Cómo quedar embarazada después de los cuarenta

Por mucho que cambien los tiempos y la manera de ver el mundo sea diferente ahora que hace cuarenta años, esa frasecita de “se te pasa el arroz” sigue estando vigente en las cabezas de muchos y muchas. Quedar embarazada tras los 40 años se presenta como un acto mezcla de heroicidad y búsqueda de lo imposible.

Cómo quedar embarazada después de los 40 años

La cuestión es que la dificultad para encontrar un trabajo que nos otorgue la estabilidad y comodidad necesarias para ser padres y las malas perspectivas de futuro que nos ha dejado la última crisis se dejan notar. La edad de quedarse embarazada se retrasa cada vez más, pero que una pueda convertirse en mamá más tarde de lo planeado no tiene que suponer una desventaja.

Embarazo a los 40

La ciencia dice que las posibilidades de quedar embarazada disminuyen a medida que la mujer va cumpliendo años, incluso se ha llegado a decir que cumplidos los 45 es prácticamente imposible concebir un hijo de manera natural. Sin embargo, cada vez son más las mujeres que han cumplido los cuarenta y se quedan embarazadas, ya sea por medio natural o a través de técnicas de fecundación.

Probablemente el dato más positivo para aquellas personas que vean este hecho desde una perspectiva negativa, sea conocer que ser mamá a estas edades conlleva desventajas pero también ventajas, tanto para la madre como para el bebé. Y es que quedarse embarazada tiene sus pros y sus contras a cualquier edad, y probablemente lo mejor sería dejar de comerse la cabeza con un dato tan abstracto como un número.

En cualquier caso sí debemos ser conscientes que en lo relativo a la fertilidad no es lo mismo un cuerpo de veintitantos que un cuerpo de más de cuarenta, así que vamos a analizar qué conlleva eso de vivir un embarazo a los 40.

Ser madre con 40 años

Si has llegado hasta este artículo, es probable que una de tus preocupaciones principales sea la de conocer las posibilidades reales de ser madre con 40 años. Tranquila, como diría ese eslogan ahora tan de moda: Sí se puede. La única diferencia en cuanto a ser madre a (lo que podríamos denominar) una edad tradicional, es que a priori no será tan sencillo lograr quedase en cinta.

Los principales inconvenientes que provocan esa dificultad de la que hablamos están encabezados por la disminución de la reserva ovárica. A partir de los 40 años la reserva ovárica se va viendo comprometida hasta su agotamiento total, algo que va acompañado del aumento del riesgo de aparición de problemas cromosómicos en el teórico cigoto.

El proceso de embarazo tampoco será coser y cantar, y es que la teoría dice que a estas edades aumentan las probabilidades de padecer problemas relacionados con la presión sanguínea, diabetes, sufrir problemas de la placenta o incluso complicaciones en el momento del parto. Se trata de problemas de los que no está exenta ninguna mujer, pero que pueden ser más propensos a aparecer con el paso de los años.

Finalmente, no todos los problemas van a estar del lado femenino. Si nos situamos en el supuesto de que ambos miembros de la pareja cuentan con una edad similar, esto también significa que el esperma puede ser de peor calidad. Aunque los hombres pueden ser capaces de concebir hasta pasados los 60 años, esto no evita que la calidad del esperma se reduzca a medida que se van cumpliendo primaveras.

El lado positivo de quedar embarazada

Reconozco que hasta ahora las características que he comentado sobre quedar embarazada a los 40 no son de lo más positivo, pero es porque considero muy importante el hecho de conocer la situación en profundidad antes de que puedas tomar una decisión al respecto. Pasemos ahora a ver las ventajas que deberías encontrar.

Lo primero que debes tener en cuenta si piensas en ser madre cumplidos los cuarenta, es que cuentas con una experiencia vital remarcable. Es probable que en este momento de tu vida ya hayas desarrollado tu carrera profesional, incluso es normal que hayas pasado por diferentes situaciones y te conozcas a ti misma profundamente. La experiencia es un grado y aquí no iba a ser menos.

En esa misma línea debes valorar el conocimiento que posees. Atravesar diferentes experiencias suele estar relacionado con el tiempo, así que es normal contar con un pasado mucho más rico a los 40 años que a los 20. A la hora de quedar embarazada, debes valorar esta característica como algo muy importante de cara al proceso que vas a afrontar.

En último lugar, pero no menos importante, es frecuente encontrar una buena estabilidad económica en mujeres que han cumplido los cuarenta. Se mire por donde se mire, tener un bebé supone un gran gasto y poder afrontarlo sin preocupaciones será una baza importante que te dará fuerzas para afrontar la idea.

Fertilización in vitro para mujeres de más de 40 años

Conocidas las características principales en torno a la situación de ser mamá con más de 40 años, entramos ahora a valorar un supuesto que también es importante. Conociendo que casi la mitad de mujeres en este rango de edad experimentan problemas de fertilidad, la ayuda externa a la hora de quedar embarazada puede ser una opción que debas valorar seriamente.

Si te encuentras en la franja de edad mencionada y llevas más de 6 meses intentando quedarte embarazada (manteniendo una frecuencia de relaciones de entre 2 y 3 encuentros por semana) sin lograrlo, es recomendable que visites a un especialista. La fertilización in vitro aparecerá como la opción a seguir.

Cuando hablamos de esta técnica de fecundación, lo más frecuente es pensar en el proceso conocido como ovodonación. En él se obtienen óvulos sanos de una paciente anónima y se fecundan con espermatozoides, que podrían ser los de nuestra pareja, pero también podría darse el caso de tener que recurrir a un donante anónimo.

La buena noticia de optar por esta técnica es que la tasa de embarazo por transferencia en mujeres por encima de los 40 años es superior al 50%. La mala noticia es que estamos hablando de un procedimiento bastante costoso, cuya tarifa se sitúa entre los 6.000 y los 8.000 euros de media. Probablemente por ello está cogiendo mucho auge últimamente el proceso de vitrificación de ovocitos.

La vitrificación de ovocitos consiste básicamente en la congelación de óvulos sanos con el fin de poder usarlos en un futuro, conservando sus características óptimas. La edad ideal para llevar a cabo esta técnica se sitúa en torno a los 32 años, por lo que en esta ocasión la solución es apta para aquellas mujeres que se encuentren en dicha franja de edad y no valoren el quedarse embarazada como una opción factible a corto plazo.

¿Cómo quedar embarazada?

Con las cartas sobre la mesa, podemos concluir que quedar embarazada después de los cuarenta no supone ya ningún drama. Viendo el aumento de las cifras, incluso podríamos empezar a pensar en que dentro de unos años podría ser hasta una tendencia normalizada. Y es que más allá de lo que nos permite nuestro ritmo de vida, si cada vez vivimos más años ¿por qué no retrasar el momento de ser madres?

Sin darme cuenta acabo de dar con una de las claves que, a mi parecer, influye mucho en la percepción de todo este asunto. Cuando hablamos de quedar embaraza a una edad u otra, estamos suponiendo que el cuerpo se encuentra en un estado físico determinado. Sin embargo, no será lo mismo un cuerpo de una veinteañera que fuma, no cuida la alimentación ni su estado físico, que el de una que sí lo hace.

Evidentemente los genes jugarán un papel importante en este supuesto, pero si estás pensando en ser madre a los 40, cuánto más mires por tu cuerpo y tu salud, mejor resultado de cara a mantener altas tus posibilidades.