Beber kéfir diariamente para perder peso y evitar la inflamación

El kéfir es un alimento líquido fermentado con muchos beneficios para la salud. Consumido diariamente, el kéfir ayuda a fortalecer la inmunidad y apoya el proceso de pérdida de peso. Además, el calcio y los probióticos presentes en el kéfir son importantes para la salud del tracto digestivo y los huesos, previniendo problemas estomacales y osteoporosis.

Conoce los beneficios del kéfir para bajar de peso

Este yogur líquido proviene de las montañas del Cáucaso y se considera el «antiguo elixir de la longevidad«. Su nombre, «kéfir», significa placer o buen sentimiento. Ligeramente ácido y más ácido que el yogur clásico, el kéfir se puede consumir como tal o en la composición de batidos con diversas verduras o frutas.

Los beneficios del kéfir para perder peso y la salud en general

El kéfir es una excelente fuente de probióticos, también conocidos como «bacterias amigables». Alivian los síntomas del síndrome del intestino irritable, como la hinchazón y la diarrea.

Asimismo, el consumo diario de kéfir ayuda a regular la presión arterial, el colesterol y el azúcar en sangre, previniendo así muchas enfermedades crónicas asociadas a estos factores de riesgo.

El kéfir es bueno para la digestión

Los probióticos del kéfir pueblan la flora intestinal con bacterias beneficiosas y previenen los trastornos del tránsito intestinal. Además, a través del proceso de fermentación, el nivel de lactosa en el kéfir es mucho más bajo. Por lo tanto, el kéfir podría ser fácilmente consumido por personas con intolerancia a la lactosa.

No obstante, si se padece una enfermedad inflamatoria intestinal, es recomendable acudir al médico antes de consumir kéfir u otros alimentos fermentados, ya que existen situaciones en las que los síntomas pueden verse agravados por su consumo.

Ayuda a perder peso

Gracias a las muchas bacterias beneficiosas en la composición, el kéfir consumido todos los días puede mejorar el proceso de digestión e, implícitamente, ayudar a perder peso. Los estudios muestran que las personas que comen con frecuencia alimentos fermentados generalmente tienen un peso normal y un índice de masa corporal en los parámetros.

Mantiene huesos y dientes sanos

El kéfir es una excelente fuente de calcio y vitamina K, nutrientes que son muy importantes para la salud de los huesos. Junto con otros productos lácteos, el kéfir consumido a diario reduce el riesgo de osteoporosis y periodontitis, una enfermedad que te deja sin dientes.

Previene la inflamación en el cuerpo

Muchas enfermedades crónicas ocurren debido a la inflamación causada por una dieta desequilibrada y el tabaquismo. Se ha demostrado que el consumo de kéfir y otros alimentos probióticos reduce el nivel de estas inflamaciones.

Entre las enfermedades más comunes causadas por la inflamación se encuentran la artritis reumatoide, las enfermedades cardiovasculares, la enfermedad inflamatoria intestinal, la fibromialgia, el lupus y la enfermedad de Alzheimer.