Es muy probable que en algún momento de tu vida leyeras la frase quemadores de grasa en más de una revista, o que la escucharas en algún comercial de televisión, pero ¿qué son y cómo funcionan? Simplemente son productos que, ya sean farmacéuticos o naturales, te ayudan a eliminar los ácidos grasos que se niegan a ser aniquilados a pesar de las horas de gimnasio.
Antes de elegir un quemador de grasa te pido que me des la oportunidad de darte un consejo: los quemadores de grasa no te harán perder peso por sí solos, simplemente harán que el proceso de perderlo sea más sencillo.
Si estás tratando de perder grasa, aunque encuentres el quemador de grasa más sano y efectivo, e incluso lo consumas en exceso, no será suficiente. Simplemente no hay ningún compuesto seguro y natural para «quemar grasa» lo suficientemente poderoso como para, por sí solo, causar una reducción significativa de peso. Sabes perfectamente que aquí entran en juego otros factores, como la dieta, el ejercicio y la condición física y particular de cada persona: genética y tipos de padecimientos.
¿Qué debo tener en cuenta para elegir un quemador de grasa?
Existen diferentes elementos a considerar a la hora de adquirir un quemador de grasa, estos pueden ser incluso simplemente de gustos. Aquí te dejo dos puntos básicos a considerar antes de tomar una decisión:
1. Quemadores de grasa naturales o farmacéuticos
Es fundamental que la primera decisión que tomes sea sobre este punto, como cualquier todo cada uno de estos quemadores tiene sus ventajas y sus contras. Si llegas a decidirte por un quemador de grasa procesado, solo te pediré que evites a toda costa consumir productos que contengan E-Fedrina, porque este ingrediente posee muchos efectos secundarios.
2. Quemadores de grasa termogénicos o lipotrópicos
Estos dos son los tipos de quemadores de grasa que existen, el primero trabaja en tu cuerpo acelerando tu metabolismo, lo que lógicamente se va a derivar una mayor quema de calorías. Por otro lado, los lipotrópicos se encargan de desintegrar la grasa acumulada, facilitando su eliminación mediante el ejercicio. Así que haz tu elección dependiendo de cómo es el funcionamiento de tu cuerpo.
¿Qué ingredientes poseen los quemadores de grasa?
Como se mencionó anteriormente, los quemadores de grasa pueden ser naturales o procesados, por lo cual sus componentes pueden variar, pero a rasgos generales, se puede mencionar que cualquier quemador de grasa posee algunos de estos elementos:
- Té verde: Promueve la disminución de grasa corporal al modificar la metabolización de las mismas.
- Cafeína: Acelera el metabolismo, ayudando a que la pérdida de peso sea más rápida.
- Carnitina: Es un aminoácido que estimula el movimiento de los ácidos grasos hacia sitios en donde resulta más fácil quemarlos.
- Sinefrina: Es un alcaloide que acelera el metabolismo, pero tiende a aumentar la presión sanguínea.
- Cromo: Regula los niveles de azúcar del organismo.
- Colina: Es la vitamina B 7, la cual es una herramienta para mantener el hígado libre de células grasas.
Los quemadores de grasa son tus aliados… ¡Pero debes tener cuidado!
Si bien las precauciones a la hora de consumir quemadores de grasa, no son mayores a las que suelen darse con cualquier medicamento, sí es importante estar atentos a casos especiales, por ejemplo, las personas que sufren de hipertensión o de problemas de la tiroides deben evitar a toda costa los quemadores termogénicos.
Sin embargo los quemadores lipotrópicos son de libre consumo por casi cualquier persona, sin importar ninguna condición. Las únicas restricciones son en mujeres embarazadas o en menores de edad que se encuentren en pleno desarrollo.
