, retrocede y pregúntate por qué. Eres el único que puede hacerte feliz. Tu autoestima está determinada por ti y sólo por ti. Asegúrate de que tu amabilidad no se basa en buscar algo a cambio.