Las cicatrices de tu niñez tienen una manera de permanecer con contigo. Si alguien te preguntara si fuiste abandonado emocionalmente cuando eras niño, tu respuesta inmediata podría ser «no». Pero si profundizas un poco más, comprenderás que tu comportamiento como adulto tiene mucho que ver con tus experiencias como un niño. Por doloroso que pueda ser mirar hacia atrás, el que hayas sido un niño descuidado podría ser la razón detrás de tus acciones de hoy.
Si fuiste un niño descuidado estas son algunas señales
6 señales de que sufriste abandono emocional cuando eras un niño.
1. Te sientes insensible
Sentirse insensible es algo que puede ir y venir. No es una sensación física, es una sensación emocional. De vez en cuando, te sientes apático de todo lo que está sucediendo a tu alrededor. Te das cuenta de que debes sentir alguna emoción, pero nada realmente parece importar. Este tipo de respuesta emocional es una señal de que fuiste emocionalmente descuidado como un niño. Aprendiste a una edad temprana a sofocar tus emociones para que no te lastimen.
2. Rechazas la ayuda de otros
Si no fuiste atendido emocionalmente cuando eras niño, a menudo no tenías ayuda cuando la necesitabas más. Estabas constantemente solo. Este sentimiento puede seguirte hasta la edad adulta. Aprendiste a no ser dependiente de nadie, así que incluso si las cosas son difíciles para ti, te niegas a buscar ayuda de otros.
3. Tienes baja autoestima
Baja autoestima puede estar vinculado a muchas cosas, incluyendo ser emocionalmente descuidado de niño. Cuando eras pequeño, quizás te sentiste como si no valieras el tiempo o el amor de tus padres, porque nunca te prestaron mucha atención. Aunque no es cierto, este sentimiento puede ser difícil de sacudir. Puede traducirse en baja autoestima y baja autoestima a lo largo de tu vida adulta.
4. Sientes que falta algo
Si no te prestaban atención emocional de pequeño, quizás tienes siempre la sensación de que algo falta. Hay un agujero en el interior que dejas abierto para el amor que anhelas de una persona determinada. En el fondo, crees que llenar este espacio finalmente te traerá alegría.
5. Eres un perfeccionista
Cuando un niño es descuidado de atención, puede intentar casi cualquier cosa para obtener la atención de su ser querido. Si has estado buscando esa atención toda su vida, podrías terminar siendo un perfeccionista. Intentas ser perfecto en todo lo que haces, para finalmente ser notado y apreciado.
6. Eres sensible al rechazo
¿Eres sensible al rechazo? Tener miedo al rechazo en tu vida adulta es un signo de rechazo en el pasado. Haber sido un niño descuidado, puede crear un miedo dentro de ti que permanece contigo. Incluso la crítica constructiva te duele, porque sientes que estás siendo atacado y que no eres suficientemente bueno.