Qué es la terapia vibratoria y por qué ayuda mucho a recuperar la densidad ósea en mujeres posmenopáusicas

La osteoporosis es una enfermedad que afecta a los huesos, haciéndolos más frágiles y propensos a fracturarse. Se estima que una de cada tres mujeres mayores de 50 años sufre de osteoporosis, y que esta condición es responsable de más de 8 millones de fracturas al año en el mundo.

La menopausia es un factor de riesgo para desarrollar osteoporosis, ya que la disminución de los niveles de estrógeno provoca una pérdida acelerada de masa ósea.

Por eso, es importante que las mujeres postmenopáusicas adopten medidas preventivas para cuidar su salud ósea, como llevar una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente y evitar el tabaco y el alcohol.

¿Qué es la terapia vibratoria?

La terapia vibratoria es una técnica que consiste en aplicar vibraciones mecánicas de baja intensidad y alta frecuencia sobre el cuerpo, con el objetivo de estimular la formación y el mantenimiento de los huesos.

Se trata de una modalidad no invasiva, segura y fácil de usar, que se puede realizar en casa o en centros especializados.

La terapia vibratoria se basa en el principio de que los huesos se adaptan al estrés mecánico al que están sometidos, aumentando su densidad y resistencia.

Al exponer el cuerpo a vibraciones, se genera una fuerza que actúa sobre los huesos, provocando una respuesta osteogénica, es decir, una mayor actividad de las células encargadas de producir tejido óseo.

¿Qué beneficios tiene la terapia vibratoria para las mujeres postmenopáusicas con osteoporosis?

Varios estudios científicos han demostrado que la terapia vibratoria puede tener efectos positivos sobre la salud ósea de las mujeres postmenopáusicas con osteoporosis. Algunos de estos beneficios son:

  • Mejora la densidad mineral ósea, especialmente en la columna vertebral y la cadera, que son las zonas más afectadas por la osteoporosis.
  • Reduce el riesgo de fracturas, al fortalecer los huesos y mejorar el equilibrio y la coordinación.
  • Alivia el dolor asociado a las fracturas vertebrales, al reducir la inflamación y estimular la circulación sanguínea.
  • Mejora la calidad de vida, al favorecer la movilidad, la independencia y el bienestar psicológico.

¿Cómo se realiza la terapia vibratoria?

La terapia vibratoria se puede realizar mediante diferentes dispositivos, como plataformas, cinturones o chalecos vibradores. Estos aparatos emiten vibraciones que se transmiten al cuerpo a través del contacto directo o indirecto con los pies o el tronco.

La duración y la frecuencia de las sesiones varían según el tipo de dispositivo y las características individuales de cada persona.

En general, se recomienda realizar entre 10 y 20 minutos al día, entre 3 y 5 veces por semana. Es importante seguir las indicaciones del fabricante y del profesional sanitario que supervise el tratamiento.

La terapia vibratoria es compatible con otros tratamientos para la osteoporosis, como los medicamentos o los suplementos de calcio y vitamina D.

Sin embargo, no es adecuada para todas las personas, ya que puede tener contraindicaciones o efectos secundarios en algunos casos. Por ejemplo, no se recomienda para personas con marcapasos, implantes metálicos, embarazo, trombosis venosa profunda o tumores óseos.

La terapia vibratoria es una opción interesante para las mujeres postmenopáusicas con osteoporosis, ya que puede ayudar a prevenir y tratar esta enfermedad, mejorando la salud ósea y la calidad de vida.

Sin embargo, antes de iniciar esta terapia, es conveniente consultar con un médico especialista que evalúe la conveniencia y la seguridad del tratamiento para cada caso.