¿No te gusta correr? Entonces prueba mejor con caminar. Las caminatas largas y regulares te ayudarán a quemar kilos de más y afectarán positivamente tu bienestar y salud.
Si deseas deshacerte de esos kilos de más, y recientemente te resulta difícil movilizarte para visitar el gimnasio, entonces sal a dar una caminata. Pero no de forma perezosa, con el celular en la mano y un perro con correa. Esto se trata de una marcha rápida y enérgica. Dicha actividad quemará calorías y mejorará tu bienestar general.
¿Cuántas calorías quemamos con las caminatas?
La cantidad de calorías que quemas con una caminata depende de muchos factores, incluidos edad, peso, sexo, salud, tasa metabólica o ritmo. En general, se supone que una persona que pesa 60 kg durante una caminata rápida (5-6 km / h), que dura 60 minutos, quema aproximadamente 200 kcal. El tipo de superficie sobre la que caminamos también es importante.
Al dar caminatas en la playa, quemamos más calorías que cuando caminamos sobre una superficie más estable (por ejemplo, pavimento). La técnica también es importante: durante la marcha, en la que comprometemos nuestros brazos para trabajar, quemamos más calorías que durante una caminata libre. La marcha nórdica es mucho más efectiva. Cuando se usa esta técnica una persona que pese 60 kg durante la hora de caminar quemará más de 300 kcal.
¿Qué más ganamos haciendo caminatas?
Durante las caminatas, liberamos tensión de los músculos, nos relajamos, oxigenamos el cuerpo, aumentamos la producción de endorfinas, es decir, la hormona de la felicidad, que es responsable del bienestar. Además, caminar regularmente desarrolla perfectamente los músculos de los muslos, pantorrillas y glúteos, mejora la circulación sanguínea y la eficiencia del corazón.
¿Cuántos pasos debes tomar durante el día?
Según los dietistas y médicos, así como las aplicaciones de podómetros y conteo de pasos, debemos hacer 10,000 pasos todos los días. Esta es una norma generalmente aceptada que te permitirá mantenerte saludable y disfrutar de una buena forma, pero cuanto más camines, mejor.
Por lo tanto, a veces vale la pena salir temprano de casa e ir a trabajar o a la escuela a pie y dar una caminata(si estamos demasiado lejos, simplemente podemos bajar del autobús una o dos paradas antes). Y si el clima no te permite caminar, puedes usar una maquinadora en el gimnasio.
Las caminatas nivelan la glucosa en sangre
La mayoría de las personas consumen grandes cantidades de comida durante la noche, que es cuando menos actividad física realizaremos tras la comida, la pasamos sentados, frente a un televisor o teléfono inteligente antes de ir a acostarnos.
Como resultado, el nivel de azúcar en la sangre aumenta rápida y abruptamente y permanece elevado durante horas.
Un estudio realizado por la Asociación Americana de Diabetes descubrió que las personas con alto riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 tenían un aumento más lento en los niveles de azúcar en la sangre después de caminar en una cinta durante 15 minutos después de las comidas.
Los investigadores de Loretta DiPietro también descubrieron que esta pequeña caminata después de la comida fue aún más efectiva que una caminata de 45 minutos por la mañana o por la tarde.
Las caminatas estimulan la digestión
Otro estudio sugiere que los movimientos leves después de las comidas estimulan la digestión. No debe confundirse con la realización de ejercicio intensivos, y menos si se han incorporado alimentos que tardan más en ser digeridos (como proteínas y grasas).
Sheri Colberg-Ochs, investigadora de diabetes y ejercicio en la Universidad Old Dominion, explica: «El ejercicio promueve el peristaltismo, el proceso de transportar alimentos digeridos a través del tracto digestivo».
Además, una caminata corta puede contrarrestar los síntomas de reflujo, como la acidez estomacal, por lo tanto también podría hacernos sentir más saciados y por más tiempo.
