El dolor, el calor, el enrojecimiento y la hinchazón constituyen las manifestaciones clásicas de la inflamación. Generalmente, ante estos síntomas, los pacientes no necesitan una intervención quirúrgica inmediata, sino tratamientos orientados a aliviar el dolor y mejorar la calidad de vida.
En la mayoría de los casos, la génesis del dolor es inflamatoria, independientemente de su etiología. Con la elucidación del papel de las citocinas inflamatorias, ahora existe una comprensión clara de las vías por las cuales muchos medicamentos antiinflamatorios pueden mitigar la inflamación y aliviar el dolor.
El uso de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como el ibuprofeno, sigue siendo fundamental en la enseñanza clásica de la mayoría de los médicos para el tratamiento del dolor inflamatorio asociado a las articulaciones y la columna vertebral, a pesar de sus efectos secundarios bien conocidos.
Debido a los significativos perfiles de efectos secundarios de los medicamentos esteroides y AINE, ha surgido un interés creciente en compuestos naturales que han sido utilizados durante siglos para reducir el dolor y la inflamación. Muchos de estos compuestos naturales actúan inhibiendo las vías inflamatorias de manera similar a los AINE.
El Ibuprofeno, un AINE muy usado
El ibuprofeno es uno de los antiinflamatorios más usados, pero no todos saben que puede tener efectos secundarios serios, por ello encontrar alternativas naturales al ibuprofeno puede hacer una gran diferencia respecto a la calidad de vida a largo plazo de cualquier persona.
El dicho solía decir: «Tome dos aspirinas y llame por la mañana» pero muchas personas recurren al Ibuprofeno para aliviar la inflamación, el dolor y la fiebre.
Este fármaco antiinflamatorio no esteroideo, está disponible tanto para venta libre como con receta médica, se utiliza comúnmente para tratar la artritis, síntomas menstruales, dolor de cabeza, dolor y malestar general, y diversas condiciones inflamatorias.
Los efectos secundarios de Ibuprofeno
Aunque muchas personas consideran el ibuprofeno relativamente benigno, este se asocia con un aumento en el riesgo de problemas cardíacos y circulatorios, como el accidente cerebrovascular y el ataque cardíaco, así como problemas gastrointestinales, como el sangrado o la perforación del estómago o el tracto intestinal.
Estos riesgos se intensifican cuanto más tiempo se consume el ibuprofeno, aunque la duración exacta que afecta a cada individuo varía dependiendo de su estado general de salud, el uso de otros medicamentos, la edad y otros factores determinantes.
Investigación que respalda esta información
Una investigación ampliamente reconocida y publicada en la revista médica The Lancet en 2016, llevada a cabo por el profesor Peter Jüni de la Universidad de Toronto, Canadá, y su equipo, analizó los riesgos asociados con el uso de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), incluido el ibuprofeno. El estudio revisó datos de más de 446,000 personas, de las cuales aproximadamente 61,000 habían sufrido ataques cardíacos o accidentes cerebrovasculares.
Los hallazgos indicaron que el uso de AINE, como el ibuprofeno, estaba vinculado a un aumento significativo del riesgo de eventos cardíacos adversos. El riesgo de sufrir un ataque cardíaco se incrementaba en un 19% en aquellos que consumían estos medicamentos en comparación con quienes no los usaban. La investigación también destacó que el riesgo de complicaciones aumentaba con dosis más altas y con el uso prolongado de estos fármacos.
Esta y otras investigaciones subrayan la importancia de considerar los riesgos y beneficios al tomar ibuprofeno, especialmente para el manejo a largo plazo del dolor o de condiciones inflamatorias, y resaltan la necesidad de supervisión médica en su consumo.
Al final del artículo, encontrarás una lista de estudios sobre los efectos nocivos de este conocido analgésico.
Alternativas naturales al Ibuprofeno
Muchos estudios se han realizado en diversos analgésicos naturales y antiinflamatorios que pueden ser utilizados como alternativas al Ibuprofeno. En general, tienen pocos o ningún efecto secundario.
Aquí están algunos que puedes desear considerar. Siempre debes consultar a un profesional de la salud bien informado antes de comenzar un nuevo programa de tratamiento.
1. Aceite de onagra y semilla de cáñamo
La combinación de aceite de onagra y aceite de semilla de cáñamo ha sido evaluada clínicamente en pacientes con esclerosis múltiple (EM), un trastorno inflamatorio crónico. Los estudios han demostrado una reducción significativa en la inflamación cuando los pacientes recibieron esta combinación en comparación con un placebo.
