La diverticulitis es un trastorno doloroso y perturbador en el tracto digestivo, una enfermedad del colon, que puede tratarse eficazmente con la dieta de la diverticulitis. Mientras que algunas personas experimentan molestias constantes, otras experimentan síntomas de diverticulitis que disminuyen y luego estallan.
La dieta y una variedad de factores de riesgo pueden aumentar tus posibilidades de sufrir diverticulitis, especialmente después de los 40 años. Por el contrario, una dieta para la diverticulitis combinada con hábitos de vida saludables puede tratar esta afección de manera similar a como una dieta SCD puede ayudar a sanar el sistema digestivo.
¿Qué es la diverticulitis?
La diverticulitis es la infección de los pequeños sacos de divertículos que recubren el tracto digestivo. Nacemos con divertículos colónicos, pero cuando se desarrolla un divertículo en el tracto gastrointestinal, se conoce como diverticulosis, y cuando los divertículos se inflaman o infectan en el tracto gastrointestinal, la diverticulosis se convierte en diverticulitis.
Los divertículos rara vez causan problemas o molestias graves a menos que se inflamen o infecten, en cuyo caso el diagnóstico de diverticulosis se diagnostica como diverticulitis, como lo muestra la investigación de gastroenterología.
Se cree que el 10 por ciento de personas tan sólo en E.U. mayores de 40 años, se ven afectados por la enfermedad diverticular. La tasa continúa aumentando a través del envejecimiento. En casos de una infección grave, se pueden necesitar antibióticos además de un cambio en la dieta.
Muchas personas encuentran alivio limitando los alimentos que provocan brotes y centrándose en alimentos que se digieren fácilmente. Piensa en los divertículos como sacos de almacenamiento de placa, muy parecidos a los que pueden obstruir las arterias, excepto que residen típicamente en la parte inferior del intestino grueso.
Al igual que con las arterias obstruidas, es importante primero limpiar el área y luego continuar con una dieta saludable.
Los sacos de divertículos pueden bloquearse con materia fecal , lo que permite que se acumulen bacterias y provoque una infección. A medida que los sacos crecen, ejercen una presión cada vez mayor sobre las paredes del intestino, lo que provoca dolor, gases, molestias abdominales y otros síntomas de diverticulitis.
Esta presión aumenta durante las deposiciones, y ten en cuenta que el estreñimiento es tanto un síntoma como un factor que contribuye al empeoramiento de los síntomas.
Si no se trata, la infección y la perforación pueden provocar cicatrices en el tracto digestivo, donde el tejido cicatricial puede causar un bloqueo parcial o completo. Es por esto que es esencial hacer los cambios necesarios para ayudar a sanar tu tracto digestivo.
Síntomas de la diverticulitis
En las primeras etapas, los síntomas leves de la diverticulitis aguda pueden tratarse con reposo y la dieta para la diverticulitis. La diverticulitis grave o recurrente puede eventualmente requerir cirugía para aliviarla.
Es por eso que es esencial estar atento a las señales de advertencia y comenzar a hacer cambios en la dieta y el estilo de vida tan pronto como sea posible, incluso cuando surge una diverticulitis aguda.
Si experimentas dos o más de los siguientes síntomas, es posible que tengas diverticulitis:
- Cambio marcado en los hábitos intestinales
- Dolor abdominal severo
- Calambres
- Sensibilidad en la parte inferior del abdomen
- Náusea
- Alternancia de diarrea y estreñimiento
- Fiebre y/o escalofríos
Causas de la diverticulis
¿Qué causa la diverticulitis? La dieta occidental típica de hoy a menudo consiste en alimentos altamente procesados, azúcar y grasas no saludables. Este tipo de dieta contribuye al desarrollo de divertículos, una infección que puede tener síntomas en el recto.
Además de una mala alimentación, existen otros factores de riesgo a considerar:
- Envejecimiento
- Obesidad
- Fumar
- Medicamentos recetados, incluidos opiáceos, esteroides y antiinflamatorios no esteroideos.
- Falta de ejercicio aeróbico regular.
Todos estos factores de riesgo, combinados con una dieta carente de fibra necesaria y alta en grasas animales, pueden conducir al desarrollo de divertículos del tamaño de una canica en el tracto digestivo.
La inflamación, infección y fuga resultantes en la cavidad abdominal son, en el mejor de los casos, incómodas y tienen el potencial de causar complicaciones graves.
Suplementos para tratar la diverticulitis
Si bien una dieta curativa para la diverticulitis es muy importante, los siguientes suplementos resultarán de gran ayuda si se hace junto a una dieta especial.
