5 consejos para construir una relación de confianza con tus hijos

Todos los padres en algún momento tienen problemas de comprensión con sus hijos. La confianza es en este caso garantía de relaciones familiares saludables y una forma segura de superar todas las dificultades y conflictos.

Cómo construir una buena relación con tus hijos

La buena comunicación es lo que destaca en una familia funcional, más que incluso el aparente orden que en muchas familias se promueve, pero sin tener casi comunicación entre los miembros de la misma.

La confianza de los niños y los padres es la base sobre la que se construye un ambiente familiar próspero. Es imperativo crear y cultivar una relación sincera y de confianza con todos en el hogar.

5 consejos para generar confianza con tus hijos

Existen algunas reglas, fundamentos o principios que pueden asegurar que podamos llevar una relación más agradable con nuestros hijos.¡

1. Enseña a tus hijos cosas buenas con el ejemplo

Probablemente, cada uno de nosotros ve regularmente a padres que obligan al niño a hacer algo. Esto no es malo, pero si prefieres sentarte en el sofá por la noche, en lugar de leer o hacer la tarea con tu hijo, es poco probable que escuchen tus consejos y, además, cumpla con tus solicitudes. Practica lo que tú mismo predicas y ese ejemplo que das quedará más marcado en tus hijos de lo que imaginas.

2. Aprender a escucharlos

Escucha a los niños, porque si no haces esto y no tomas en cuenta su punto de vista, entonces los niños encontrarán a quienes lo harán. No hables con dureza sobre algo significativo para el niño, por ejemplo, sobre sus amigos.

Trata de entender su punto de vista y, si no te gusta, explica el por qué. Lo principal es no crear conflictos y no juzgar a los niños: deben sentirse cómodos y seguros junto a sus padres.

3. No mientas

Es muy fácil perder la confianza de un niño, pero ganarla es problemático. Desde los primeros días, debes ser sincero y honesto con los niños, luego el niño confiará en ti y hablará de sus experiencias.

Cuando un niño pregunta si le va a doler un pinchazo de aguja, es mejor decir la verdad: te va a doler, ten paciencia, el dolor será poco. Y explícale que con la ayuda de un análisis de sangre, el médico podrá curarlo más rápido.

4. No asustes a los niños con castigos

Podríamos poner el ejemplo de que el niño o joven no hizo caso, y ya le habías advertido que le quitarías el teléfono o la computadora. ¿Puedes hacerlo realmente, es viable hacerlo? ¿No crees que la requiere, sobre todo hoy para estar llevan tareas en línea? Si no podrás cumplir con lo que dices, ni siquiera digas eso.

En el peor de los casos, el niño no se tomará en serio tus amenazas y perderás el control sobre él, y el lado débil de las amenazas y castigos es que siempre requerirás aumentar la dosis para seguir consiguiendo efecto, por lo tanto llegará un momento en que no podrás cumplir con lo que dices, y el niño no aprenderá realmente cuáles son los límites.

5. Recompensa la sinceridad que ves en ellos

Es importante hacerle entender al niño, desde pequeño, que todo lo que haga tendrá consecuencias, y que si reiteradas veces realiza algo que no tiene permitido, por las reglas de la casa, tendrá una consecuencia para él. Sin embargo, es más importante aún que él comprenda que los castigos o las llamadas de atención serán diferentes si él mismo reconoce lo que hizo mal, sin necesidad de tener que descubrir quien lo hizo.

Es importante tratar de comprender al niño, independientemente de lo que haya hecho, para comprender sus motivos. También es importante explicar con calma las consecuencias de determinadas acciones.