2. Boswellia: una alternativa natural
Proveniente del árbol Boswellia serrata de la India, la Boswellia se destaca por sus propiedades antiinflamatorias, gracias a los ácidos boswélicos. Estos ácidos mejoran la circulación hacia las articulaciones y previenen la entrada de células inflamatorias en los tejidos dañados, siendo conocida también como «incienso indio».
3. Capsaicina
Este componente activo del chile se aplica tópicamente para aliviar el dolor de nervios, músculos y articulaciones. Su efectividad se debe a la interrupción de la sustancia P, encargada de transmitir las señales de dolor al cerebro, constituyéndose en una de las alternativas más populares al ibuprofeno.
4. Uña de Gato
La Uncaria tomentosa, conocida como uña de gato y originaria de América del Sur, actúa como un potente antiinflamatorio bloqueando la producción de prostaglandinas, que contribuyen al dolor. Ofrece beneficios similares a los del ibuprofeno, pero sin efectos secundarios.
5. Curcumina
Extraída de la cúrcuma, la curcumina es un poderoso analgésico que bloquea las proteínas causantes de inflamación y detiene la transmisión del dolor al cerebro mediante la sustancia P. Estudios confirman su eficacia en el alivio del dolor crónico, especialmente en casos de artritis reumatoide, recomendándose una dosis de 400 a 600 mg tres veces al día.
6. Ácidos grasos omega-3
Con reconocidas propiedades antiinflamatorias, los omega-3 son beneficiosos para quienes padecen de artritis y otras condiciones inflamatorias. Además, reducen el riesgo cardiovascular, un aspecto crucial para personas con artritis reumatoide. Se recomienda una dosis diaria de 1,000 mg de aceite de pescado.
7. Corteza de sauce blanco
Predecesora de la aspirina, esta hierba contiene salicina, que se convierte en ácido salicílico en el estómago, ofreciendo una alternativa menos irritante y efectiva para el alivio del dolor, la inflamación y la fiebre. La dosis sugerida es de 1 a 2 goteros de tintura diariamente.
8. Bayas y otros antioxidantes
Incluir bayas orgánicas y una variedad de frutas y verduras en la dieta aporta antioxidantes (vitaminas C, E, betacaroteno), bioflavonoides (quercetina, limoneno, hesperidina) y fibra necesaria para una buena digestión y equilibrio de la microflora intestinal. Se recomienda que las mujeres aspiren a al menos 7 porciones diarias y los hombres a 9, donde una porción equivale a entre ½ y 1 taza, buscando siempre la mayor variedad de colores.
Referencias:
- Maroon, J. C., Bost, J. W., & Maroon, A. (2010). Natural anti-inflammatory agents for pain relief. Surgical neurology international, 1, 80. https://doi.org/10.4103/2152-7806.73804
- Ghasemian, M., Owlia, S. y Owlia, MB (2016). Revisión de medicamentos herbales antiinflamatorios. Avances en ciencias farmacológicas, 2016 , 9130979. https://doi.org/10.1155/2016/9130979
- British Medical Journal (BMJ) – 2017: Un estudio publicado en esta revista encontró que el uso de AINE estaba asociado con un riesgo incrementado de infarto de miocardio. El análisis se basó en datos de más de 350,000 pacientes.
- Journal of the American College of Cardiology – 2018: Esta investigación indicó que incluso el uso a corto plazo de AINE podría aumentar el riesgo de sufrir un evento cardiovascular, especialmente en individuos con condiciones preexistentes de salud cardíaca.
- American Journal of Medicine – 2019: Un estudio que analizó el impacto de los AINE en la salud gastrointestinal concluyó que estos medicamentos aumentan significativamente el riesgo de úlceras estomacales, sangrado gastrointestinal y perforación, especialmente en pacientes mayores.
- Annals of the Rheumatic Diseases – 2020: Investigadores descubrieron que el uso prolongado de altas dosis de AINE podría estar relacionado con un incremento en la incidencia de insuficiencia renal crónica, destacando la importancia de la moderación en el consumo de estos medicamentos.
- Circulation – 2021: Un estudio extenso reafirmó que el uso de AINE, incluido el ibuprofeno, está vinculado con un aumento en el riesgo de problemas cardíacos. El estudio puso especial énfasis en pacientes con un historial de enfermedad cardiovascular o factores de riesgo asociados.
