Lo que ocurre cuando no se lavan bien las frutas y vegetales

Como cultura general, siempre nos enseñan que debemos lavar las frutas y vegetales antes de consumirlas. Pero realmente no nos explican el por qué, y solemos pensar que es simplemente para quitar la suciedad, sin embargo, las razones pueden ser mucho peores.

Lavando los vegetales antes de cocinarlos

¿Por qué lavamos las frutas y vegetales?

Lo que muchos no saben es que lavar los vegetales se debe a que en su superficie se encuentran muchos parásitos. Estos parásitos pueden ser protozoarios y amebas que son patógenos perjudiciales para la salud.

En la tierra habitan numerosos microorganismos, entre ellos, parásitos que provienen de las heces de animales —incluso de humanos infectados—. Estos parásitos, como parte de su ciclo biológico, se adhieren a la superficie de frutas y hortalizas e ingresan a nuestro organismo cuando las consumimos, provocando así diversas enfermedades.

Modo de transmisión

El modo de transmisión de la mayoría de los parásitos es oro-fecal. Esto quiere decir que se transmiten desde la vía fecal hacia la vía oral (la boca), ya sea por medio del consumo de alimentos o agua contaminada.

Estos parásitos al ingresar a nuestro organismo por la vía oral, llegan a nuestros intestinos donde se reproducen y sus huevos son liberados por medio de las heces para seguir perpetuando el ciclo.

Los perros, gatos y animales de granja son los que comúnmente contaminan la tierra con estos parásitos y por tal motivo es de suma importancia lavar bien las frutas y vegetales antes de comerlas.

Otras formas de contaminación

Los vegetales y frutas no siempre son contaminadas por medio de la tierra, en algunos casos se contaminan por animales como caracoles y babosas. Ciertos tipos de parásitos infectan a estos moluscos reproduciéndose en su sistema y posteriormente son excretados.

Estos animales suelen alimentarse de las hojas de la lechuga, zanahoria, coliflor, etc y liberan los huevos de los parásitos en la superficie de la hortaliza o fruta.

Otra forma muy frecuente en la que las frutas y verduras son contaminadas es lavándolas con agua no procesada. En el agua existen incontables protozoarios que producen enfermedades como la disentería. El habitad natural de este tipo de parásitos es el agua, que al igual que en el caso anterior, es contaminada con las heces.

Infecciones alimentarias por consumo de alimentos contaminados

Uno de los principales riesgos de consumir frutas o verduras que no se hayan lavado adecuadamente es el norovirus y salmonella, que son los patógenos más habituales.

El Centro para el control y prevención de enfermedades CDC, informa que:

«Comer frutas y verduras frescas proporciona importantes beneficios para la salud, pero a veces estos productos crudos pueden contener microbios dañinos, como SalmonellaE. coli, y Listeria. Las frutas y verduras frescas se pueden contaminar en cualquier etapa de su trayectoria desde la granja a la mesa, incluso por la contaminación cruzada en la cocina. Las que se lavan son más seguras, y las que se cocinan bien son seguras.»

Por lo tanto el riesgo de posibles enfermedades es una realidad que debemos tratar de evitar.

Para conocer a fondo más información sobre estas posibles enfermedades causadas por una intoxicación alimentaria, te invitamos a leer el artículo: alimentos contaminados por bacterias más comunes.

Recomendaciones

Los médicos recomiendan cocer muy bien los alimentos antes de consumirlos, ya que la cocción elimina cualquier patógeno que se encuentre en la carne.

¿Pero qué sucede con los vegetales que se consumen crudos?. En estos casos la recomendación es lavarlos muy bien con agua corriente, esto elimina la mayoría de los microorganismos de la superficie de las frutas o vegetales por simple arrastre.

El agua corriente de algunos países, sobre todos los países no desarrollados, no tiene un procesamiento adecuado que elimine los organismos patógenos que habitan en ella. Es por ello que el método más confiable para consumir vegetales o frutas de forma segura es dejarlos en remojo unos minutos en agua con vinagre o jugo de limón.

Estas sustancias tienen un PH ácido, el cual rompe las membranas celulares de la mayoría de los microorganismos. Este es un método eficaz para lavar este tipo de alimentos antes de consumirlos.