La temporada de lluvias no solo trae problemas de humedad a nuestro hogar, también es capaz de arruinar la pintura y causar manchas marrones en las superficies de hierro, que no es más que óxido que puede corroer la pintura.
Si bien el hogar es un reflejo de nuestra personalidad, en algunos casos no contamos con los recursos suficientes para realizar reparaciones inmediatas.
Sin embargo, cuando se oxidan las puertas o ventanas que están expuestas a la lluvia, pueden verse muy descuidadas.
En este artículo te mostramos algunos trucos caseros para que tus puertas y ventanas luzcan como nuevas sin necesidad de pintarlas de nuevo.
1. Cómo quitar el óxido del metal con papel de aluminio
Corta tiras de papel aluminio y haz bolitas de 3 cm aproximadamente, luego sumérgelas en agua por 1 minuto, sácalas y frota sobre las piezas oxidadas, repite según lo consideres necesario y verás como desaparece el óxido para prevenir tus puertas o ventanas del deterioro.
2. Cómo quitar el óxido del metal con limón
La acidez del limón es perfecta para destruir el óxido que se presenta en la herrería de las ventanas del hogar a causa de la lluvia, solo debes seguir los siguientes pasos:
Vierte el jugo de 1 limón en un tazón, agrega 1/2 cucharada de sal y revuélvelo bien.
Aplica en el área donde deseas eliminar el óxido y deja actuar de 1 a 2 horas.
Retira el óxido con un cepillo de dientes o una esponja.
3. Cómo quitar el óxido del metal con refresco de cola
Vierte 1/4 de Coca Cola u otro refresco de cola, en un recipiente y con ayuda de un cepillo colócalo sobre la superficie oxidada. Deja actuar entre 2 a 5 minutos. Utiliza una lija húmeda para eliminar todo el óxido de la superficie.
4. Cómo quitar el óxido del metal con bicarbonato
Vierte de 3 a 4 cucharadas de bicarbonato de sodio en un recipiente limpio, agrega 1/4 de agua y con ayuda de una brocha aplica sobre la superficie oxidada. Deja reposar durante 5 minutos, frota con un cepillo de dientes y límpialo luego.