Lo que el bebé escucha deja marcas en su cerebro

Los niños, y sobre todo los lactantes, son los más receptivos y capaces de absorber todo a su alrededor. Tanto los estímulos externos como las muestras de afecto o incluso la energía negativa y el mal humor son captados y forman parte del desarrollo del bebé. Esta información está respaldada a su vez por el tono de la voz, los gestos y el sentido, lo que finalmente se traduce en un idioma que el niño aprenderá para siempre.

El bebé comienza su proceso de aprendizaje comunicativo desde muy temprana edad, la información que percibe del mundo se convierte en su experiencia de la vida y sobre la vida. Todas las expresiones comunicativas que se manifiesten al niño, incluyendo los susurros, el sonido de la voz de su madre o su padre, la música, la lectura de cuentos e historias del abuelo, se transforman en los mecanismos que el niño entiende como procesos para traducir las emociones y sentimientos.

La interrelación que el bebé recién nacido tiene con su entorno directo, generalmente la voz de sus padres, se quedará grabada para siempre en su cerebro, dejando huellas que duran toda la vida. Por ello no se debe subestimar el poder de las palabras y el poder que tienen los bebés para moldear su cerebro conforme al entorno.

Cómo aprovechar la comunicación para favorecer la formación del cerebro del niño. Durante las horas del día, y en cada rutina que realicemos podemos aprovechar ese momento para trabajar favorablemente la comunicación con el bebé.

Cómo estimular el cerebro con el lenguaje adecuado

Para estimular el desarrollo cerebral del infante, podemos aprovechar los momentos pequeños pero muy importantes, en los que no duerme, y que está abierto de par en par para percibir el mundo al rededor, generalmente cuando percibe necesidades básicas y su madre acude con él.

una madre junto a su bebé

Lo que puedes hacer

  • Procura que tus palabras tengan un tono suave, con mensajes positivos y tendencias a llenar de armonía el hogar.
  • Debes intentar tener contacto visual con el bebé, hablarle directamente ya sea mientras juegas con él, lo cambias y vistes o cuando lo alimentas. Esta interacción es de las más frecuentes y debes saber cómo aprovecharla.
  • Los gestos y caricias a la hora del baño son de suma importancia, en ese momento el bebé está muy receptivo y puede aprender mucho a cerca del cariño.
  • Busca que el bebé tenga momentos de risas y mucho humor, esto dejará marcas muy positivas en su cerebro, desde las cuales puede aprender sobre el amor y el bienestar.

Lo que deberías evitar

  • Evita el regaño o el llamado de atención severo, en cambio puede indicar con la palabra NO todo aquello en lo que debería tener un límite.
  • Hablar con tonos extraños, emulando caricaturas y diciendo palabras que no suenan claras ni se entienden puede ser una mala idea, lo mejor que puedes hacer es hablar de manera clara con el bebé, esto deja una huella mucho más positiva en su cerebro.

La voz de mamá acompaña día a día al niño desde que es un feto, gracias a que el líquido amniótico ayuda a conducir el sonido, Por ello la importancia de tener en claro desde que momento empezamos a dar ejemplos y a dejar marcas en el bebé, para el resto de su vida.

La importancia de acompañar las palabras con gestos

niños comunicándonse

Los gestos, junto al tono de la voz que usamos al comunicarnos deben ir en conjunto al momento de comunicarnos con el bebé. El lenguaje verbal irá respaldado con actos que sustenten a las emociones positivas que se grabarán en el cerebro del bebé o niño.

Cosas que debes tener presentes al hablarle

  • Sonreír mientras le hablas es una de las mejores decisiones que puedes tomar.
  • Darle tiempo para que responda, que reacciones de algún modo así el también aprende a interactuar y entender.
  • Imitar sus modos de comunicación también puede ser muy útil para que grabe en su cerebro que está siendo comprendido desde su infancia y que puede esperar de los demás comprensión.

Mejora tu “babytalk”

mujer embarazada

[mks_dropcap style=»rounded» size=»14″ bg_color=»#81d742″ txt_color=»#000000″]El baby-talk (o en inglés, motherese) es el nombre que se usa para designar un subcódigo lingüístico que emplean los adultos y los niños mayores de 5-6 años, de forma espontánea, cuando se dirigen y comunican con niños más pequeños.[/mks_dropcap]

Esta palabra en inglés resume el diálogo que tenemos con un bebé, y es algo que todos realizamos sin ser conscientes de ello. Nuestra forma de llevar a cabo esta comunicación es natural, ya que estamos preparados para enseñar y preparar a nuestra propia especie a desarrollar el sentido del habla y la comunicación, pero hay ciertos modos que pueden afectar.

Naturalmente realizamos sonidos que puedan estimular las reacciones del niño, por ejemplo el sonido que producimos con voz aguda capta la atención y puede incluso provocar reacciones placenteras en el niño como carcajadas, y a eso lo hacemos de manera innata.

Lo mejor que puedes hacer para trabajar en el desarrollo del cerebro del bebé incluso antes de su nacimiento, es cuidarte como madre y llevar un estilo de vida tal como quisieras que él lleve en su edad adulta, al fin y al cabo, ya lo está absorbiendo de ti, aún antes de nacer.