Baño de pies con bicarbonato de sodio para curar los callos

¿Estas lidiando contra callos antiestéticos y dolorosos en tus pies y dedos de los pies? ¿Te gustaría deshacerte de ellos de forma completamente natural y casera? Todo lo que necesitas es un poco de bicarbonato de sodio y leche para preparar un refrescante y curativo baño de pies con bicarbonato de sodio.

Baño de pies con bicarbonato de sodio

El esfuerzo de tus pies a lo largo de tu vida

Imagina todo el trabajo pesado y el abuso que tus pies han tenido que aguantar a lo largo de tu vida. Estos soportan al menos el 120 por ciento de tu peso corporal mientras estás de pie, y te transportan a la mayoría de los lugares a los que debes ir. Estadísticas dicen que si vives hasta los 80 años, probablemente hayas caminado al menos 170,000 kilómetros en tu vida.

Si haces los cálculos, eso significa que tus pies te habrán desplazado alrededor del ecuador de la tierra cinco veces. No es de extrañar que tus humildes pies y dedos desarrollen condiciones dolorosas como callosidades, juanetes y callos. ¿Cómo puedes hacer frente a estas terribles dolencias?

La anatomía de tus pies

Tu pie puede parecer muy básico si solo observamos el talón, el tobillo, el arco y los dedos. Sin embargo, estos componen una parte complicada del cuerpo que contiene 100 músculos combinados con ligamentos, tendones, 30 articulaciones y 26 huesos. Además, los cinco dedos de cada pie ayudan con el equilibrio y la movilidad.

¿Sabías que la piel de las plantas de los pies es la más gruesa de tu cuerpo? No tiene glándulas sebáceas ni folículos pilosos. Sin embargo, tus pies tienen la mayor concentración de glándulas sudoríparas de tu cuerpo para mantenerlos frescos mientras caminas. A medida que envejeces y después de años de caminar, tus plantas tienden a volverse más gruesas.

La formación de callos

Al igual que otras áreas de la piel de tu cuerpo, tu pie arroja constantemente células muertas de la piel y las reemplaza. Ya que las plantas de los pies no tienen glándulas sebáceas, a menudo pueden secarse, picar y se pueden producir grietas dolorosas. Dado que los pies pueden sudar mucho, son propensos a las infecciones fúngicas y bacterianas a menos que se mantengan limpios y secos.

Tu piel tiene una forma única de defenderse, especialmente en tus pies. Cuando una sección de la piel se frota e irrita continuamente, esta produce células adicionales de la piel para crear una barrera protectora rígida. Y esto es a lo que comúnmente se denomina callos.

¿Por qué tus pies son más propensos a desarrollar callosidades? Considera los zapatos que usas como la respuesta a esta pregunta. Si usas zapatos ajustados que aprietan y frotan, no es de extrañar que desarrolles callosidades dolorosas. Si caminas mucho y no mantienes tus pies humectados, también podrás observar más callosidades de lo habitual.

Tratar los callos de forma con un baño de pies con bicarbonato de sodio

Los callos son capas de piel muerta que no se sienten y se acumulan para proteger la piel viva. Sin embargo, a menudo ejercen presión sobre la piel subyacente, provocando dolor e irritación. Estos pueden formarse en cualquier área donde haya presión al caminar, específicamente en los talones, las puntas de los pies y los lados de los dedos.

Tener callosidades es algo muy normal, y al menos 5 por ciento de los estadounidenses los desarrollan cada año. Los callos generalmente se pueden tratar con remedios caseros como un baño de pies con bicarbonato de sodio. Mimarte un poco de vez en cuando y cuidar apropiadamente de tus dedos puede ahorrarte una visita al podólogo.

Por supuesto, la prevención es la clave para mantener tus pies sanos. Usa zapatos que se ajusten bien a tu talla y ten especial cuidado al caminar descalzo, sobre todo en superficies calientes o en el agua. Aplica crema hidratante regularmente y elimina suavemente los callos no deseados con un baño de pies con bicarbonato de sodio.

Bicarbonato de sodio: uno de los mejores remedios naturales

El bicarbonato de sodio puede encontrarse en su forma natural y también se puede fabricar. Es un compuesto que se encuentra en una sal llamada nacolita. Las propiedades leudantes del bicarbonato de sodio fueron descubiertas en la Francia del siglo XVIII por un químico llamado Nicholas LeBlanc.

No fue hasta más tarde en el siglo XIX que se fabricó bicarbonato de sodio en los Estados Unidos y se usó ampliamente para cocinar, hornear y con fines medicinales. Tiempo después, los científicos descubrieron que tiene propiedades antimicrobianas y antifúngicas, lo que lo convierte en un limpiador y desinfectante natural eficaz.

Cómo usar bicarbonato de sodio en casa

¿Quién podría imaginar que esa caja de bicarbonato de sodio en tu despensa podría tener tantas utilidades? El bicarbonato de sodio no solo es un ingrediente básico para los productos horneados, sino que puedes poner una caja en tu refrigerador y congelador para eliminar los malos olores.

