El truco secreto de los chefs para hacer papas fritas crujientes fácilmente en casa

La papa es probablemente el alimento más consumido en el mundo. Se puede declinar y confeccionar de mil y una maneras. Por lo que mucha gente te dirá que las papas fritas todavía ocupan el primer lugar en las preferencias principales de la gente.

Cómo hacer unas papas fritas crujientes

A primera vista, parecen fáciles de preparar. Cortadas en palitos, se sumergen en un baño de aceite y listo. Sí, es un poco simple. Porque, precisamente, para evitar que queden demasiado aceitosas, blandas o completamente quemadas, hay reglas específicas a seguir, como señala Damien Desmarchelier, chef del suroeste de Francia. Y eso es incluso antes de que las arrojes a la sartén. ¿Quieres saber el secreto del chef para hacer papas fritas, sabrosas, doradas y crujientes en casa? Sigue leyendo.

Reglas de oro para preparar papas fritas en casa

Cuándo quieres probar buenas papas fritas, quieres que sean suaves por dentro y crujientes por fuera. No queremos que se desmoronen en la sartén. Y, sorprendentemente, a pesar del auge de las sartenes antiadherentes, muchas personas creen que las sartenes normales son más adecuadas para freír papas.

Así, para conseguir una ración de patatas fritas, crujientes y con un aspecto agradable, hay que tener en cuenta ciertas reglas de oro.

Primera regla importante: elige con mucho cuidado el tipo de papas. Según los cocineros experimentados, las papas harinosas con pulpa amarilla son las más adecuadas para freír. Así que hay que pelarlas correctamente y cortarlas según su preferencia.

Otra regla fundamental: lava tus palitos de papa varias veces para eliminar la mayor cantidad de almidón posible. Luego colócalas sobre una toalla de papel para que absorba la más mínima gota de agua.

¿Cuál es el famoso secreto del chef para tener ricas papas fritas?

Simplemente espolvorea unas tres cucharaditas de sal en la sartén y deja que se caliente así durante 5 minutos. Revuelve con el mango del utensilio para cubrir todo el fondo. Es esta ligera abrasión la que evitará que las papas se peguen a la sartén mientras se fríen. Este truco también se usa cuando quieres freír chuletas o bistecs. Luego se quita la sal con una toalla de papel. También recuerda limpiar bien la sartén con un paño seco.

¿Cómo freír unas buenas patatas fritas crujientes?

Realizada esta ingeniosa operación, ahora hay que verter el aceite. Dale tiempo para que se caliente antes de sumergir las papas fritas en él. No es el instinto de todos, pero algunos aconsejan tapar la sartén para ayudar a freír. De lo contrario, algunos palitos de papas fritas pueden quedar crudos.

Primero fríe las papas a fuego medio al principio, luego aumenta gradualmente el fuego para que queden crujientes. Es mejor usar una espátula de madera para voltear las papas fritas. Si las quieres tiernas por dentro y crujientes por fuera, la cocción en dos tiempos es fundamental: por ello, haz una primera inmersión durante 7 minutos a fuego medio (160°C). Escúrrelas y vuelve a sumergirlas durante 2 o 3 minutos aumentando el calor (180°C). Esta segunda fritura traerá precisamente el crujido y el dolor dorado de las papas fritas.

Es bueno saber: para que tus papas fritas no se peguen, colócalas en pequeñas cantidades en la sartén. No olvides revolverlas de vez en cuando. La sal y otras especias se espolvorean justo después de la cocción. Ten cuidado, la sal puede ablandar las papas rápidamente si se agrega en medio de su preparación.