A veces, el término «narcisista» se usa para describir a un ex no deseado o a un compañero de trabajo molesto. Y, por supuesto, algunas personas muestran signos de narcisismo, como falta de empatía y tendencia a ser insensibles a las críticas. Pero solo unas pocas personas, aproximadamente el seis por ciento de la población, son diagnosticadas con la forma patológica de narcisismo, el trastorno narcisista de la personalidad.
Las personas con trastorno narcisista de la personalidad son manipuladoras en sus relaciones personales y profesionales hasta el punto de conseguir lo que quieren y poder mantener cualquier conversación sobre sí mismas y su superioridad.
Efectos negativos de ser criados por padres narcisistas
Cuando eres el hijo adulto de un padre narcisista, el paso más importante es aprender a dejar ir la culpa. La psicoterapeuta Erin Leonard dice que alguien criado por un narcisista puede tener problemas para confiar en sus propios sentimientos e instintos.
Los narcisistas pueden ser difíciles de detectar porque tienden a poner mucha energía y esfuerzo en mantener su reputación y parecer normales, pero es especialmente difícil reconocerlo en las personas más cercanas a nosotros.
Los padres con este trastorno tienden a ser hábiles en el uso de frases narcisistas que distorsionan la realidad de manera que hacen que sus hijos duden de sí mismos y de su percepción, a menudo presentándose como padres cariñosos y preocupados.
1. La baja autoestima
Los hijos adultos de padres narcisistas a menudo tienen baja autoestima, sentimientos de culpa por ser supuestamente egoístas y problemas para establecer límites. Aprender a ser consciente de cuándo estás dudando de ti mismo «puede ser todo lo que se necesita para que una persona confíe en sus sentimientos y restablezca los límites saludables».
2. La culpa
Aprender a dejar ir la culpa con la ayuda de un terapeuta es la clave para la curación. Explorar los límites de un padre narcisista puede ayudarte a establecer expectativas realistas para tu futura relación.
3. Falta de conocimiento sobre nuestras propias emociones
Hacer frente a un padre narcisista a menudo crea la necesidad de disociarse para la autopreservación. Como resultado, identificar emociones y poder conectarte con los propios sentimientos es más un desafío.
4. El sacrificio de la propia identidad
Algunos adultos crecen, pero quedan atrapados en el papel que tuvieron que asumir cuando eran niños. Siguen siendo extremadamente sacrificados en sus relaciones. Sus voces, preferencias, opiniones, deseos, sueños, etc., todos se inhiben, porque eso es lo que sus padres narcisistas esperaban de ellos.
5. La elección de pareja se verá condicionada
Según la terapeuta Wendy Behary, LCSW, ser criado por narcisistas puede afectar a las parejas que elijas más adelante en la vida. Por ejemplo, algunos tratarán de reflejar la dinámica que tuvieron mientras crecían, simplemente porque están familiarizados con ella.
Esto podría conducir a una relación controladora o tóxica, especialmente si las personas se encuentran constantemente saliendo con narcisistas.
Por otro lado, aquellos que reflejan los rasgos narcisistas de sus padres en la edad adulta pueden elegir una pareja de buenos modales o pasiva en un intento de tener el control de sí mismos.
