Tu sistema inmunológico debe combatir las enfermedades y ayudar al cuerpo a sanar y recuperarse rápido ante determinadas enfermedades. Pero el sistema inmunológico puede estar débil, poco activo, hiperactivo o incluso atacar al propio cuerpo por error. Los problemas del sistema inmunológico pueden causar síntomas, reacciones alérgicas o enfermedad persistente.
Síntomas de un sistema inmunológico que no funciona correctamente
Estos suelen ser algunos de los principales síntomas y problemas físicos, que presenta una persona con problemas en el sistema inmunológico.
1. Ojos secos
Los ojos muy secos pueden ser un signo de problemas con el sistema inmunológico. En el síndrome de Sjogren, el sistema inmunológico seca las lágrimas que mantienen sus ojos húmedos. Los ojos están secos, enrojecidos y pueden hacerte sentir que tienes arena. También puede desarrollar visión borrosa o incluso dañar la córnea.
2. Erupción cutánea
Una erupción de eccema con picazón es una reacción alérgica que significa que nuestro sistema inmunológico está hiperactivo. La psoriasis y la artritis psoriásica son enfermedades asociadas con un sistema inmunológico defectuoso. El sistema inmunológico ataca las células de tu propia piel con inflamación. Esto puede causar manchas rojas, escamosas y dolorosas llamadas placas.
3. Problemas estomacales o intestinales
Los síntomas estomacales e intestinales pueden ser signos de un problema inmunológico. La diarrea, el dolor abdominal, la hinchazón y la pérdida de peso son síntomas de la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa o la enfermedad celíaca, afecciones causadas por el sistema inmunológico cuando no trabaja de forma correcta.
4. Manos y pies fríos
¿Tus brazos y piernas se vuelven blancos o azules por el frío? En la enfermedad de Raynaud, el flujo de sangre a las manos y los pies puede ralentizarse en temperaturas frías, lo que hace que la piel se enfríe y se decolore. Es una enfermedad autoinmune, las manos y los pies fríos pueden significar que tu tiroides no está lo suficientemente activa debido al sistema inmunológico.
5. Perdida de cabello
Nuestro sistema inmunológico puede atacar al cabello desde la raíz y dañarlo, provocando alopecia areata o caída del cabello. El cabello puede caerse en pequeños parches en la cabeza o en cualquier parte del cuerpo. Otros problemas del sistema inmunológico, como la psoriasis en placas en el cuero cabelludo, también pueden causar pérdida parcial del cabello.
6. Sensibilidad al sol
Los problemas del sistema inmunológico pueden volverte muy sensible a la luz solar. Si padeces lupus, tu piel puede quemarse fácilmente incluso por una breve exposición al sol. El sol en la piel puede desencadenar un brote inmunológico de todos los síntomas del lupus, por lo que siempre se recomienda el uso de sombreros, lentes de sol, ropa para cubrir y protector solar con FPS alto para protegerse.
7. Dolor en las articulaciones
Las articulaciones repentinamente dolorosas, hinchadas y rígidas pueden ser un síntoma de artritis reumatoide (AR). En la AR, el sistema inmunológico inflama los tejidos que recubren las articulaciones. Esto provoca un fuerte dolor en las articulaciones.
8. Las heridas se curan lentamente
Si tu sistema inmunológico está inactivo o alterado, las heridas menores, como un corte, una quemadura o un rasguño, pueden sanar lentamente. Un sistema inmunológico saludable responde rápidamente a una herida y envía nutrientes para ayudar a la curación. Si tus heridas tardan mucho en sanar, es posible que tu sistema inmunológico no esté lo suficientemente activo.
9. La persona permanece mucho tiempo enferma
Las infecciones frecuentes, como los resfriados o la gripe, también pueden ser signos de un sistema inmunológico poco activo. Si tienes cuatro o más infecciones de oído cada año, infecciones crónicas de los senos nasales, neumonía dos veces al año o necesitas antibióticos dos veces al año o más, es posible que tu sistema inmune esté por debajo de su funcionamiento normal.
10. Fatiga
Es posible que te sientas cansado después de mucha actividad. Pero si a menudo estás agotado, incluso cuando duermes lo suficiente, es posible que tengas un sistema inmunológico lento.
La fatiga se produce cuando estás tan agotado que ni siquiera puedes cruzar la habitación. Un sistema inmunológico hiperactivo puede causar inflamación que causa esta fatiga extrema.