Alergia a la leche y cómo reconocer sus síntomas

El sistema inmunitario del ser humano está diseñado para combatir agentes extraños o antígenos que intenten invadirlo. En algunas ocasiones este sistema no tiene la capacidad para discriminar si ciertos agentes son buenos o malos, atacando aquello que no representa daño alguno para el cuerpo.

Mujer que presenta síntomas de alergia a la leche de vaca

En algunas ocasiones estas respuestas equivocadas suelen traer graves consecuencias e incluso pueden provocar la muerte.

Cualquier reacción o manifestación clínica posterior a la ingesta de algún alimento, son consideradas como reacciones adversas o reacciones desfavorables. Existen dos tipos, la alergia o la intolerancia y hay que tener  muy clara la diferencia entre ambos términos ya que son muy comunes  cuando hablamos sobre la leche.

Qué es la intolerancia a la leche

La intolerancia a la leche, es aquella respuesta desfavorable del organismo al consumo de esta sustancia, en donde los síntomas o manifestaciones clínicas, son de origen no inmunológicas, esta se debe a que la leche contiene lactosa.

Este compuesto es un tipo de azúcar que se encuentra en los productos lácteos, y para sintetizarla, el organismo necesita una enzima llamada lactasa, la cual es producida por el intestino delgado.

En algunos individuos la producción de esta enzima no ocurre de forma adecuada y la cantidad de lactosa ingerida con la leche no puede ser metabolizada, causando los síntomas de la intolerancia, que por lo general son cólicos o dolor abdominal, diarrea, nauseas, eructos y flatulencia.

Qué es la alergia a la leche

Ahora bien, la alergia a la leche, es la reacción de hipersensibilidad con respuesta inmunológica mediada por la inmunoglobulina E (IgE), el cual es  un anticuerpo que actúa contra los antígenos o sustancias que el cuerpo cataloga como dañinas, cuando en realidad no lo son. En este caso los antígenos o sustancias extrañas que entran al organismo y que producen las reacciones exageradas de estos anticuerpos, son las proteínas presentes en la leche de vaca.

Una persona puede desarrollar alergia a la leche incluso antes de su nacimiento  en el útero de su madre. La alergia, suele ser menos común que la intolerancia y representa solo el 15% de las reacciones adversas que alguien pudiera presentar al ingerir leche. Esta, ocupa el tercer lugar de los  alimentos productores de alergias, después del maní o cacahuate y el huevo, los cuales encabezan la lista.

Causas de alergia a la leche

Sirviendo un vaso de leche de vaca

Existen dos proteínas en la leche de vaca que pueden ser las causantes de la mayoría de las alergias de este tipo, la Caseína, que se encuentra en la parte solida y el Suero, que es la parte líquida de la leche.

La causa principal, es la administración de leche de vaca a temprana edad, también puede presentarse en niños que han sido alimentados mediante lactancia materna exclusiva, debido a que las proteínas presentes en la  leche de vaca o en otro tipo de lácteos como el queso y el yogurt que la madre consume, pasan al bebe a través de la leche materna y en niños que son alimentados con leche de fórmula.

También existen factores de riesgo que podrían incrementar las probabilidades de desarrollar alergia a la leche, como la existencia previa de otro tipo de alergias, dermatitis atópica o aparición de lesiones inflamatorias frecuente en la piel, la historia familiar, es decir que uno o ambos padres padezcan alergia a la leche o a cualquier otro antígeno y la edad del paciente como anteriormente fue descrito.

Cómo reconocer sus síntomas

Usualmente las manifestaciones clínicas de las alergias producidas por las proteínas de la leche, se evidencian a nivel del sistema digestivo, respiratorio o en la piel y la intensidad de aparición de dichos síntomas varía dependiendo de la persona y suelen manifestarse después del consumo de leche o sus derivados.

  • Síntomas digestivos: nauseas, vómitos y diarrea.
  • Respiratorios: secreción nasal, tos, dificultad para respirar, sibilantes (sonido que asemeja a un silbido, producto del paso del aire a través de las vías respiratorias con diámetro disminuido).
  • Síntomas dermatológicos: prurito o picazón, aumento de volumen o hinchazón, dermatitis atópica y otras erupciones cutáneas.

Complicaciones

La anafilaxia o shock anafiláctico constituye la complicación más importante y peligrosa de la alergia a la leche. Es una reacción alérgica muy grave, considerada como una urgencia médica que puede manifestarse en muy poco tiempo (minutos o segundos) después de la exposición a un alérgeno, está descrito en la alergia a la leche.

El paciente comenzara a experimentar picazón o urticaria, enrojecimiento, aumento de volumen generalizado, disminución de la presión arterial con frecuencia cardiaca acelerada, nauseas, vómito, diarrea, pérdida de conocimiento y por último la manifestación clínica más importante, responsable de la muerte de los pacientes que no son atendidos a tiempo, el aumento de volumen de la lengua y de la glotis que producen el cierre de las vías respiratorias superiores, evitando de esta manera el paso del aire y a consecuencia de esto la asfixia.