La diferencia entre estar sola y sentirse sola

Estar sola y sentirse sola. Cuál es la diferencia… quiero darte una noticia: el mundo ha subestimado la soledad. Nos han creado la fantasía en la que solo podemos ser felices en pareja. Hemos creído en la imagen en donde ser mujer significa tener a alguien a tu lado. Aquí te digo el secreto mejor guardado: Tú eres tu media naranja.

una mujer sola leyendo un libro y disfrutando la vida

A veces, estar sola es mejor que estar mal acompañada…

Hay una parte del cuento de hadas que me falta… tengo la foto de la boda y la famosa frase: fueron felices para siempre. ¿Será que Cenicienta se lanzó alguna otra escapadita hasta la media noche para estar sola? Y… ¿será que Blanca Nieves, a pesar de rodearse de enanos, en algún momento se sintió sola?

Sentirse sola significa que estamos esperando que algo nos llene nuestra vida. Es ese.. “algo me falta”. Pudieses estar rodeada por una multitud y te sentirías sola.  Nos sentimos así porque seguimos creyendo que el amor viene dentro de otro cuerpo en forma de: pareja o hijo o trabajo o amigos o padres o…

La diferencia entre sentirse y estar sola, es que la segunda implica la ausencia de seres vivos a tu alrededor. Es decir, es un hecho físico y un estado que hemos desdeñado.  El instante en el que te haces consciente de que tu soledad es un regalo para encontrarte contigo, es el principio de la felicidad.

Dividi-bavidi-bu… la sensación de soledad desaparece

Ser tu mejor compañera es la varita mágica transformadora de la sensación de soledad en plenitud.  Considéralo como punto de partida para que abandones la idea de pertenecer a la orfandad y que, por lo tanto, tienes que salir corriendo a comprar la zapatilla de cristal, el vestido-lámpara y la calabaza para que, con carácter de urgencia, puedas conseguir compañía.

¡No se trata de convertirte en una heroína impenetrable-súper-poderosa que no necesita de nada ni de nadie! Se trata de re-conocer a la mujer que se ama, se valora, se entiende y es capaz de hacerse feliz a sí misma.

 Dónde se encuentra el no sé qué… que me falta

Si no sabes quererte, probablemente, no podrás querer a otros… Solo podemos dar aquello que tenemos.  Si no eres capaz de darte amor, aquél espacio vacío por el cual te sientes tan sola tardará en completarse.

Te apuesto a que te habías olvidado de buscar en alguien… en ti. Quizás te encuentres traspapelada en algún cajón o en un bolso entre la lista del mercado, el biberón o el pintalabios.

Aprende a mirarte, a escucharte y a gozarte. Invítate un café, regálate flores, escribe en la palma de tu mano tu número de teléfono y llama… ¡háblate bonito! Empieza a cortejarte. Tú eres tu media naranja. Tú eres tu tapa del frasco. Tú eres tu alma gemela.