Vitamina D
Se ha sugerido que las personas que tienen niveles bajos de vitamina D pueden correr un mayor riesgo de desarrollar diverticulitis. La insuficiencia y deficiencia de vitamina D son problemas comunes, por lo que es una buena idea controlar tus niveles con un simple análisis de sangre. Entonces sabrás cuánta vitamina D necesitas tomar. Las fuentes alimenticias de vitamina D incluyen pescado graso (caballa, atún, salmón), huevos, algunos champiñones e hígado.
Olmo americano
Los nativos americanos han utilizado el olmo resbaladizo durante siglos tanto externa como internamente para calmar los problemas digestivos y aliviar la tos y el dolor de garganta.
Hoy en día, se recomienda para aliviar los síntomas de la ERGE, la enfermedad de Crohn, el SII y el malestar digestivo. Comienza tomando 500 miligramos tres veces al día durante el transcurso de la dieta para la diverticulitis. Asegúrate de tomarlo con un vaso lleno de agua u otro líquido transparente.
Áloe
El aloe en forma de jugo ayuda en la digestión, ayuda a normalizar los niveles de pH, regulariza el procesamiento intestinal y estimula las bacterias digestivas saludables. Es importante evitar el jugo de aloe vera con «látex de aloe», ya que puede causar calambres estomacales severos y diarrea.
Se recomiendan alrededor de 12 a 16 onzas por día de jugo de aloe; más que eso puede irritar aún más tu sistema.
Raíz de regaliz
La raíz de regaliz reduce los niveles de ácido estomacal, puede aliviar la acidez estomacal y actúa como un laxante suave para ayudar a limpiar el colon de desechos. Esta raíz ayuda a aumentar la bilis, ayudando en la digestión mientras reduce los niveles de colesterol. Toma 100 miligramos diarios cuando experimente síntomas de diverticulitis.
Enzimas digestivas
Además de curar tu colon de la diverticulitis, el objetivo general de la dieta, los suplementos y los cambios en el estilo de vida contra la diverticulitis es alentar a tu tracto digestivo a funcionar de manera óptima.
Las enzimas digestivas ayudan a descomponer los alimentos, lo que permite absorber los nutrientes. Las personas con problemas de digestión pueden tomar suplementos digestivos que contengan enzimas esenciales para facilitar la digestión.
Probióticos
Se deben agregar probióticos vivos a la dieta para ayudar a contrarrestar la sensibilidad a los alimentos y aliviar el malestar digestivo, incluido el estreñimiento, los gases y la hinchazón. Los probióticos son bacterias saludables que tradicionalmente recubren tu tracto digestivo para combatir infecciones.
Si tienes diverticulitis, necesitas una afluencia de estas bacterias para ayudar en la curación de tu colon y prevenir la recurrencia de la enfermedad.
El árbol de incienso (Boswellia serrata)
El árbol de incienso (Boswellia serrata) es una hierba con propiedades antiinflamatorias que pueden ser útiles. Tomar según las instrucciones del paquete.
Ajo
El ajo tiene habilidades antimicrobianas naturales, pero dado que también contiene altas cantidades de ciertos carbohidratos que pueden alterar el sistema digestivo, se sugiere un suplemento de alicina pura.
Curcumina
La curcumina es el extracto de la cúrcuma. Puedes usar curcumina como suplemento agregarla a su comida en forma fresca o seca.
Suplementos de fibra
Los suplementos de fibra pueden ayudar a aumentar la ingesta de fibra. Los suplementos de fibra soluble como la linaza y el salvado de avena pueden ser menos irritantes que las opciones insolubles (p. ej., psilio, glucomanano). Pregúnta a tu médico cuál puede ser mejor para ti.
Glutamina
La glutamina es un aminoácido que ayuda a la función intestinal, aunque no hay evidencia de que pueda reducir específicamente los síntomas de la diverticulitis. Se sugiere una dosis de 400 mg cuatro veces al día entre comidas, pero primero habla con tu médico.
Linaza
La linaza tiene un alto contenido de fibra y es un laxante que forma volumen, lo que puede acelerar las heces a través de los intestinos. Una dosis de 15 gramos diarios puede ser útil en el tratamiento de la diverticulosis.
Uña de gato
La uña de gato ( Uncaria tomentos ) tenía poderes antiinflamatorios. Evita esta hierba si estáa embarazada, tienea una enfermedad autoinmune o tienea leucemia.
Homeopatía para la diverticulitis
Si deseas probar remedios homeopáticos, hay algunos designados para la diverticulitis. Uno es la Belladona, que puede aliviar los calambres y el dolor abdominal. Bryonia puede ser útil si tu dolor abdominal empeora cuando se mueve y mejora con el calor.
El dolor abdominal agudo y tipo cólico que mejora con la presión puede aliviarse con Coloquíntida. Consulta a un médico homeópata para descubrir los mejores remedios adecuados para ti.
