¿Cuáles fueron tus elecciones de bebidas hoy? Esas bebidas comunes, como los refrescos, pueden causar serios daños a tu salud a largo plazo, como obesidad, diabetes y gota.

¿Cuáles son las bebidas más perjudiciales para tu salud?
Según Harvard, aunque el consumo excesivo de alcohol puede ser perjudicial, en moderación puede ser saludable para la mayoría de las personas, excepto para algunos grupos específicos. Sin embargo, es importante limitar su consumo, al igual que con la leche y los jugos de fruta.
Por otro lado, el mismo sitio especializado en salud señala que las bebidas azucaradas ocupan el último lugar en la lista de bebidas saludables y se deben evitar, especialmente los refrescos, las bebidas deportivas y energéticas.
Estas bebidas ofrecen hidratación, pero contienen una gran cantidad de calorías innecesarias que el cuerpo puede tener dificultades para regular.
Este grupo incluye cualquier bebida con azúcar añadida u otros edulcorantes, como jarabe de maíz con alto contenido de fructosa, sacarosa, concentrados de jugo de frutas, entre otros.
Un consumo elevado de estas bebidas se ha asociado con un mayor riesgo de muerte prematura y enfermedades.
Efectos negativos de las bebidas perjudiciales para tu cuerpo
Ganancia de peso: Según Harvard, si se consume una lata promedio de bebidas azucaradas al día, sin reducir calorías en otras áreas, es posible aumentar poco más de dos kilos en un año.
Obesidad: La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) advierte que el consumo excesivo de bebidas saborizadas puede aumentar el riesgo de desarrollar obesidad, desequilibrando considerablemente la dieta.
Diabetes tipo 2: Harvard señala que el consumo diario de 1 o 2 latas de estas bebidas incrementa las probabilidades de desarrollar esta enfermedad crónica.
Gota: Se han realizado estudios que vinculan el consumo diario de una lata de estas bebidas con la aparición de gota, una forma de artritis que causa dolores agudos en las articulaciones.
1. Bebidas gaseosas
Las bebidas gaseosas carecen de nutrientes y su consumo se ha vuelto cada vez más común en la vida diaria. Incluso algunas personas han reemplazado el agua simple con estas bebidas.
El consumo de bebidas gaseosas se ha asociado con diversos problemas de salud, como enfermedades cardíacas (la principal causa de ataques al corazón), así como daño renal.
De hecho, las bebidas gaseosas son especialmente perjudiciales para la salud de los riñones, especialmente las colas, debido a su alto contenido de azúcar, que puede afectar los vasos sanguíneos de los órganos, y el ácido fosfórico, que debilita los huesos.
2. Bebidas isotónicas comerciales
Es importante destacar que, para aquellos que no realizan ejercicio de alta intensidad, las bebidas isotónicas son simplemente bebidas azucaradas.
Según Harvard, este tipo de bebidas tienen como objetivo: Reponer la glucosa, líquidos y electrolitos perdidos después de realizar ejercicios intensos durante una hora o más. Contienen carbohidratos en forma de azúcar o edulcorantes (que no se recomiendan para niños según la Profeco). Están diseñadas para una rápida hidratación y absorción.
El sitio mencionado explica que las investigaciones no son concluyentes, pero algunos estudios indican que las bebidas isotónicas no brindan beneficios reales y suelen ser innecesarias para los niños, aunque pueden ser efectivas para la hidratación de atletas que sudan mucho.
Estas bebidas contienen menos azúcar que los refrescos, pero consumirlas en exceso, especialmente si no se realiza una gran cantidad de ejercicio, puede llevar a:
Riesgo de sobrepeso y obesidad. Desarrollo de diabetes tipo 2. Enfermedades cardiovasculares. Aparición de gota. Aumento del riesgo de caries dental.
3. Bebidas energéticas
Las bebidas energéticas son una combinación de cafeína y altas cantidades de azúcar, algunas incluso contienen ingredientes como ginseng y guaraná, que proporcionan un estado de alerta al cuerpo.
Además de los riesgos asociados con las bebidas azucaradas, las bebidas energéticas son motivo de preocupación debido a la falta de regulación y la agresiva publicidad dirigida a menores de edad, según explica Harvard. Se han realizado estudios que vinculan su consumo con:
- Aumento del estrés.
- Comportamientos agresivos.
- Mayor propensión al abuso de alcohol y cigarrillos.
- Mayor riesgo de obesidad y diabetes tipo 2.
- Deterioro de la calidad del sueño.
- Irritación estomacal.
- Problemas de salud mental.
- Problemas cardíacos, como aumento de la presión arterial, ritmo cardíaco irregular, convulsiones o paro cardíaco.
- Problemas metabólicos, renales o dentales.
Es importante tener en cuenta el impacto que ciertas bebidas pueden tener en nuestra salud. Las bebidas azucaradas, como los refrescos, las bebidas deportivas y las energéticas, presentan riesgos significativos para nuestro bienestar a largo plazo.
Estos riesgos incluyen el aumento de peso, la obesidad, la diabetes tipo 2, la gota, enfermedades cardíacas, problemas metabólicos, entre otros.
Es fundamental tomar decisiones informadas sobre nuestras opciones de bebidas y optar por alternativas más saludables, como el agua, infusiones sin azúcar o jugos naturales sin edulcorantes añadidos. Mantener una dieta equilibrada y moderar el consumo de bebidas azucaradas puede contribuir en gran medida a preservar nuestra salud general y prevenir enfermedades crónicas.
Recuerda, la hidratación adecuada es esencial, pero es esencial elegir sabiamente las bebidas que consumimos para cuidar nuestro cuerpo y promover un estilo de vida saludable.