También es un abrasivo suave que lo hace perfecto para limpiar superficies en tu hogar sin rayarlas. Aquí hay algunos otros usos maravillosos que tiene el bicarbonato de sodio.

1. Pasta de dientes natural

¿Sabías que muchos de los productos que usas para tu cuidado personal contienen bicarbonato de sodio? Durante años, la gente lo usó para cepillarse los dientes y refrescar el aliento, por lo que comúnmente puede encontrarse en la pasta de dientes comercial. Este combate los gérmenes que causan las caries y blanquea suavemente los dientes sin dañar el esmalte.

2. Alivia la acidez y la indigestión

Cuando tus abuelos sufrían de acidez estomacal, probablemente mezclaban una cucharadita de bicarbonato de sodio en un vaso de agua y lo bebían para recibir un alivio instantáneo. El bicarbonato de sodio es una sal que neutraliza rápidamente el ácido, por lo que a menudo lo hallarás como el ingrediente principal en las tabletas y remedios líquidos para la acidez.

3. Es un tratamiento eficaz para la piel

El bicarbonato de sodio es un ingrediente económico que puedes agregar a tu rutina casera de cuidado de la piel. Si tienes acné, puedes diluir un poco de bicarbonato de sodio y usarlo para tratar estas imperfecciones. Sus abrasivos suaves pueden exfoliar suavemente las células muertas de la piel que obstruyen los poros. También puede absorber el exceso de grasa de la piel que contribuye al acné.

4. Higiene femenina

El bicarbonato de sodio puede ser el mejor amigo de una mujer. Para usarlo puedes agregar un par de cucharadas en tu tina y tomar un baño curativo para la higiene femenina. Esto ayuda a destruir las bacterias dañinas que causan picazón y mal olor y apoya la flora femenina natural.

El bicarbonato de sodio es un antimicótico que puede aliviar y curar las infecciones por hongos. Algunos proveedores de atención médica alternativos recomiendan supositorios vaginales de bicarbonato de sodio a sus pacientes que tienen candidiasis crónica. Funciona tan bien o incluso mejor que muchas variedades comerciales.

5. Baños de leche

Según los registros del Antiguo Egipto, la legendaria reina del Nilo, Cleopatra, se bañaba regularmente en tinas calientes de leche para su cuidado personal. A lo largo de la historia, otros siguieron el ejemplo de Cleopatra y descubrieron que los baños de leche hacían que su piel se volviera suave y flexible. Cuando agregas leche a un baño de pies con bicarbonato de sodio, tus pies obtendrán el doble de beneficios.

El ácido láctico que se encuentra en la leche actúa como un exfoliante suave, suavizando los callos ásperos y la piel muerta de los pies. También es una forma eficaz de hidratarte para tener unos pies lisos, y suaves al tacto. La leche es un secreto de la cosmética que la icónica belleza de esta figura histórica nos comparte.

Cómo preparar y usar un baño de pies con bicarbonato de sodio

El bicarbonato de sodio es una base suave que la mayoría de las personas pueden usar de manera segura en la piel. Sin embargo, siempre debes diluir este compuesto con agua y nunca frotarlo en tu piel sin diluir. Por seguridad, aplica un poco de solución diluida en una pequeña sección de tu piel para ver si tienes alguna reacción alérgica.

1. Baño de pies con bicarbonato de sodio y leche

Nunca te cansarás de estos baños para pies con bicarbonato de sodio por todos sus beneficios. Sin embargo, limita el uso de estos baños a un par de veces por semana para evitar la irritación de la piel. Asegúrate de usar bicarbonato de sodio y no carbonato de sodio en esta solución.

Lo que necesitas:

Un recipiente de plástico o metal lo suficientemente grande como para remojar tus pies cómodamente

Suficiente agua tibia para llenar el recipiente al menos ¾ de su capacidad.

1 taza de leche tibia o ½ taza de leche en polvo

3 cucharadas bicarbonato de sodio

Preparación:

Mezcla todos los ingredientes en el lavabo para pies hasta que se disuelva el bicarbonato. Coloca ambos pies en la mezcla y déjalos en remojo durante al menos 20 minutos.

Usa una toalla suave y limpia para secarse bien los pies, especialmente entre los dedos. Aplica una crema hidratante en ambos pies y colócate un par de calcetines de algodón limpios. Duerme con los calcetines puestos durante la noche para obtener beneficios óptimos.

2. Trata los callos con un baño de pies con bicarbonato de sodio

Después de tu primer baño de pies con bicarbonato de sodio, notarás que tus callosidades son más suaves y menos dolorosas. Los callos más pequeños a menudo se pueden pelar suavemente con las uñas. Es posible que los callos más extensos y gruesos tarden un poco más en ablandarse lo suficiente como para retirarse.
Cuando te hayas secado los pies después de un buen remojo, puedes usar una piedra pómez fina para lijar suavemente los puntos secos y los callos. Posteriormente aplica un humectante calmante, como manteca de karité orgánica o aceite de coco. Nunca uses una hoja de afeitar para cortar un callo ya que podrías dañar la piel viva y causar una infección.