A partir de los 30 años, la piel comienza a envejecer rápidamente, por lo que es necesario que añadas a tu rutina de cuidados principios activos como el ácido hialurónico, las vitaminas C, E y el retinol.
¿Miras con envidia a tu amigo o amiga cuyo rostro aún no muestra signos de envejecimiento incluso cuando se acercan a los cuarenta? ¿Notaste que alguien más tenía líneas de sonrisa grabadas en su piel ya en sus veintes? El envejecimiento visible en la piel es muy individual, pero la nutrición y el cuidado de la piel siempre tienen un gran efecto.
La piel produce naturalmente colágeno, la principal proteína del cuerpo, que asegura la regeneración de la piel, pero también de las articulaciones y los huesos. Sin embargo, la producción de colágeno disminuye alrededor de los treinta años.
La disminución en la producción de colágeno en particular se ve a menudo como sequedad de la piel y las primeras líneas, que no desaparecen como por arte de magia con una buena noche de sueño o unas relajantes vacaciones en la playa.
Nutrientes indispensables para tu piel
Los siguientes nutrientes son ideales para incorporarse a temprana edad, ya que sus efectos son duraderos y retrasan el envejecimiento.
1. Ácido hialurónico
El ácido hialurónico (HA) es un glicosaminoglicano presente de forma natural en el tejido conectivo del cuerpo. HA es el componente principal de la estructura de la piel, manteniendo la piel suave y brillante. Además, HA también juega un papel importante en el proceso de reparación de heridas y problemas de la piel.
Con la edad, este ingrediente disminuirá gradualmente, lo que hará que la piel del rostro se hunda y aparezcan arrugas con facilidad. Es por eso que ves la piel más seca a medida que envejeces.
Los dermatólogos recomiendan usar productos de belleza que contengan HA para reponer los nutrientes de la piel. El ácido hialurónico se encuentra en muchos productos diferentes para el cuidado de la piel, desde tónicos, sueros hasta cremas. Este ingrediente se absorbe fácilmente a través de la piel, rellenando las patas de gallo, las arrugas y ayudando a que la piel sea más firme y juvenil.
2. Vitamina C
La vitamina C es un poderoso antioxidante que ayuda a proteger la piel del daño de los radicales libres, el sol y los agresores ambientales. Este ingrediente también promueve la producción de colágeno, aumenta la elasticidad de la piel, hace que la piel sea más firme y suave.
La vitamina C se puede absorber a través de la dieta diaria y los productos de belleza para la piel. Este es un ingrediente activo que se absorbe fácilmente en el lugar, unifica el tono de la piel, hace que la piel sea más firme. Sin embargo, este ingrediente activo tiene fuertes propiedades contra las quemaduras solares, por lo que debe usarse con protector solar para evitar el oscurecimiento de la piel.
3. Vitamina E
La vitamina E es un nutriente esencial para el organismo. La vitamina E trabaja para apoyar el sistema inmunológico y aumentar la circulación sanguínea. Además, la vitamina E también tiene la capacidad de combatir la oxidación, inhibir el envejecimiento de las células de la piel, limitar las arrugas y mejorar la salud de la piel.
Complementar con productos de belleza que contengan vitamina E ayuda a restaurar y regenerar la piel, desvanece las manchas oscuras, las pecas, aporta una piel blanca y rosada.
4. Retinol
El retinol es un derivado de la vitamina A, que es un ingrediente activo que tiene efectos antienvejecimiento y reductores de arrugas en la piel. El retinol no se absorbe en la piel como los ingredientes mencionados anteriormente, sino que actúa como un exfoliante en la superficie de la piel.
El retinol ayuda a estimular la regeneración de nuevas células de la piel, lo que reduce la flacidez y el envejecimiento de la piel y la vuelve más firme y suave. Sin embargo, el retinol puede causar algunos efectos secundarios cuando se usa, como piel seca, descamación, acné, entre otros efectos. Deberías consultar a un médico y probar la sensibilidad de la piel antes de usarlo. Evita usar retinol en áreas sensibles de la piel, como alrededor de los ojos y los labios.