¿En qué consiste la astenia primaveral?

La astenia primaveral es un problema que, aunque no es grave,  puede causar muchas molestias. Los médicos  lo llaman trastorno adaptativo ya que suele aparecer justo con la llegada de la primavera.

Síntomas de astenia primaveral

Realmente la astenia primaveral no es una enfermedad, es más bien un conjunto de síntomas o malestares, relacionados con el decaimiento en el ánimo de los seres humanos y la sufren casi la mitad de la población, según las estadísticas.

Algunas fundaciones como Alimentación Saludable, han aplicado instrumentos de medición para determinar el porcentaje de personas que la padecen. Esta fundación aplicó una encuesta a una muestra de 2.400 personas  y el resultado fue que el 37% sufría este trastorno.

¿Cómo se manifiesta la astenia primaveral?

La falta de energía es la principal molestia que produce la astenia primaveral, también la debilidad muscular, dificultad para conciliar el sueño, nerviosismo, dolor de cabeza, cambios de humor, falta  de apetito, cansancio y  tristeza sin motivo.

Por supuesto, que algunos de estos síntomas son indicadores de otras enfermedades, la diferencia está en que cuando se trata de astenia primaveral, estos suelen durar de dos a tres semanas, y solo aparecen cuando entra la primavera, si ves que estos malestares se prolongan, acude a un profesional especializado.

Pero ¿por qué ocurre este “bajón” en  los seres humanos por la simple entrada de una estación? Muy sencillo, al culminar el invierno, ocurre una subida brusca de la temperatura,  hay más luz solar, se producen cambios en los horarios  y  con ello el ritmo de vida.

El cuerpo para enfrentar esos cambios ambientales reacciona para protegerse y se siente agotado, por eso, una de las primerias molestias es el cansancio. Por otro lado, al salir el sol más temprano, las personas comienzan a incrementar sus actividades y a gastar más energía.

¿Quiénes padecen con más frecuencia la astenia primaveral?

Este proceso de adaptación del cuerpo al ambiente ocurre en ambos sexos, sin embargo, se ha observado que quienes más la padecen son mujeres, especialmente las más jóvenes, esto, debido a la madurez del cuerpo para adaptarse a cambios climáticos.

Por otro lado, quienes están más propensos a estos malestares son las personas que sufren de alergias, rinitis, soriasis o úlcera estomacal. También se ha relacionado la astenia primaveral con algunas enfermedades mentales y trastornos afectivos como la bipolaridad.

¿Qué hacer para aliviar la astenia primaveral?

Para aliviar las molestias de la astenia primaveral solo hay que seguir algunos hábitos en la alimentación y el estilo de vida. Seguir una dieta a base de legumbres, frutas y cereales integrales, te ayudará a encontrar suficientes vitaminas  y antioxidantes para combatir el cansancio.

Una buena hidratación también es recomendable, además de ingerir al menos 2 litros de agua mineral, puedes beber caldos, té o zumos de frutas, que te mantendrán hidratado y evitarás el cansancio mental y la disminución en la concentración.

El café y otras bebidas estimulantes, se deben evitar ya que pueden ocasionar excitación nerviosa y estimular el  cansancio. También se puede acudir a la jalea real, levadura de cerveza o polen, ya que actúan como revitalizantes y te ayudarán a estar más despejado.

La actividad física también es importante. El ejercicio te pondrá en forma y activará todo tu organismo, una simple caminata bajo el sol, subirá tu ánimo y te revitalizará, treinta minutos serán suficientes para elevar la energía.

Son muchas las cosas que puedes hacer para subir tus niveles de energía pero lo más importante es que ordenes tus hábitos y te retires a descansar temprano luego de una cena ligera. Por último, mantén la temperatura de tu habitación en unos 20º y así tendrás un sueño reparador.