Ten cuidado con estas marcas de jamón pirata que pueden dañar tu salud

El jamón es uno de los alimentos más consumidos en México, tanto en el desayuno como en la cena o la merienda. Sin embargo, no todos los jamones que se venden en el mercado son de buena calidad y algunos pueden ser perjudiciales para la salud.

La Profeco realizó un estudio a 44 marcas de jamón cocido de diferentes categorías: extrafino, fino, preferente, comercial y económico.

Los resultados mostraron que algunas marcas no cumplen con las especificaciones de la norma NOM-158-SCFI-2003, que establece los requisitos de calidad, composición e información comercial de estos productos.

Algunas marcas de jamón contienen menos carne de la que declaran, otras tienen ingredientes que no deberían tener según su clasificación y otras omiten información o usan términos engañosos en sus etiquetas.

Además, algunas marcas pueden contener alérgenos como soya, gluten o leche, que deben ser declarados para evitar riesgos a los consumidores.

Marcas reprobadas por la Profeco

Estas son algunas de las marcas de jamón pirata que debes evitar, según el estudio de la Profeco:

Parma Campestre

Esta marca se ostenta como jamón de pierna fino, pero contiene fécula, que es un almidón que se usa para abaratar costos y dar consistencia al producto.

Según la norma, el jamón fino no debe tener fécula. El fabricante mostró el cambio de etiqueta para que corresponda a la categoría preferente.

Cuadritos

Esta marca se vende a granel como jamón virginia de pavo preferente, pero no cumple con el porcentaje de proteína libre de grasa que debe tener según su clasificación. Además, tiene un alto contenido de sodio y grasa.

San Rafael

Esta marca se presenta como jamón real pierna 100% natural, pero contiene almidón, que no está declarado en su etiqueta. El almidón no es un ingrediente natural y puede afectar la calidad del producto.

Lala Plenia

Esta marca se anuncia como jamón virginia de pavo reducido en sodio, pero no cumple con el mínimo del 25% de reducción en sodio necesario para usar ese término. También tiene un alto contenido de grasa y sodio.

Fud

Esta marca ofrece varios tipos de jamón cocido: virginia de pavo, pechuga de pavo y pierna clásica. Sin embargo, todos tienen un bajo contenido de carne y un alto contenido de fécula, sodio y grasa.

Además, usan el término «sabor ahumado», que puede inducir a error al consumidor sobre el proceso de elaboración del producto.

Estas son solo algunas de las marcas que fueron reprobadas por la Profeco en su estudio. Te recomendamos leer las etiquetas antes de comprar cualquier producto y elegir aquellos que tengan más carne y menos aditivos. Así podrás cuidar tu salud y tu bolsillo.