Receta de mantequilla de almendra casera

Aprende con esta sencilla receta a preparar una mantequilla de almendra casera paso a paso, un alimento saludable que puedes tener a tu disposición para darle sabor a tus comidas sin dejar de cuidar tu dieta.

Mantequilla de almendra

Si estás tratando de elegir alimentos más saludables, uno de los primeros bastiones para una correcta alimentación es el desayuno y que mejor que hacerlo con una mantequilla de almendra, que puedes preparar en casa.

Cómo preparar mantequilla de almendra

La mayoría de la gente toma para el desayuno una tostada con mantequilla, olvidando que contiene grasas saturadas y colesterol, los dos ingredientes de la dieta que aumentan el nivel de colesterol en la sangre. Realizar pequeñas modificaciones como cambiar los alimentos, pueden hacer una gran diferencia en tu salud. Se puede comenzar con una mantequilla casera de almendras crudas, repleta de vitaminas,  proteínas, fibra y antioxidantes.

Ingredientes:

  • 3 tazas de almendras crudas (no tostadas) sin sal. Preferiblemente blancas, sin la cáscara ya que le puede dar un color marrón y poco amargo
  • Endulzante al gusto
  • Sal al gusto
  • Agua al gusto
  • Procesador de alimentos

(Rinde alrededor de 1,5 tazas)

Instrucciones:

  1. Añadir las almendras en un procesador de alimentos y pulsar para picar muy bien.
  2. Mezclar las almendras picadas durante unos 10-15 minutos, raspando los lados cuando sea necesario. De la almendra se obtendrá el aceite y a partir de ahí la mantequilla líquida.Si se prefiere una mantequilla más sólida, cuando se ve que la almendra comienza a esparcir el aceite (como en la cuarta foto), se añaden unas gotas de agua y se procesa de nuevo, hasta obtener una consistencia similar a la mantequilla. Cualquier otro elemento que se quiera añadir, hay que hacerlo al final. Para mezclar la miel con la mantequilla hacerlo con la cuchara (sin procesador).
  3. Añadir sal o stevia / edulzante al gusto y ponla en un recipiente herméticamente cerrado en la nevera.

Redacción: Vida Lúcida