7 señales de que confundes amor con abuso emocional

El amor y el abuso claramente no pueden parecerse, sin embargo, cuando hay de por medio sentimientos, sean buenos o malos, podemos comprender que la línea que los separa puede desdibujarse, por lo que puede resultar fácil que una persona se crea enamorada de quien más le hace daño.

Mujer en medio de una relación con abuso emocional

Solo entendiendo la compleja relación entre la pareja abusiva y la víctima podemos comenzar a deshacer las consecuencias negativas del apego al trauma. Tratando de ver qué conecta a las víctimas con sus parejas abusivas podemos ayudarlas a liberarse de las cadenas del abuso emocional y físico.

¿Cómo podemos perdurar en una relación que nos lastima?

El apego al trauma ocurre cuando dos personas se enfrentan juntas a situaciones crecientes, intensas, peligrosas y aterradoras. En situaciones en las que el abuso se alterna con el amor, la pareja abusiva se vuelve dura y abrupta, pero también alterna este comportamiento con amor y bondad.

Por otro lado, la pareja que experimenta esta alternancia, tiende a aferrarse a esta «pequeña dosis de bondad«. A pesar del comportamiento abrumadoramente cruel y abusivo de su pareja, tiende a ver y sobreestimar las pepitas de bondad y amor que recibe.

Signos de que estás confundiendo abuso con amor

Estas suelen ser las características principales de los actos de abuso emocional que se suelen confundir con amor, con migajas de bondad que la víctima recibe a cambio.

1. Crees que es tu culpa que sean abusivos

Si crees que eres responsable de su comportamiento, y lo justificas atribuyendo a tus actos y pensamientos la razón de su comportamiento, podrías estar viviendo la relación de pareja de un sometido o esclavo, que debe actuar y obrar en favor del buen humor y el correcto comportamiento de su pareja, de lo contrario recibirías un castigo.

2. ¿Crees que solo te critican porque quieren ayudarte?

Sin embargo, su constante frustración o subestimación frente a los demás no es una crítica constructiva. Especialmente si te hace sentir inútil. En una relación sana, su pareja te alentará, no te subestimará ni tratará de marcar tus errores y posibles defectos al frente de los demás.

3. Has dejado de expresar tus verdaderos sentimientos

Al comienzo de la relación, te sentías en igualdad con tu pareja. Hablaban y te expresabas para conocerse ambos y en medio de un ambiente de tolerancia. Pero ahora guardas silencio, no quieres meterte en otra pelea y sabes que ciertas cosas le molestarán y prefieres callarlas.

4. Pones sus deseos y necesidades por encima de los tuyos

Piensas siempre antes en él que en ti, ¿qué le gustaría comer y te apresuras a prepararlo? ¿Eliges qué película ver según el estilo de las películas que solo le gustan a tu pareja? ¿Asistes a los lugares que solo a la otra persona le atraen e interesan?

5. ¿Evitas hasta la más mínima cosa que pueda hacer enojar a tu pareja?

En este caso te darás cuenta de que estás tratando de ser condescendiente con alguno de tus comportamientos que puedan molestarlo para que no lo provoquen, lo que te hará perder la oportunidad de ser ti mismo y ser espontáneo.

6. Bajas tus estándares para estar con esa persona

Reduces o cambias tus actitudes y principios solo para estar con esta persona, que tú consideras que es el amor de tu vida.

Reduces tus demandas para que puedas encontrar un significado en la relación, ignorando así por completo tus necesidades.

7. ¿Crees que puedes cambiar la forma de ser de tu pareja?

Al comienzo de la relación, las cosas son tan diferentes. Los cónyuges abusivos demuestran que son amables y se preocupan por ti. Cuando esto cambia a lo largo del camino, todavía crees que podrás recuperar las buenas características de la persona, que recuperarás su buen yo. Pero este yo puede ya no existir, y en el peor de los casos, solo habértelo idealizado tú en la etapa del enamoramiento.