El silencio de los padres como forma de violencia hacia el niño

¿Se puede equiparar el silencio con una especie de maltrato emocional? En realidad es posible, e incluso muchos padres lo podrían estar practicando, no de forma consciente, causando más daños que beneficios en la educación de sus hijos.

El silencio como violencia y cómo afecta a los niños

En general, todo lo que hacemos es solo una herramienta. El silencio, como muchas otras cosas, bien puede causar dolor y convertirse en un instrumento de violencia contra una persona.

Con el uso del silencio, muchos padres tratan de llevar un cierto orden y control frente a sus hijos.

A veces los padres usan el silencio como castigo

Cuando esto sucede, el niño pierde la sensación de seguridad, de apoyo, y la ansiedad comienza a crecer en él.

Los niños reciben la señal de que no importan sus sentimientos

De hecho, el silencio priva al niño de la oportunidad de estar de acuerdo, el conflicto crece, no tiene la oportunidad de hablar sobre sus sentimientos y emociones.

Tiene que aprender a hacer frente a esto por sí mismo, y el niño aprende una verdad simple, es mejor callar, es mejor no mostrar sus emociones ni sentimientos.

El niño se encierra en sí mismo

El niño aprende gradualmente a ser tranquilo, discreto, y finalmente se encierra por completo en sí mismo. Y luego los padres tienen que enfrentarse, como se suele decir, a la otra cara de la moneda. Cuando comienzan a tratar de construir un diálogo con el niño, se encuentran con una pared en blanco.

El problema se puede extender a su vida adulta

cambia tus recuerdos negativos

Y como siempre, no todo termina con la niñez, la niñez es solo el comienzo. Como adulto, ese niño transferirá el trauma de la persona rechazada a sus nuevas relaciones: relaciones con amigos, parejas.

Tendrá miedo de iniciar una relación en principio, y al iniciarlas, constantemente tendrá miedo de ser rechazado nuevamente. No es sorprendente que una persona con trauma de rechazo sea un candidato ideal para relaciones dependientes y codependientes.

Trabajar a través del trauma descrito implica resolver un conflicto intrapersonal

Tal persona no acepta esa parte de sí mismo que los adultos significativos no aceptaron. En consecuencia, la tarea de un psicólogo o psicoterapeuta, y su consulta y manejo en esta situación se muestra directamente, es encontrar esta parte oculta de una persona y ayudar a aceptarla.

La psicoterapia moderna tiene un número suficiente de prácticas y técnicas que pueden ayudar a curar el trauma del rechazo. Lo principal es no ser tímido para pedir ayuda.