¿Este medicamento común podría estar matándote?

El ibuprofeno es un medicamento que pertenece al grupo de los antiinflamatorios no esteroideos (AINE). Se utiliza para aliviar el dolor, la inflamación y la fiebre causados por diversas condiciones, como dolores de cabeza, artritis, cólicos menstruales, lesiones deportivas o resfriados comunes.

El ibuprofeno se puede comprar sin receta médica en diferentes presentaciones, como tabletas, cápsulas, jarabes o supositorios.

La dosis recomendada varía según la edad, el peso y la intensidad del dolor o la inflamación. Por lo general, se recomienda tomar el ibuprofeno con alimentos o con un vaso de agua para evitar irritar el estómago.

Ibuprofeno: ¿Cuáles son los riesgos de su consumo?

A pesar de ser un medicamento muy popular y efectivo para aliviar el dolor y la inflamación, el ibuprofeno no está exento de efectos secundarios y contraindicaciones. Algunos de los efectos secundarios más comunes del ibuprofeno son:

  • Náuseas, vómitos, diarrea o estreñimiento.
  • Dolor de estómago, úlceras o sangrado gastrointestinal.
  • Mareos, somnolencia, dolor de cabeza o nerviosismo.
  • Erupciones cutáneas, picazón o reacciones alérgicas.
  • Retención de líquidos, aumento de la presión arterial o insuficiencia renal.
  • Problemas hepáticos, anemia o alteraciones en la coagulación.

Estos efectos secundarios pueden ser más graves o frecuentes si se consume el ibuprofeno en dosis altas, durante períodos prolongados o junto con otros medicamentos que puedan interactuar con él.

Por eso, es importante consultar con el médico antes de tomar ibuprofeno si se tiene alguna de las siguientes condiciones:

  • Alergia al ibuprofeno o a otros AINE.
  • Antecedentes de úlceras, sangrado o perforación gastrointestinal.
  • Enfermedades del corazón, del hígado o del riñón.
  • Hipertensión arterial, diabetes o colesterol alto.
  • Asma, pólipos nasales o enfermedades respiratorias crónicas.
  • Embarazo, lactancia o planificación familiar.

Si se consume en dosis altas y de forma constante

Si se consume ibuprofeno de forma constante y en dosis altas, pueden surgir varios problemas graves de salud. Algunos de los riesgos y complicaciones potenciales incluyen:

  1. Daño gastrointestinal: El ibuprofeno puede irritar y erosionar el revestimiento del estómago y el intestino delgado, lo que puede llevar a úlceras, sangrado gastrointestinal y perforaciones. En casos extremos, esto puede provocar hemorragia interna y ser potencialmente mortal.
  2. Problemas renales: El ibuprofeno puede afectar la función renal y aumentar el riesgo de desarrollar enfermedad renal crónica. En dosis altas y a largo plazo, puede causar daño renal agudo, insuficiencia renal y complicaciones graves, como síndrome de Stevens-Johnson o necrosis papilar renal.
  3. Riesgo cardiovascular: El consumo crónico y en dosis altas de ibuprofeno puede aumentar el riesgo de problemas cardiovasculares, como hipertensión arterial, insuficiencia cardíaca, ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. Esto es especialmente relevante en personas con antecedentes de enfermedades cardíacas o factores de riesgo preexistentes.
  4. Reacciones alérgicas graves: Aunque son poco comunes, las reacciones alérgicas graves, como el síndrome de Stevens-Johnson y la necrólisis epidérmica tóxica, se han asociado con el uso de ibuprofeno. Estas reacciones pueden ser potencialmente mortales y requieren atención médica inmediata.
  5. Toxicidad hepática: En dosis altas y prolongadas, el ibuprofeno puede causar daño hepático, incluyendo hepatitis medicamentosa, necrosis hepática y fallo hepático agudo. Estas complicaciones pueden ser graves y poner en peligro la vida.

Ibuprofeno: ¿Cómo evitar sus efectos nocivos?

Para minimizar los riesgos asociados al consumo de ibuprofeno, se deben seguir las siguientes recomendaciones:

  • Tomar la dosis más baja y durante el menor tiempo posible para controlar el dolor o la inflamación.
  • No superar la dosis máxima diaria de 2400 mg en adultos y 40 mg por kilogramo de peso en niños.
  • No combinar el ibuprofeno con otros AINE, como aspirina, naproxeno o diclofenaco, sin indicación médica.
  • No consumir alcohol ni tabaco mientras se toma ibuprofeno, ya que pueden aumentar el riesgo de sangrado gastrointestinal.
  • Informar al médico y al farmacéutico sobre todos los medicamentos que se estén tomando, incluyendo los que se venden sin receta, los suplementos y las plantas medicinales.
  • Suspender el ibuprofeno y acudir al médico si se presentan síntomas de alergia, sangrado gastrointestinal, problemas cardíacos o renales u otros efectos adversos graves.

El ibuprofeno es un medicamento útil y seguro si se usa correctamente y bajo supervisión médica.

Sin embargo, su consumo indiscriminado puede tener consecuencias negativas para la salud. Por eso, es importante informarse bien sobre sus beneficios y riesgos antes de tomarlo y seguir las indicaciones del médico y del prospecto.

Referencias:

Ibuprofeno: MedlinePlus medicinas: https://medlineplus.gov/spanish/druginfo/meds/a682159-es.html
Tabla de dosificación del ibuprofeno para la fiebre y el dolor: https://www.healthychildren.org/Spanish/safety-prevention/at-home/medication-safety/Paginas/Ibuprofen-for-Fever-and-Pain.aspx